Ramos ratifica que no renunciará y ofrece diálogo para resolver conflicto de Achacachi
El cuestionado alcalde de Achacachi reapareció en cercanías de la Plaza Murillo, donde fue interceptado por periodistas. Allí rechazó las denuncias de corrupción que pesan en su contra.
“Me atengo a lo que es la Constitución, no voy a renunciar”, ratificó el alcalde de Achacachi, Édgar Ramos, este miércoles; empero se abrió al diálogo para dar solución al conflicto que ha llevado a que los pobladores de la capital de esa población se movilicen por más de cuatro semanas exigiendo su alejamiento del cargo.
“Estamos dispuestos a dialogar. Yo agradezco a los otros hermanos en la capital de Achacachi que están prestos, la mayoría pide el diálogo. Pero también tiene que haber garantías… se ha demostrado con los secuestros ¿Qué garantía uno puede tener ante toda esa organización”, reclamó Ramos.
El edil reapareció en cercanías de la Plaza Murillo y el Palacio de Gobierno, centro del poder político, y, en primera instancia, rehuyó responder las preguntas de los periodistas, quienes lo persiguieron por varios metros para lograr algunas declaraciones.
Los pobladores de la zona urbana de Achacachi bloquearon la vía a Copacabana y a Achacachi desde el 22 de agosto en demanda de su renuncia por presuntas irregularidades en su gestión y por la liberación de tres dirigentes detenidos. La movilización fue aplacada el domingo 17 de septiembre tras una violenta intervención policial.
Este miércoles, Ramos negó las acusaciones de corrupción y explicó que su arribo a la sede de Gobierno tiene fundamento en la gestión de proyectos para la municipalidad que gobierna.
Resultado de las acciones de las fuerzas del orden fueron aprehendidos casi medio centenar de achacacheños de los que 18 fueron enviados a la cárcel a la espera de un juicio en el que se los acusa por los delitos de atentado contra los servicios públicos, asociación delictuosa y atentado contra medio de transporte.
La Iglesia Católica y la Defensoría del Pueblo gestionan los acercamientos para instalar la mesa de diálogo. Los Ponchos Rojos, que son afines a Ramos, se abrieron al diálogo, mientras que los vecinos del área urbanizada, tras un cabildo, aún analizan su asistencia a esa convocatoria.
Ambos bandos protagonizaron los violentos hechos de febrero que también exigían la renuncia de Ramos. Hubo quema de inmuebles, saqueos a comercios y muchos heridos, empero la Fiscalía solo imputó a dirigentes vecinales. De los Ponchos Rojos no hay ningún detenido.(20/09/2017)
