Adrián Ávila: los 170 equipos que compró el Gobierno no pueden usarse ni para emergencias
El presidente de la Sociedad Boliviana de Medicina Crítica y Terapia Intensiva advierte que no se cumplen los parámetros de la OMS y critica que estos dispositivos no tienen ni batería.
Los 170 “respiradores” comprados por el gobierno de Jeanine Áñez para hacer frente a la pandemia del coronavirus siguen cosechando críticas. El doctor Adrián Ávila, presidente de la Sociedad Boliviana de Medicina Crítica y Terapia Intensiva, atendió a La Razón para explicar las observaciones técnicas a estos equipos. Advierte que no se cumplen requisitos de la Organización Mundial de la Salud (OMS) y que estos dispositivos no pueden considerarse ni respiradores, ni ventiladores, y además, no sirven para emergencias, como señaló el ministro de Salud, Marcelo Navajas.
— ¿Cuáles son las observaciones técnicas a los 170 respiradores traídos por el Gobierno para la lucha contra el coronavirus?
— Para empezar, no son respiradores ni ventiladores. Son dispositivos también conocidos como resucitadores manuales o bolsas autoinflables. En otros países se los llama AMBU (del inglés Airway Mask Bag Unit), que significa bolsa autoinflable. Se los puede encontrar en servicios de emergencia, pero de forma temporal, es algo tan básico que se ha hecho en 1950.
Un ventilador se define como un dispositivo y ha tenido una evolución de acuerdo con la tecnología de la época. La primera generación de ventiladores, no de los AMBU, es desde 1960 y se los usaba por presión en los pacientes que los necesitan en forma total o parcial. La segunda generación tiene como característica el volumen. Y de la tercera generación son los ventiladores que aplicamos en todas las terapias intensivas, son multiprocesables, y se los utiliza desde 1990.
Entonces, los dispositivos presentados por el Gobierno de ninguna manera se pueden comparar con un ventilador mecánico. La Organización Mundial de la Salud (OMS) ha publicado unos requisitos mínimos para el uso y para que un Estado adquiera estos equipos para la lucha contra el COVID-19, porque mínimamente debemos brindar al paciente crítico las condiciones mínimas. A raíz de eso hemos evaluado estas especificaciones técnicas, porque el Gobierno muy hábilmente menciona que todo lo que hace es de acuerdo con la OMS, y esto organismo hace una lista de requerimientos para cualquier equipo. Son 16 puntos establecidos con relación a los ventiladores.
— Pero el Gobierno ahora señala que no son ventiladores convencionales o mecánicos…
— Ahora el Gobierno dijo que no son ventiladores, sino que se podrían utilizar para equipos de transporte o para terapia intermedia. Está bien. Vamos a las especificaciones que deben tener un ventilador o un equipo de transporte para el paciente crítico. La OMS hace el mismo requerimiento de 16 puntos y nosotros como Sociedad, desde la filial de Santa Cruz, porque aquí en La Paz todavía no entregaron estos dispositivos, fuimos a verlos in situ y desde Santa Cruz nos han transmitido los hallazgos. Comparando con estos requisitos de la OMS, apenas cumplen 2 de 16 puntos, y cada uno de estos puntos por lo menos requieren otros 10 requisitos. Y de los dos requisitos en los que califican, cumplen otros dos. En otras palabras, estos AMBU automatizados de ninguna manera se pueden utilizar en el paciente crítico.
— Pero, ¿se pueden utilizar al menos para emergencias o para mantener al paciente por algunos días hasta conectarlo a un ventilador mecánico?
