Gobierno interviene en conflicto de Achacachi y abre proceso de diálogo
El canciller Fernando Huanacuni encabezó la comisión oficial que sentó en la mesa a los sectores en conflicto en Achacachi. Los vecinos de la población exigen la renuncia del alcalde Édgar Ramos
El Gobierno intervino en el conflicto de Achacachi, en La Paz, y sentó a las partes en conflicto en una mesa de diálogo en la que se acordó una ruta de negociación que será retomado el lunes. El acercamiento se da un día después de que los movilizados dieran al Gobierno 72 horas para fijar una posición sobre la demanda de renuncia del alcalde Édgar Ramos.
Huanacuni, junto al ministro de la Presidencia, René Martínez, y de Desarrollo Rural, Eugenio Rojos, y del viceministro de Autonomías, Hugo Siles, encabezó el encuentro en instalaciones del Ministerio de Relaciones Exteriores. Vecinos y los denominados Ponchos Rojos mantienen un conflicto desde febrero.
El 14 y 15 de febrero, detonó el conflicto. Los vecinos quemaron el vehículo y enseres del domicilio del alcalde, mientras que ponchos rojos salieron en defensa de Ramos y destrozaron viviendas y saquearon tiendas en represalia. Las actividades ediles fueron trasladadas hasta Warisata.
El lunes, los vecinos iniciaron un bloqueo de caminos en Achacachi y el miércoles trasladaron la protesta a La Paz. El jueves decidieron suspender las movilizaciones en el centro paceño y dar al Gobierno 72 horas para fijar una posición sobre la demanda de renuncia de Ramos, quien fue elegido por el oficialista Movimiento Al Socialismo (MAS).
El viceministro de Coordinación con Movimientos Sociales, Alfredo Rada, lamentó el jueves el perjuicio ocasionado a los paceños que, dijo, “nada tienen que ver” con un conflicto “político local”.
“Al parecer hay una especie de golpismo municipal que por la vía de la violencia pretende cambiar a un alcalde”, señaló y recordó “que hay vías legales” para este cometido en alusión al referéndum revocatorio, que se activa a media gestión de una autoridad electa.
La Defensoría del Pueblo, en su intento de pacificar el lugar, medió en la firma de un acta de pacificación y se encaró un proceso de diálogo que no logró, sin embargo, concretarse. El ombudsman David Tezanos Pinto responsabilizó a los vecinos por obstaculizar este proceso.