Vecinos protestan por informalidad en dotación de agua; Gobierno pide calma
Con consignas como “agua para el Alto; no para el Centro Nuclear”, un bloque de la Federación de Juntas Vecinales (Fejuve) de El Alto tomó las calles del centro paceño para exigir la normalización de dotación de agua en esa urbe.
Vecinos de varios distritos de El Alto y otros de La Paz marcharon esta mañana en protesta por la informalidad en los cronogramas de dotación de agua a las zonas afectadas por el plan de racionamiento y en demanda de soluciones de fondo a la crisis del agua .El gobierno pidió calma a los afectados y ponderó el plan de entrega del líquido en cisternas que ejecutan reparticiones estatales para atenuar la alta demanda.
Con consignas como “agua para el Alto; no para el Centro Nuclear”, un bloque de la Federación de Juntas Vecinales (Fejuve) de El Alto contraria al Gobierno tomó las calles del centro paceño para exigir la normalización de los servicios de dotación de agua en esa urbe, que desde el lunes se sumó al plan de racionamiento impuesto por la Empresa Pública Social de Agua y Saneamiento (EPSAS).
Los movilizados, que tomaron con su protsta las principales calles del centro de la urbe, sumaron a sus demandas la renuncia de la ministra de Medio Ambiente y Agua, Alexandra Moreira.
El martes por la noche, centenares de vecinos de la zona Sur marcharon con el mismo fin. “Esto no es sequía, esto es corrupción”, reclamaron los paceños de este sector, que sufre uno de los planes de racionamiento más duros.
Por la mañana, vecinos de Mallasa —que denuncian falta de servicio de más de una semana— y Bolognia bloquearon las vías de esas zonas para reclamar la presencia de cisternas. La protesta en ese último barrio y en la vecina Bella Vista provocó, incluso, la paralización temporal del servicios de transporte edil Puma Katari que llega hasta la Irpavi.
En la ladera este y el Macrodistrito Sur, que aglutina a unos 94 barrios, desde el 8 de noviembre se acogen de manera obligatoria a un plan de racionamiento que se endureció este domingo con la dotación de líquido por solo tres horas de cada 72, antes eran 12 y 24 horas cada dos días. El Gobierno cesó a las autoridades relacionadas con la temática.
La molestia de los vecinos se incrementó luego de que EPSAS anunciara el plan ajustado sin entregar horarios fijos. Recién el martes por la mañana, a 48 horas del anuncio, entregó el cronograma para uno de los tres sectores afectados, mientras que por la tarde completó los dos roles restantes.
Ante la crisis generada por la escasez del agua, el Gobierno ejecuta desde el lunes en la tarde un plan de distribución de agua mediante cisternas de la estatal Yacimientos Petrolíferos Fiscales Bolivianos (YPFB), de la Agencia Nacional de Hidrocarburos (ANF) y del Ejército.
El presidente Evo Morales, quien activó un Gabinete del Agua, pidió “un poco de disciplina y orden para que la distribución sea más rápida» y aseguró que su despacho tiene garantizada la dotación del líquido a corto plazo. “A corto plazo para mí es un año, dos años. Hemos dado una tarea”, dijo el mandatario.
Mientras que el ministro de Gobierno, Carlos Romero, demandó calma a los afectados tras afirmar que el Ejecutivo hace todos los esfuerzos para paliar la contingencia.
Romero identificó además a Ilia Fortún, Diego Ayo e Iván Arias, vinculados con pasados gobiernos “neoliberales”, como actores que “pretenden hacer política” con la crisis del agua.
“Pretenden aprovecharse de esta situación de manera oportunista mintiendo a la población boliviana tratando de inducirla a una situación de sicosis y pánico colectivo. Queremos pedirle a la población que no se deje engañar con estos políticos que están mintiendo. Confíen en que el Gobierno está movilizado con todos sus recursos para resolver esa contingencia”, señaló Romero.
Los citados, que participaron de la marcha de protesta de la zona Sur, habían cuestionado a EPSAS y el rol del gobierno, además denunciaron posibles concesiones mineras que afectan los caudales de agua que llegan a La Paz. (23/11/2016)