Sociedad

Sunday 28 Apr 2024 | Actualizado a 23:33 PM

‘El ser padre me cambió toda la vida’

Historias. En el día dedicado a ellos, seis papás comparten su experiencia con La Razón

Por La Razón

/ 19 de marzo de 2011 / 05:00

Jorge venció al cáncer y ahora lucha por la ‘niña de sus ojos’

«Si estoy en este mundo es por ella, la niña de mis ojos; hoy mi lucha en la vida es por ella y por mi esposa», afirma Jorge Lea Plaza (24), padre de Hadassah Lea Plaza (5 meses) y esposo de Tatiana Cabezudo (22).

En febrero del 2003, Jorge supo de los médicos que sólo le quedaban cuatro meses más de vida. Un tumor maligno que había afectado su rodilla izquierda se expandió y llegó a su hígado y pulmones. Para él, vivir ya no tenía sentido porque además de su condena de muerte los médicos le informaron que producto del tratamiento podría quedar estéril, pero él nunca perdió la fe.

Tras la amputación de su pierna izquierda y un año de sesiones de quimioterapia, venció a la enfermedad. Era el 2005 y su primer milagro se había cumplido. «Pesaba 36 kilos, me estaba muriendo pero vi la mano de Dios», cuenta.

REgalo. Superado el mal nada parecía más importante, pero de pronto se produjo el segundo milagro, tal cual lo había soñado su madre: Jorge tendría una hija, y en efecto así sucedió.

El 16 de octubre del 2010 Hadassah vio la luz y llenó de felicidad la vida de sus padres. Ya no había razones para entristecerse. «Mi hija es uno más de los motivos que tengo para luchar en la vida, (su nacimiento es) una de las cosas más bellas que me pasó, es mi motor de cada día», afirma con una sonrisa.

Hoy Jorge realiza su proyecto de grado en Ingeniería Ambiental, trabaja en una empresa minera y tiene planes, junto a Tatiana, de convertirse en pastores y viajar por diversos lugares para transmitir su experiencia y difundir la palabra de Dios. Ese Dios que, dice, le hizo conocer México para hacerse tomografías y Francia para adquirir una prótesis.

Hasta que Arnold nació, Freddy no soportaba a los niños

«Antes de que mi hijo naciera, y desde que tengo uso de razón, no soportaba a los niños pequeños, no toleraba que lloren, no aguantaba el ruido que hacían cuando jugaban, perdía la paciencia cuando hacían sus berrinches, realmente quería que alguien los callara», confiesa Freddy Quintanilla (30).

El abogado de profesión jamás pensó que ver a su hijo salir del quirófano y acariciar su pequeña mano por primera vez le cambiaría la forma de ver la vida.

«El nacimiento de mi hijo me ha cambiado completamente, me he vuelto mucho más sensible y paciente», afirma.
Freddy afirma que la intolerancia hacia los infantes era en todo momento, cuando estaba con sus amigos que llevaban a sus hijos e incluso cuando se reunía con sus primos.

Freddy recuerda que la vez en que su pareja, Teresa Carrasco (40), le dijo que sería padre, lo primero que se le vinieron a la cabeza fueron los cambios que debía enfrentar de ahora en adelante en la vida. Eran pensamientos «muy ligeros», afirma, sin embargo, cuando el niño nació todo tuvo sentido y hasta comenzó a hacer planes para su futuro.

‘El jefe’. Freddy Arnold Quintanilla (3) nació el 1 de octubre del 2007. «Dejé de ser hombre en muchos aspectos para convertirme en papá, todo lo que hago y quiero hacer es por él, para él», dice el papá. Tal es así, agrega, que ha decidido llamarlo «mi pequeño jefe». Freddy admite que siempre sucumbe ante cualquier pedido que el niño le hace. De hecho se convierte en su genio de la lámpara: «Me dice algo, yo lo complazco».

Los familiares cuentan que padre e hijo dependen mucho uno del otro, comparten cosas, gustos y hasta se esperan mutuamente en casa. Hoy, Freddy dice que aprendió a apreciar a los niños, y que disfruta mucho de la compañía de otros niños.

Hoy que es padre, Diego aprendió a valorar a los suyos
Mientras conversa con La Razón, Diego Claure Durán (32) entretiene a su niña, Adriana Micaela Durán (2), que está resfriada y con desgano. Junto a su esposa, Daniela Castellón (27), visitaron el hospital Materno Infantil para que su pediatra la atienda.

