El país tiene unos 16 oncólogos, porque la capacitación es cara
Cáncer. Tampoco se cuenta con equipos de última generación
“Me detectaron un tumor en 2012, pero me operarán este mes”, indicó Carla T., una víctima de cáncer de colon. Ella explica que la tardanza en su tratamiento se debe a la falta de oncólogos en el Hospital de Clínicas. Esta carencia es extensiva al país, donde existen aproximadamente 16.
A este hecho se suma la falta de infraestructura especializada, ya que Tarija, Potosí, Oruro, Beni y Pando no cuentan con un instituto de curación. En todos los centros del país donde se trata este mal, tampoco existen equipos de última tecnología para una sanación oportuna, según cinco especialistas a los que consultó La Razón.
“En Bolivia el cáncer es una enfermedad incurable y es sinónimo de muerte, a diferencia de otros países, donde el mal se puede controlar. La falencia más grave es de especialistas, tenemos apenas 11 oncólogos clínicos para 10 millones de habitantes”, indicó Henry Larrea, miembro de la Coordinadora de Lucha contra el Cáncer.
“Clínicos, tal vez un poco más, como 15”, corrigió la oncóloga Lena Morillas, del Centro Onecida. En esta rama de la medicina existen los clínicos y los cirujanos. Pero ella no precisó una cifra de estos últimos. Aunque el doctor José Dalence enfatizó: “En relación a los cirujanos oncólogos, también somos pocos”.
“Deben haber como 16”, señaló por su parte el ginecólogo oncólogo que trabaja en Santa Cruz, Alfredo Aguirre.
Este medio intentó obtener datos exactos de la Unidad de Registro Nacional de Cáncer del Ministerio de Salud, pero no encontró una respuesta. Y el viceministro de Salud, Martín Maturano, dijo desconocer el número, “en realidad no tengo el dato exacto de cuántos hay en el país”.
La cifra de especialistas oncólogos ronda, por tanto, los 16, una cantidad escasa para los 10 millones de habitantes y para la elevada presencia de este mal en los hogares bolivianos. Según informó este medio de comunicación, en el país se presentan cada día 11 nuevos enfermos con algún tipo de tumor maligno. Al año, la cifra de nuevos pacientes es de 4.000.
Pero ¿cuáles son las razones para que pocos médicos se decidan por la oncología y sean aún menos los que profundicen con la cirugía oncológica? Los expertos consultados por La Razón coinciden en: la falta de centros de formación en el país, lo oneroso que resulta prepararse en el exterior, por lo caro y moroso, los bajos sueldos que se pagan en el territorio boliviano para una especialidad compleja, entre otros factores.
“Los estudios son onerosos; es más fácil hacer cirugía plástica, porque ganan más plata. Los libros son caros, los congresos internacionales también, en el último que fui invertí más de $us 4.000”, manifestó Aguirre.
“Es una patología muy compleja, no es una profesión elegida por muchos y no hay facilidad para hacerla”, dijo Dalence. Wilfredo Camacho, cirujano oncólogo de Cochabamba, acotó: “Cuando uno postula en el exterior, primero ingresa a medicina interna, luego se especializa en oncología clínica; el cirujano oncólogo, primero estudia cuatro años en cirugía general, y luego tres años más de especialización. Se paga como $us 85.000, además de alojamiento, comida y más”.
Pero según Maturano, en los últimos años hay una tendencia positiva para revertir esta situación, aunque no sea la ideal. Dijo que se están formando nuevos oncólogos bajo la responsabilidad del Comité Nacional de Integración Docente Asistencial e Investigación (CNIDAI), institución que está conformada por el Ministerio de Salud y el Comité Ejecutivo de la Universidad Boliviana (CEUB).
“En todo el país tenemos cuatro plazas anuales. Sin duda es poco, pero con esto vamos a poder paliar la demanda que tiene la población”.
Falta de equipos especiales
males
Los profesionales coinciden en que también hace falta radioterapias tridimensionales (diagnóstico digital con imágenes), mamógrafos digitales y coaguladores especiales. “Los mamógrafos digitales han logrado disminuir hasta en un 25% el mal”.
Sólo hay cinco profesionales para niños
Especializarse en cáncer de infantes lleva 13 años de estudios fuera del país
El país sólo cuenta con unos cinco especialistas en oncología pediátrica, de los cuales dos están en la ciudad de La Paz. La consecuencia es una atención limitada y no personalizada, informó la especialista Astrid Riveros.
“Con título de oncólogos pediatras, especializados, debemos ser unos cinco en toda Bolivia”.
La poca cantidad de profesionales en este mal se debe a lo dificultoso que resulta estudiar en el exterior. “Seis años de medicina, un año de provincia, tres años de especialidad y dos más de subespecialidad; conlleva más o menos 13. También es difícil entrar en las universidades, fuera del país es caro. La especialidad es dura y cara”, continuó Riveros.
Calculó que un profesional debe invertir más de $us 15.000 para formarse en esta especialidad, por lo que a su parecer el Gobierno debe implementar políticas para proporcionar becas de estudio. El principal problema que ve, debido a esta limitación, es que se debe trabajar con pediatras y supervisar todo el tiempo.
“Sola es prácticamente imposible, tengo un equipo de pediatras que me ayuda”.
En un año más se contará con otro oncólogo para esta área, ya que actualmente se está formando en Chile, informó. Además, dijo que el Hospital del Niño, al ser el único de tercer nivel que atiende estos casos, contará con otro bloque oncológico y con nuevos equipos para la atención.