De visita en La Paz, el alcalde de Santa Cruz, Jhonny Fernández, consideró urgente una cumbre política nacional para la discusión de políticas públicas e incluso reformas a la Constitución. Por ahora, prefirió no hablar de candidaturas con miras a las elecciones de 2025.
“Soy el llamado para buscar la unidad”, afirmó el también jefe nacional de Unidad Cívica y Solidaridad (UCS) en entrevista con el programa Piedra, Papel y Tinta, de La Razón.
Consideró necesaria la modificación de la Constitución en aspectos relativos a la Justicia y a la economía, aunque no se animó a decir cómo abordar la cumbre y en qué plazos.
Fernández, que recordó que en 2025 van a ser 30 años de liderar el partido que fundó su padre Max Fernández, incluso propuso el rediseño de la gestión pública de aquí para incluso 50 años.
“Tenemos que llegar a un país y a una administración del país digitalizados”, auguró.
Sobre su papel político en el nivel regional, recordó que nunca estuvo de acuerdo con el paro de 36 días propiciado por el otrora Comité Interinstitucional conformado por al Comité pro Santa Cruz, la Gobernación y la Universidad Gabriel René Moreno.
Afirmó que el paro, por Censo de Población y Vivienda en 2023, afectó más a los pobres. “Yo me paré duro, dije: a mí no me manejan; ustedes no manejan al alcalde”, recordó.
“No puedo romper principios por una coyuntura” y “dejemos posturas extremas y radicales”, insistió Fernández, quien fue tildado de traidor durante las jornadas de protesta, especialmente de parte del gobernador Luis Fernando Camacho.
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Consultado sobre su relación con el líder de Creemos, dijo que “lo que antes era fuerte, ahora es débil”.
Admitió que veía que la alianza de Camacho “iba con mucha fuerza, pero ahora todo se ha dividido”, especialmente en la Asamblea Legislativa, en la que hay distintas corrientes de la minoritaria Creemos.
Al evaluar la crisis de esa alianza, dijo que uno de los factores fueron “las malas decisiones que se toman”. «Hubo mal manejo de las comunicaciones, mucha agresividad, maltratar al adversario político o etiquetarlo buscando ventajas», cuestionó.
Consultado sobre la situación de encarcelamiento de Camacho, dijo que espera que pase esta coyuntura. “Pero, ¿en manos de quiénes estamos? De la Justicia, y ella tiene que trabajar con transparencia”, dijo.
Propuso resolver ese tipo de acciones políticas bajo políticas de Estado. “No puede ser que cada gobierno que entra (diga) ‘era mi enemigo, hay que destruirlo’. Y sale y entra el otro a destruir”, cuestionó Fernández.
En materia electoral, que ya genera debate en el país, el líder de UCS —ratificado por cinco años más— consideró inoportuno hablar de candidaturas. “Voy a hablar de candidaturas cuando esté por finalizar mi gestión”, adelantó.
Sin embargo, dijo que UCS trabaja en un plan de gobierno con miras a las elecciones generales de 2025. Informó que un equipo interdisciplinario terminó un diagnóstico de situación del país.
Sobre los afanes electorales, cuestionó que muchos políticos solo se juntan para las elecciones y deciden a último momento “un proyecto nacional”. Debemos abrir un escenario, pero “no una junt’ucha, de ver tres meses antes cómo se arma”, cuestionó.
Consideró que la gente “está cansada” de viejos políticos y cuestionó las encuestas que ya circulan en la opinión pública. “Ni siquiera me han tomado en cuenta”, bromeó.