«Recién, por cosas como ésta, me doy cuenta del sacrificio que han hecho mis padres y eso es algo muy importante. Lo que rescato de ambos son las atenciones que han tenido conmigo, especialmente cuando de niño enfermaba, sin contar los gastos que implica ello».

Ahora que es papá, la experiencia le ha enseñado a valorar el trabajo. Recuerda la paciencia que sus padres le brindaron cuando él hacía berrinches, los momentos alegres que pasó cuando festejaban su cumpleaños y las sorpresas que le brindaban cada Navidad con su regalo favorito.

«Todo empezó con el nacimiento de mi primer hijo, Gabriel Ignacio Durán, de seis años. Es una experiencia tan interesante, uno no nace sabiendo ser padre, sino que aprende las cosas, es poco a poco», afirma.

Familia. Diego asegura que ahora su mundo gira en torno a su familia, la que siempre soñó, desde que estudiaba Filosofía, junto a Daniela. Él no lo niega, le fue un poco difícil aceptar su nuevo rol. Antes de asumir este compromiso, sólo pensaba en él, en terminar sus estudios y divertirse con sus amigos.

«Ser padre es tan interesante, no voy a mentir que representa cierto grado de dificultad, pero es una experiencia muy linda y tiene sus connotaciones, tanto biológicas como sociales, porque repercute en el pensamiento de una persona, ya que se vuelve adulto».

Diego y Daniela son maestros, ambos se comprometieron a trabajar por el bienestar de sus hijos porque desean que ellos tengan una vida tranquila. «Estamos luchando junto a mi esposa, ahora vivimos por ellos», enfatizó.

La entrevista se interrumpe porque Adriana empieza a llorar, entonces papá la carga en los hombros y mamá le hace mimos y sonidos para que sonría pese al malestar.

‘Soy padrastro, pero mis hijas me enseñaron a ser responsable’

Juan Carlos Venegas (44) recuerda que cuando aún era soltero su mundo sólo giraba en torno a él. «Al no estar comprometido, uno puede disponer de su tiempo y hacer lo que más le gusta, pero cuando acepté ser padre me di cuenta de la responsabilidad que debía asumir».

Fiorela (10) y Matiel García (16) son las hijas de su esposa Lourdes Vera, con quienes vive hace un año. La palabra «padrastro» no existe en su hogar, pues ellas lo consideran su padre y a la vez, él, sus hijas.

Juan Carlos nunca tuvo hijos, pero en la práctica ya es padre de tres, el primero de un antiguo compromiso y dos más en la actualidad. «Yo siempre he tenido debilidad por los niños, me llevo bien con ellos», dice.

«A medida que las conocí me fui encariñando con ellas, me enamoré de la que va a ser mi esposa, y por ende de las niñas, este amor vino en paquete», sonríe. Afirma que, al igual que Lourdes, él está pendiente de la educación de las niñas, de su salud, les aconseja cuando considera necesario e intenta darles un buen ejemplo.

Una de las cosas que más disfruta Juan Carlos es jugar con Fiorela. Antes de empezar la entrevista cuenta uno de esos momentos: «Llegué del trabajo al mediodía y quería descansar, pero no pude porque Fiorela comenzó a rozarme la cabeza con un plato lleno de helado, sentí el frío, me levanté y empezó a jugar con mi cabello, me llevo muy bien con ella». Al ser Matiel adolescente, él mantiene una distancia.

Regalos. Juan Carlos ya recibió su regalo por el Día del Padre. Fiorela le hizo una artesanía con botones y ligas. Éste es el segundo obsequio que la niña le entrega para celebrar esta fecha. El año pasado «fabricó» un bonito  portalápices donde se lee «Para mi papá Juan».

Algo que el padre, su compañera y las niñas disfrutan es salir de viaje a Coroico, donde tienen una propiedad de descanso. Son momentos agradables, dice el papá, más cuando Fiorela y Matiel le piden jugar juegos de mesa como Dominó y ver películas toda una tarde, junto a su mamá.

Gracias a su hijo, Yhony se convirtió en un papá cariñoso

Yhony Yasmany (26) abraza con ternura a su hijo Franz (3) cuando éste le dice «Papá, te quiero». Entonces se ponen a jugar con su celular. «Hola, ¿quién es?», pregunta el pequeño. »Soy yo, tu papi», responde él y ambos ríen. Entonces, Julia Quispe, la mamá, llega a su encuentro. Ambos la esperaban en puertas del Hospital Materno Infantil.