— Dijeron que se pueden utilizar para emergencias, para el transporte del paciente, pero la Sociedad Boliviana de Emergenciología sacó un comunicado aclarando que ni sus miembros los podrían utilizar. Se argumenta que a un paciente cuando se lo intuba, inicialmente puede estar conectado a estos AMBU, pero en Bolivia apenas hay 490 camas en terapia intensiva y deberíamos tener 1.160, o sea siempre están colapsadas las unidades de terapia intensiva, son datos actuales. La cuarentena debería ayudar a prepararnos para lo que está viviendo Santa Cruz. Aparte, somos apenas 200 intensivistas en el país y deberíamos ser 500. Entonces, si este equipo va a estar en emergencias, en qué momento lo van a trasladar. A veces no se encuentra una unidad de terapia intensiva ni en 24 horas por la falta de camas. El 60% de estas camas lo absorbe la parte privada y el restante 40% se divide entre las Cajas y el sistema público. En otras palabras, no estamos preparados para lo que sucede.
Hemos emitido un comunicado, dentro de nuestros principios está el no hacer daño al paciente. Si bien la ventilación mecánica es una intervención que puede salvar vidas, también las puede complicar. Nos indicaron que autoridades han mostrado que solo se requiere enchufar estos equipos, que lo puede hacer cualquier persona, pero no es así, los especialistas tenemos hasta cinco años de formación para el manejo del soporte ventilatorio. Nos vemos sorprendidos por esas declaraciones que generan malestar. Hay especialidades que debemos respetar. Por ello, hemos manifestado que no nos vamos a hacer responsables de las complicaciones secundarias de estos AMBU automatizados.
Esta Sociedad forma parte de la Federación Panamericana e Ibérica de Medicina Crítica y Terapia Intensiva, que incluye a Estados Unidos, Centroamérica, Sudamérica, España y Portugal. La presidencia está en España y nos hemos comunicado con esa dependencia para saber si estos equipos son resucitadores manuales y automatizados. Pero nunca se utilizaron, no sé de dónde salió que ya se emplearon, y en un paciente crítico esto ni pensar. Desde el punto de visto científico y técnico su utilización en vez de mejorar puede empeorar a un paciente crítico. Eso nos han comentado. Los bolivianos tenemos información de las diferentes sociedades en el ámbito mundial, hemos ido consultando a expertos y no conocen de esta marca. Incluso el fundador de la Sociedad Boliviana de Terapia Intensiva, Freddy Sandy, un referente en Sudamérica, dio su veredicto, de que estos dispositivos no se pueden utilizar en terapia intensiva, son muy básicos.
— O sea tampoco sirven para emergencias…
— La Sociedad Boliviana de Emergenciología manifestó que estos equipos no son aptos para el servicio de emergencia y con relación al transporte, uno de los requisitos básicos que debe tener es la batería. Pero este dispositivo no la tiene, y cualquier equipo la debería tener. Es uno de los requerimientos imprescindibles que hace la OMS, para que haya una fuente de energía constante. Aquí en La Paz a veces hay cortes de electricidad y ni imaginar lo que puede pasar con un paciente que use estos equipos. Como dije, de los 16 requisitos de la OMS apenas cumple dos. Estos equipos no son para terapia intensiva.
— ¿El Gobierno se contactó con ustedes para algún asesoramiento?
— El problema va más allá, si hubieran traído los ventiladores adecuados hay que tomar en cuenta que tenemos apenas 490 camas y somos solo 200 intensivistas, y mi Sociedad ha mandado varias notas para que podamos sentarnos a analizar la situación, que nos llamen para un acercamiento, queremos plantear estrategias, sugerencias, propuestas técnicas para la utilización de tan pocos intensivistas, el empleo de recursos de ventilación, podemos asesorar. Y finalmente están diciendo que van a llegar ventiladores de mejor calidad, para empezar hay que saber si pueden funcionar en la altura porque el 70% de la población vive a más de 2.8000 metros sobre el nivel del mar. Imagínese que estos ventiladores que lleguen no puedan funcionar en la altura, cuidado que también se tropiece con esa otra dificultad. No sabemos quién está asesorando al Gobierno para la compra de estos ventiladores porque mínimamente deben cumplir estos requisitos.