Analistas advierten que Castillo atraviesa un momento complicado y un desgaste precoz
Pedro Castillo asumió la presidencia de Perú el 28 de julio y al día siguiente juramentó a su primer gabinete ministerial, que desató de inmediato una serie de críticas y denuncias.
A dos semanas de que el izquierdista Pedro Castillo asumió la presidencia de Perú, dos analistas bolivianas consideraron que la nueva administración del vecino país está atravesando un momento complicado y un desgaste precoz.
“Encontramos una suerte de mucho desgaste, un desgaste muy precoz. (En el caso de Perú) son apenas dos semanas del gobierno de Castillo (…) y de forma inédita estamos asistiendo (…) a un desgaste muy precoz porque no se está cumpliendo con (el habitual) periodo de gracia o de luna de miel que se (suele) dar a procesos políticos nacientes”, dijo la comunicadora Verónica Rocha en contacto con el programa Piedra, Papel y Tinta de La Razón.
Mientras, la politóloga Susana Bejarano remarcó que “no le va a ser fácil a Castillo” gobernar su país porque ya “está en un momento tremendamente complicado por una cuestión social”.
Bejarano atribuyó esa situación al hecho de que las fuerzas populares –que están emergiendo en distintos países de la región, como Perú– se tienen que enfrentar a “una élite que tradicionalmente gobernaba”.
“Entonces, hay una serie de condiciones (de los prejuicios de esas élites) que el profesor Castillo no cumple, porque se parece más a la gente, se parece más al pueblo peruano y no se parece tanto a esas élites”, señaló la politóloga.
En la misma línea, Rocha afirmó que “coincide de alguna manera con Susana” porque, como el gobierno de Castillo es un “proceso naciente”, ahora está “enfrentando a las grandes estructuras de poderes fácticos”.
Estructuras de élites, poderes mediáticos y económicos “que por supuesto están todavía tremendamente montadas, son muy poderosas (…) y que van a dar batalla a propuestas que mayoritariamente vienen de izquierda y plantean muchas renovaciones”, indicó la comunicadora.
Castillo asumió la presidencia el 28 de julio y al día siguiente juramentó a su primer gabinete ministerial, que desató de inmediato una serie de críticas. Uno de los personajes más cuestionados es Guido Bellido, jefe del gabinete del flamante Gobierno e investigado por hacer supuestamente apología del terrorismo de Sendero Luminoso.
Pero no es la única autoridad criticada. Según una publicación de DW, “son más de 20 los nombramientos cuestionados en ministerios y entidades estatales por denuncias o por no contar con el perfil que se requiere para el cargo”. Entretanto, la incertidumbre por la economía del país también continúa debido a la acelerada devaluación del sol.