«Desde que tengo 23 años siento que soy más cariñoso», dice Yhony. El 28 de agosto del 2007, a las 23.00 horas, la vida de este migrante de la provincia Pacajes dio un giro de 360 grados. Ese día escuchó el primer llanto de su bebé en un hospital de la zona Santa Rosa (El Alto) y su comportamiento cambió. «Era para no creer», señala.

Recuerda que de niño veía a su padre sólo en las noches para intercambiar un saludo, ya que éste trabajaba todo el día en la agricultura para mantenerlo a él y a sus otros ocho hermanos.

«Mi papá no me daba mucho cariño, más se preocupaba de trabajar; no tengo tan bonitos recuerdos con él, más recuerdo a mi mamá, cuando me cuidaba y cocinaba para todos», indica. Ahora el es completamente distinto.

Dice que el cariño con su hijo «es automático» y que «el amor se gana con amor». Su fórmula es sencilla: «Le doy todo mi cariño (a mi hijo) complaciéndole en lo que se pueda, dándole muchos besos y abrazos, (diciéndole) palabras de aliento; no le dejo de decir ‘hijito te quiero mucho’ todo el tiempo».

Actitud. Yhony recuerda que antes de tener a su primogénito era bastante serio, incluso torpe para expresar sus sentimientos, además de rebelde. «Sólo pensaba en bailar y también consumía bebidas alcohólicas con amigos».

Sin embargo, esa etapa quedó atrás, «ahora mi Franz entiende mis actos, si tomo me pregunta: ‘¿Por qué estás tomando papá?’. Se preocupa, entonces ya no lo hago más y evito darle un mal ejemplo, realmente ahora entiendo el amor que uno puede sentir hacia el otro».

El también vendedor de autopartes en la zona de San Pedro espera traer al mundo un hermano para Franz, aunque por el momento planea su boda con Julia, también pensando en su niño. «Pienso  tener más bebés, pero esto va a depender de nuestra economía; si me va bien en mi negocio de repuestos para autos, lo tendré;  ahora no se puede pensar mucho en eso», expresa y se sonroja.

Una hija enferma alimentó el amor y fortaleza de José

José Velasco (28) ama ser padre. Disfruta cada minuto que pasa con sus hijos y esposa, y no se cansa de decir que «vivir con ellos vale la pena».

José es comunicador y tiene una pareja de niños: Aylín Velasco (7) y Alexis Velasco, de cinco semanas. Está casado con Wendy Lazarte (28) y recuerda que antes de su matrimonio pasaba el día «durmiendo hasta la hora que quería», hasta que le tocó asumir la responsabilidad de la paternidad, con el agregado de que su primera hija presentó problemas de salud. Sin embargo, esto le hizo valorar aún más la vida y ahora pasa el mayor tiempo posible con su familia, en especial con Aylín.

Ella sufre de epilepsia (trastorno neurológico que deja una predisposición en el cerebro para generar convulsiones recurrentes) desde que tiene cuatro años. Recuerda que  Wendy presentó eclampsia (complicación en el embarazo caracterizada por hipertensión arterial) y la bebé nació con dos kilos de peso y 43 centímetros de tamaño. Ella actuaba como una niña normal hasta el día en que presentó sus primeras convulsiones. «Estábamos almorzando, entonces ella fijó la mirada, se puso tiesa y sintió que le faltaba oxígeno», cuenta José.

Tras una semana  internada en un hospital, los médicos le dijeron que sufría de esta enfermedad y que esto podría haberse originado en las complicaciones en su gestación. Aylín también presenta infección urinaria (gérmenes en la orina) e hipertensión pulmonar (presión arterial pulmonar).

«De joven nunca pensé que me iba a pasar esto, pero si Dios me lo ha dado, (entonces) es un desafío para que salga adelante; disfruto la vida, soy feliz siendo padre; mis hijos son mi mejor regalo», señala José.

Día a día. Por las mañanas lleva y recoge a su hija de la escuela  (en Ciudad Satélite, El Alto), y como trabaja por la noches, le ayuda a realizar sus tareas todas las tardes.
Cuando hablamos con él, una caja de lápices de colores estaban sobre la mesa, además de dos cuadernos, un libro, una goma y un tajador. Padre e hija estaban listos para revisar —como es costumbre— lo avanzado en la escuela. Luego, ambos salieron a dar un paseo e ir a jugar al parque.

