Retienen a más de 10 técnicos en mina Porco
La concesión minera es administrada por Sinchi Wayra, socia de Glencore
La Paz – Trabajadores de la mina Porco, en Potosí, administrada por Sinchi Wayra, tomaron como rehenes a más de 10 técnicos hasta que la empresa destituya a dos funcionarios acusados de favorecer a una cooperativa de la región para que pueda acceder a la veta principal.
El dirigente Jaime Quispe, según la red ATB, confirmó la retención de los profesionales porque evidenciaron que dos ingenieros colaboraron con la cooperativa, que no tiene autorización para trabajar en la zona.
«Han estado favoreciendo a la cooperativa, tienen que aclararnos si trabajan para la empresa o en su defecto retirarse», indicó.
El sindicato de trabajadores de la mina Porco además decretó un paro de 48 horas que podría extenderse, si los ejecutivos de Sinchi Wayra no se hacen presentes y no proceden con la separación de los técnicos observados.
Porco junto a Colquiri y Bolívar son las dos concesiones mineras que explota la subsidiaria de la firma suiza Glencore a través de un contrato de arrendamiento.
Sin embargo, a partir de la vigencia de la nueva Constitución Política del Estado (CPE) los contratos de esta naturaleza deben modificarse y migrar a otros de riesgo compartido con participación mayoritaria del Estado.
Porco produce zinc, plata y plomo con una capacidad de 1.400 toneladas por día en promedio en sus plantas de tratamiento.
Debido a la caída de precios de los minerales en diciembre del 2008, la empresa despidió a 700 trabajadores y modificó los horarios de trabajo para evitar el cierre de operaciones y salir de la crisis.
El 17 de abril, comunarios de tres provincias de Potosí tomaron la mina San Cristóbal y derribaron cuatro contenedores de mineral exigiendo servicios básicos.
Los movilizados también demandaban que las empresas que transportan el mineral que se produce en la mina sean del lugar y que la empresa pague por el agua.
Algunos datos de la operación
Porco era una de las minas administradas en su momento por la empresa Comsur, de propiedad del ex presidente Gonzalo Sánchez de Lozada, luego pasó a Glencore.