Detectan 37 casos positivos de COVID-19 en la cárcel de Cobija
Las visitas al centro penitenciario fueron suspendidas por siete días. Las autoridades realizan rastrillajes y asumen medidas de prevención.
Las autoridades desinfectan los ambientes de la cárcel de Cobija, donde detectaron COVID-19. Foto: RRSS
La Dirección Departamental de Régimen Penitenciario de Pando informó que se detectaron 37 casos positivos de COVID-19 en la cárcel de Villa Busch, Cobija, por lo que se determinó el cierre del centro penitenciario por siete días.
«Luego de haber realizado un rastrillaje masivo con pruebas PCR a la población penitenciaria de Villa Bush, se identificó 37 casos positivos», se informó mediante un comunicado.
“Ninguno de los privados de libertad presenta complicaciones”, agrega la nota.
Como medida de prevención, se determinó el cierre del centro por siete días con la finalidad de evitar la propagación del virus precautelando la salud de la población penitenciaria.
En coordinación con el Servicio Departamental de Salud y el Gobierno autónomo municipal de Cobija se inició la desinfección de todos los ambientes de la cárcel.
Variantes del COVID-19
El martes pasado en La Paz, el director departamental de Régimen Penitenciario informó que se detectaron cinco casos positivos de COVID-19 en la cárcel femenina de Obrajes.
Los cinco casos, aclaró, no son de gravedad y se determinó aislarlos.
Según el reporte epidemiológico 992, en Bolivia se tienen 11.538 casos activos.
Esta semana, autoridades del ministerio de Salud confirmaron que en el país ya están circulando dos nuevas subvariantes de la Omicron, BQ-1 y BQ-1.1.
“La presencia de estas subvariantes puede contribuir al crecimiento de casos”, anunció el ministro de Salud, Jeyson Auza.
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La autoridad detalló que su porcentaje de transmisibilidad puede alcanzar el 30%.
El ministro explicó que, en general, “los síntomas de la BQ son congestión nasal, dolor de cabeza y musculares, pérdida de gusto y de olfato y la sensación de falta de aire.
Se suma, además, la «aceleración del ritmo cardiaco”.
Aclaró que el Gobierno ya cuenta con una estrategia para contener esa subvariante para preservar la salud de los bolivianos.