Día del padre y  otros festejos en el país y el mundo

Papás
Se recuerda a San José
-En Bolivia se celebra a los padres cada 19 de marzo porque el calendario santoral señala que hoy está dedicado a San José de Nazareth, padre adoptivo de Jesús.

Carpintero
También en honor del santo
-En esta jornada, y también inspirados en San José, se agasaja a todos los carpinteros del país, dado que el santo mantenía a su familia con este oficio.

Radialistas
Un festejo desde 1958
n En 1958, la ciudad de Cochabamba fue sede del 1er Encuentro Nacional de Radialistas en el que el gremio tomó la decisión de celebrar su día cada 19 de marzo.

Festejo en junio
Una costumbre regional
-En la mayor parte de los países de América Latina, al igual que en Estados Unidos, Canadá y Perú, el   Día del Padre se celebra el tercer domingo de junio.

Festejo escolar
Los niños arman la fiesta
-Cada año, en esta fecha, los estudiantes del país preparan actos para agasajar a papá; la mayoría se desarrolló ayer y los niños prepararon sus propios regalos.

Oferta de productos
El comercio se mueve
-A diferencia del Día de la Madre, el festejo a los padres solía ser muy discreto y austero, pero en el último tiempo, el mercado se sumó a la fiesta con diversas ofertas.

Alemania
Dos celebraciones
-En Alemania hay dos celebraciones relacionadas con el Día del Padre. El Vatertag, que se festeja el 21 de mayo, y el Herrentag, que consiste en un viaje sólo de varones.

Origen
La idea original
-Joan Dood propuso la idea del Día del Padre en 1909. Con ello quería que existiera un día especial que honrara a su progenitor, William Dood, veterano de guerra.  

Otros países
Fechas diferentes
-En Brasil se celebra el Día del Padre cada segundo domingo de agosto; en Guatemala y El Salvador el 17 de junio y en República Dominicana el último domingo de julio.

Temas Relacionados

Comparte y opina:

¿EJ en septiembre?

Por La Razón

/ 28 de abril de 2024 / 00:18

Renovadas acciones de amparo y medidas cautelares están paralizando nuevamente y dejan en incertidumbre las Elecciones Judiciales (EJ). Según lo establecido en la ley transitoria, este 5 de mayo debe concluir la fase de preselección de postulantes en la Asamblea Legislativa Plurinacional. Y el TSE anunció que la votación popular sería en septiembre. Hay duda sobre tales plazos.

Desde hace un año, el proceso electoral para renovar el Órgano Judicial y el Tribunal Constitucional está a la deriva. Según el mandato constitucional, las elecciones debieron realizarse en 2023. Pero políticos y operadores del sistema, en especial del TCP, se encargaron de frenar, congelar y a la postre postergar la elección. Como no se eligieron nuevas autoridades, los actuales magistrados (cuyo mandato ya se cumplió) decidieron autoprorrogarse. Fue como un guion escrito desde el principio para boicotear el proceso.

Como efecto de un bloqueo de caminos realizado en enero, finalmente la bancada oficialista en la Cámara de Diputados viabilizó las truncadas elecciones. Se aprobó entonces una ley de consenso que trazó la ruta, sus fases y los plazos tanto para la preselección a cargo de la ALP como para la votación bajo responsabilidad del TSE. Así, se publicó la convocatoria, se recibieron más de 700 postulaciones, se verificaron requisitos y se resolvieron las inhabilitaciones. Hasta ahí todo conforme a lo previsto.

En medio de la evaluación de méritos, incluida una prueba de conocimientos, varios postulantes inhabilitados por incumplir requisitos activaron demandas en la justicia para la reconsideración de sus casos. Todas esas acciones prosperaron dejando en suspenso el proceso de preselección de postulantes. Y el plazo corre. Luego de calificar los méritos, la Comisión Mixta de la Asamblea debe aprobar su informe, que será la base para la elección, por dos tercios, en sesión plenaria. Queda solo una semana.

También puede leer: Un asunto oscuro

Es evidente que algunos actores políticos y operadores judiciales están empeñados en frenar sin fecha, nuevamente, las elecciones judiciales. Sería desastroso para la institucionalidad en el país en un contexto de alta desconfianza y de crisis. Por ello es sensato que la Comisión Mixta retome el proceso desde mañana. Tampoco sería una buena señal que se amplíen los plazos, ya que ello implica postergar la votación popular (quizás hasta octubre, lo que se superpone con las elecciones primarias).

