Los médicos retiraron larvas de moscas del rostro de Minor Vidal
Salud. Adelantaron que el sobreviviente podría ser dado de alta en dos o tres días
El médico especialista en cirugía plástica que lo atiende, Humberto García, señaló que tras su arribo a esa ciudad a las 15.30 del sábado, Minor fue tratado para limpiarle totalmente la herida en el rostro. Ayer, cerca a las 14.00 se le suturó la herida cuyo corte alcanzaba los 20 centímetros.
«Le hemos cerrado la lesión que tenía en la cara, hasta ayer (sábado) estaba lleno de larvas (huevos de moscas), sacamos hasta la última. Le aseamos toda la zona y luego le hicimos la sutura correspondiente, y él ahora se recupera. En otros términos, las larvas son gusanitos que se criaron y formaron en dos o tres días en su herida abierta mientras él estaba en la intemperie en el monte», indicó el profesional de la clínica.
Vidal fue el único sobreviviente de otros seis pasajeros y dos tripulantes que viajaban en el avión Aerocon CP 2548 que partió de la ciudad de Santa Cruz rumbo a Trinidad el martes 6 y desapareció minutos antes de llegar al aeropuerto Jorge Henrich.
Vidal estuvo desaparecido 61 horas, fue hallado el viernes 9, y en ese tiempo recorrió alrededor de 800 metros en medio del bosque.
El médico García mencionó que Minor también presenta fracturas en cuatro costillas de la región posterior izquierda del tórax y en su omoplato, del mismo lado. Ambas lesiones no recibieron ninguna intervención «porque se cicatrizarán solas en los próximos días».
Como consecuencia de las heridas sufridas en sus costillas, también presenta rasgamiento en la pleura (membrana) de su pulmón. Para su recuperación le colocaron un sello de agua (un sistema para drenar líquido).
«El paciente también ha sufrido de erosiones en la piel, rasgaduras, lesiones superficiales y pequeñas que tiene en las piernas y brazos», añadió el especialista de Los Olivos.
Recuperación. El estado de salud de Minor Vidal es bueno y estable, mencionó García, quien considera que en dos o tres días más podría ser dado de alta, ya que no presenta mayores complicaciones. Familiares del paciente señalaron que en la clínica les informaron que él no presenta ningún problema neurológico ni cardiológico, y que su estado en general es estable.
Cuando fue encontrado, el sobreviviente tenía además policontusiones y se mostraba deshidratado, aunque según sus propias declaraciones se mantuvo ingiriendo su propia orina y filtrando agua estancada.
Según el relato de la ministra de Defensa, Cecilia Chacón, al día siguiente del impacto Minor reunió el material que juzgó necesario y se internó en la selva en busca de ayuda. Llevó consigo una botella de plástico que utilizó para reunir su orina y para filtrar el agua de los estancos.
Actualmente el paciente recibe antibióticos y analgésicos. «Está bien y se recupera, su diagnóstico es bueno, lo vemos bastante animado para salir adelante», sostuvo el médico de Los Olivos.
Bienvenida en la clínica
Al ingresar a la clínica, Minor Vidal fue recibido por una veintena de personas con carteles que decían «Bienvenido, tu familia te ama»; y lo animaban a recuperarse.
Luego del impacto se oyeron voces
Cuando cayó la avioneta, Minor Vidal oyó voces y gritos de los otros pasajeros que viajaban en la aeronave de Aerocon y les sugirió que no griten, que guarden sus energías y que tengan fe.
«Cuando se estrelló el avión, él escuchaba voces, no había escuchado nada antes, ni diálogo entre pilotos, nada, simplemente el golpe y luego los gritos de la gente y todo se puso oscuro, y escuchaba aparentemente las voces de algunas personas heridas en el momento del accidente. Que nos hace presumir que no todos murieron en el impacto, inicialmente», relató la ministra de Defensa, Cecilia Chacón, las experiencias vividas por Minor Vidal que le fueron contadas por la esposa del sobreviviente, Mariela Llanos.
«Y después de unos minutos que él les había dicho ‘no griten, cálmense, no pierdan la fe, ahorren energías’, pasó un momento y dejó de escuchar ruidos y voces; entonces fue una noche muy dura para él. Pasó la noche en el interior de la avioneta».
Al día siguiente se arrastró para salir del avión y corroboró que no había ningún otro sobreviviente.
Un botellita fue el mayor tesoro del sobreviviente
La ministra Chacón relató los primeros minutos de Vidal fuera de la avioneta
Minor Vidal se alejó de la avioneta siniestrada, en busca de ayuda, con una botellita de plástico, entre otros objetos, que según la ministra de Defensa, Cecilia Chacón, «fue su mayor tesoro».
«En ese momento (cuando salió del avión) se puso a buscar en el equipaje desparramado las bengalas que podía tener el avión, no las encontró, encontró una linterna, halló algunos relojes de plástico, que nosotros vimos desperdigados alrededor del avión», relató Chacón la experiencia de Minor Vidal minutos después de evacuar la avioneta destrozada.
«Los utilizó (los relojes de plástico) para colgárselos en el pantalón y colgar de los relojes una bolsita donde llevaba un encendedor, unos teléfonos celulares que había encontrado, y una botellita de plástico, que era su mayor tesoro».
La ministra contó lo que la esposa de Minor Vidal, Mariela Llanos, a su vez, le había narrado: «(en la botellita) él recolectaba su orina, y luego la enterraba en la tierra para enfriarla, después de eso también le sirvió para poder filtrar el agua estancada que encontró».
Para la máxima autoridad de Defensa, la experiencia vivida por Minor Vidal le deja tres lecciones: la unidad y solidaridad de los bolivianos que trabajaron en el rescate del sobreviviente y la «lección de vida» que se extrae de la travesía emprendida por Minor Vidal.
«La lección de vida que nos dio Minor Vidal: su coraje, su valentía, su deseo de vivir, que lo impulsó siempre para sobreponerse a esta difícil situación».
La ministra contó que cuando hallaron los restos del avión levantaron una camisa ensangrentada que los familiares de Minor identificaron como de propiedad del entonces desaparecido, porque «encontraron en el bolsillo el bordado de la empresa en la que trabaja». Y continuó la búsqueda.