Todos sabemos que las elecciones judiciales no solucionan la crisis del sistema de administración de justicia, pero al menos implican cumplir la Constitución y evitar que los autoprorrogados continúen degradando aún más el Estado de Derecho con sus decisiones a la carta. Por ello es fundamental que la ALP culmine pronto su trabajo de preselección con voluntad política y madurez democrática. Luego será el turno de la ciudadanía en las urnas. Y seguirá en agenda la cada vez más urgente reforma estructural del sistema.

Temas Relacionados

Comparte y opina:

Un asunto oscuro

Según la presidenta ejecutiva de YLB, la acusación fue fruto de una investigación técnica realizada a lo largo de dos años

Por La Razón

/ 25 de abril de 2024 / 06:59

La todavía incipiente industria del litio en Bolivia no puede salir de las sombras. Al violento arresto del exministro de Minería y exresponsable de la planta en la región de Lípez en Potosí, Luis Alberto Echazú, se ha sumado, ayer, la muerte del exgerente ejecutivo de Yacimientos de Litio Bolivianos (YLB). El tema se ha politizado y, ahora, judicializado, pero del negocio no hay más que promesas.

Los contornos del caso, la actuación presuntamente arbitraria e irregular de la Fiscalía el lunes, según denuncia del abogado de Echazú, así como las declaraciones de jerarcas y portavoces del ala evista del MAS, hacen pensar en intereses políticos ligados a la sorda pelea por el poder en el partido gobernante antes que en aquellos ligados al efectivo despegue de la industria del litio en el país. El intercambio de acusaciones, con y sin fundamento, en nada ayuda a reactivar el proyecto.

Lea también: Ley ‘antihombres’

El tono y el contenido de una “carta abierta” firmada por el exgerente de YLB, Juan Carlos Montenegro, otro de los imputados, antes de morir (incluyendo una última línea en la que pide perdón a sus seres queridos por el “dolor” que les causará “esta mi decisión”), hace pensar en que detrás de la acusación hecha el jueves de la semana pasada por la actual gerente del proyecto y el procurador del Estado, además de la sorprendentemente rápida actuación del Ministerio Público, hay mucho más que la búsqueda de justicia o de castigo a la corrupción.

Según la presidenta ejecutiva de YLB, la acusación fue fruto de una investigación técnica realizada a lo largo de dos años, asunto del cual ni ella ni su antecesor habían dicho nada anteriormente. Al ser conducido a celdas policiales, el exministro, ahora en detención domiciliaria, afirmó que “el Gobierno quiere ocultar tres años y medio” de parálisis en el que debería ser el proyecto más importante del Estado Plurinacional en los últimos años.

Coincidiendo con la denuncia de YLB contra exfuncionarios de la institución, el mismo día, el Presidente del Estado acusó a “potencias mundiales” y un “país vecino” de pretender controlar los recursos naturales del país, especialmente el litio, bloqueando las exportaciones y excluyendo a Bolivia en procesos estratégicos de comunicación. A la luz de lo sucedido en los últimos años, es evidente que el principal obstáculo está en el Estado y no fuera de las fronteras.

Mientras Chile se abre a las inversiones de riesgo compartido y se propone recuperar el sitial de primer exportador de litio en el mundo en los próximos dos años, y el presidente de Argentina busca entregar las reservas de su país a las transnacionales del sector, Bolivia todavía no ha mostrado cuál es su estrategia de industrialización y comercialización del preciado mineral, al extremo que ni siquiera ha transparentado los acuerdos (no contratos) que tiene con empresas chinas y rusas. Así, es imposible tener optimismo en el futuro del litio.

Comparte y opina:

Ley ‘antihombres’

Los datos son innegables y terribles: la violencia contra las mujeres, lejos de disminuir, persiste e incluso aumenta.

Por La Razón

/ 21 de abril de 2024 / 00:27

La penosa declaración del presidente del Senado, Andrónico Rodríguez, en sentido de que la Ley 348 es una ley “antihombres” (sic), puso en agenda la cuestión irresuelta de la violencia contra las mujeres. Rodríguez recibió fuertes críticas, pero también adhesiones. Lo preocupante es que fomenta a grupos antiderechos y pone en riesgo una norma que protege a las mujeres.

 La ley integral para garantizar a las mujeres una vida libre de violencia (Ley 348) fue promulgada por el presidente Morales en marzo de 2013. Su objeto es establecer mecanismos, medidas y políticas integrales de prevención, atención, protección y reparación a las mujeres en situación de violencia, así como la persecución y sanción a los agresores. Se trata de una ley avanzada, resultado de muchos años de lucha de las mujeres por sus derechos en una sociedad patriarcal y machista como la boliviana.

En 11 años de vigencia, la Ley 348 permitió el registro de centenas de miles de denuncias de violencia contra mujeres en el país. Según datos del Observatorio de Género de la Coordinadora de la Mujer, el año pasado hubo casi 52.000 denuncias. Los casos de violencia familiar o doméstica, que son la mayoría, se incrementaron en 193% entre 2013 y 2023. Cada día, en promedio, hay 142 denuncias de violencia contra mujeres, 30 agresiones sexuales, 104 embarazos de niñas y adolescentes. En 2023 se registraron 81 feminicidios.

Los datos son innegables y terribles: la violencia contra las mujeres, lejos de disminuir, persiste e incluso aumenta. Por ello son deplorables afirmaciones tan ligeras como que la Ley 348 es una “ley antihombres” o, peor, que “la violencia no tiene género”. Si bien existen acusaciones falsas contra hombres, e incluso detenciones arbitrarias presumiendo culpabilidad, ello no atenúa ni menos niega la abrumadora evidencia de que las mujeres son las victimas sistemáticas de actos de violencia en todas sus formas.

En su capítulo de derechos fundamentales, la Constitución señala con claridad que “todas las personas, en particular las mujeres, tienen derecho a no sufrir violencia física, sexual y psicológica”. Y establece que el Estado tiene la obligación de adoptar las medidas necesarias para prevenir, eliminar y sancionar la violencia de género.

Con ese mandato constitucional, la Ley 348 define mecanismos para proteger a las mujeres. Y traza la ruta para la denuncia, persecución y sanción penal de los agresores.

Es evidente que se requiere una reforma normativa y hay valiosas propuestas para el efecto. Pero sobre todo fallan los operadores del sistema judicial. Claro que debe evitarse que haya hombres inocentes en prisión, pero sobre todo que los feminicidas y violentos estén libres. Las polémicas palabras del presidente del Senado tendrían que servir para debatir el tema, mejorar la ley, garantizar en serio para las mujeres una vida libre de violencia y frenar las muy peligrosas campañas antiderechos.

También puede leer: Un vecino conflictivo

Temas Relacionados

Comparte y opina:

Un vecino conflictivo

El gobierno de Milei podría estar buscando consolidar su base política mediante el nacionalismo y el anti-izquierdismo

Por La Razón

/ 18 de abril de 2024 / 07:06

Días atrás, la ministra de Seguridad de Argentina, Patricia Bullrich, informó que había decidido reforzar la seguridad en la frontera con Bolivia debido a la supuesta presencia de cientos de militares iraníes en el país. La respuesta de la Cancillería boliviana fue tan rápida como mesurada, en evidente contraste con el tono que está adoptando el gobierno de Javier Milei.

Desde el inicio, la presidencia de Javier Milei ha sido notable no solo por sus políticas internas de shock, sino también por su manejo de las relaciones internacionales, especialmente con países latinoamericanos de gobiernos considerados izquierdistas. Sus controversiales interacciones con líderes regionales han generado un amplio debate sobre las estrategias diplomáticas y sus implicaciones tanto a nivel regional como doméstico.

Revise también: Los medios en cuestión

Primero, el intercambio de insultos con el presidente de México, Andrés Manuel López Obrador, provocó una rápida escalada de tensiones que afortunadamente no pasaron a más. Milei respondió a las críticas de López Obrador, quien había tildado a Milei de “facho conservador”, con términos igualmente duros, exacerbando las fricciones bilaterales. Este tipo de diplomacia de confrontación no solo socava las relaciones tradicionalmente cordiales entre Argentina y México, sino que también plantea preguntas sobre la estabilidad regional.

Por otra parte, las relaciones con Colombia se tensaron significativamente después de que Milei llamara al presidente Gustavo Petro «comunista asesino». Esta declaración provocó una pronta respuesta diplomática de Colombia, incluyendo el llamado de su embajador en Buenos Aires, lo cual subraya la seriedad del conflicto y el impacto en las relaciones diplomáticas; por ahora las relaciones entre ambos países están normalizándose y los respectivos embajadores han regresado a sus funciones.

Asimismo, la afirmación de la ministra Bullrich sobre la presunta presencia de militares iraníes en Bolivia añadió más leña al fuego, mostrando una tendencia hacia declaraciones provocativas que pueden tener serias repercusiones diplomáticas y de seguridad. Algo similar había ocurrido poco antes, cuando el presidente Milei afirmó que el gobierno de Chile iba a llevar a ese país a la pobreza por adoptar políticas socialistas. En ambos casos la respuesta fue pronta, mesurada y contundente.

En el frente interno, estas controversias internacionales parecen servir como una cortina de humo para desviar la atención de los problemas económicos graves que enfrenta Argentina, como la inflación y el estancamiento económico. Al centrarse en conflictos externos, el gobierno de Milei podría estar buscando consolidar su base política mediante el nacionalismo y el anti-izquierdismo, mientras posterga o minimiza la discusión sobre la necesidad de reformas económicas internas profundas.

Es posible que las tácticas de confrontación de Milei tengan un atractivo político inmediato entre ciertos sectores en Argentina que le son afines, pero los riesgos asociados a alienar a países vecinos y potenciales socios comerciales son altos, especialmente en el mediano y largo plazos, cuando el polémico mandatario ya no esté en funciones.

Comparte y opina:

Los medios en cuestión

Por La Razón

/ 14 de abril de 2024 / 00:20

El reciente estudio Delphi de la Fundación Friedrich Ebert (FES-Bolivia), realizado con líderes de todo el país, revela datos delicados respecto a los medios de comunicación y su desempeño. Además de una baja confianza, se percibe a los medios como promotores del conflicto y como actores políticos que informan en función a su agenda e intereses. La evaluación es crítica.

Hubo un tiempo en que los medios de comunicación y periodistas, en general, estaban en la cima de la confianza ciudadana. Junto con la Iglesia Católica, tenían muy alta legitimidad. Hoy es diferente: en la Delphi de la FES, solo el 7% tiene una confianza alta o muy alta en los medios. Para el 39% es regular. Y un mayoritario 54% confía poco o nada. Estos datos debieran preocuparnos. Si bien estamos mejor que otras entidades, la confianza es un bien preciado que los medios debemos recuperar y preservar.

En un contexto en que los medios digitales y las redes sociales tienden a desplazar a los medios de comunicación tradicionales como principal fuente de información, es necesario hacer un examen acerca de nuestro desempeño. ¿Cómo nos evalúan los líderes? Más de dos tercios, nada menos, sostienen que los medios informan en función a su propia agenda e intereses. Si sumamos el 13,5% que nos perciben como manipuladores, el saldo es muy negativo. Solo un marginal 7% cree que los medios informan con veracidad.

La baja confianza en los medios y la percepción de que informan más pensando en ellos mismos que en la sociedad, quizás se explican, entre otros factores, porque varios operadores mediáticos están polarizados y alientan la polarización. Lo vimos como tragedia en la crisis de 2019, cuando algunos medios y periodistas avalaron y hasta justificaron las masacres. Ello se reafirma en la Delphi: 86% de los líderes consultados sostienen que los medios promueven enfrentamientos y conflictos en el país.

Por si fuera poco, en estas percepciones reveladoras de la situación del campo mediático en Bolivia, casi nueve de cada 10 participantes en el estudio de la FES están de acuerdo con la afirmación de que los medios actúan como si fuesen actores políticos. Es tremendo. Para los liderazgos, la esencia de los medios se está perdiendo. En su balance, varios medios y periodistas están más cerca de la acción política que de la labor informativa. Eso, por supuesto, va en desmedro del periodismo.

Los estudios de percepción cualitativa y de opinión pública expresan tendencias generales en momentos determinados. Son útiles para la reflexión y el análisis. Y contribuyen a la autocrítica. Pero hay diferencias. Más allá de las percepciones aquí descritas, es meritorio el trabajo de medios que persisten en el empeño de cuidar y cultivar cada día los derechos a la comunicación e información. Como diario nos situamos en ese camino reafirmando nuestro compromiso con el libre ejercicio del oficio periodístico.

También puede leer: Un impasse inédito

Comparte y opina: