Historias en Multimedia
Los realizadores desarrollan sus tramas, cada vez más a menudo, utilizando diversos soportes
La primera semana de diciembre se estrenó la obraREC, dirigida por Fernando Arce y protagonizada por Leonel Fransezze, Mauricio Toledo y Mariana Vargas. La obra se montó en una habitación del hostal Casa Hermanos Manchego, ofreciendo al público una experiencia más íntima y realista que se complementó con el uso de otros medios para contar la historia: antes de ingresar a la habitación/escenario, los asistentes escuchaban una grabación que revelaba detalles de la trama. Y tras finalizar la actuación, se recibieron mensajes por la aplicación WhatsApp que incluían dos epílogos.
Este tipo de recursos no son nuevos en el entretenimiento y el arte escénico, pero demuestran que poco a poco el transmedia, visto como la capacidad del realizador de utilizar diversos soportes y medios para contar su historia, se está convirtiendo en una herramienta muy efectiva para involucrar más a la audiencia.
Así lo consideraron los organizadores de la versión 2015 del Talentdoc, cuyas actividades incluyeron talleres y conferencias sobre este tipo de metodología. “El transmedia es transgredir la narrativa tradicional del cine, ya que obliga al realizador a dejar sus proyectos abiertos y a pensar en diferentes plataformas para contar sus historias y recibir el aporte del público”, explicó la experta argentina María Laura Ruggiero, que llegó al país a hablar del tema en agosto. En una entrevista con LA RAZÓN aseguró que este tipo de proyectos consisten en la unión del cine con otras disciplinas artísticas y el paso a otras plataformas en las cuales el espectador puede aportar.
La documentalista alemana Caty de Haan, quien también formó parte del Talentdoc, recordó que el transmedia no es algo novedoso, sino que se remonta a los mismos inicios de la narración humana. “Cuando nos sentábamos alrededor de una fogata y compartíamos historias en las que todo el círculo participaba. El transmedia busca recobrar este espíritu”, explicó en una charla. No hay duda que lo comercial ha jugado un papel importante en el desarrollo del transmedia, como lo demuestran ejemplos tan tempranos como Un cuento de Navidad, de Charles Dickens; Drácula, de Bram Stoker, y Sherlock Holmes, de sir Arthur Conan Doyle. Aunque nacieron en las páginas, la demanda del público obligó a los autores a producir más relatos y llegar a otros medios: teatro, cine, cómics, radio y televisión.
CÓMICS. Un género en el que el transmedia se propagó fue en el de la fantasía y ciencia ficción, ayudado en gran medida por la popularidad del cómic. Dos ejemplos son Doctor Who (1963-2015) y Star Trek (1966-1969). Paralelamente a los episodios de televisión, los fans podían seguir las aventuras de sus personajes en series de cómics, novelas y programas radiales.
De hecho, las radioseries de Doctor Who cuentan detalles del personaje que son reconocidos por los dueños de los derechos (BBC) como parte de la historia oficial y ayudan a los seguidores actuales a entender varios detalles de la serie. Así se abrió la posibilidad de que los fans contribuyesen a la narración. Cuando se lanzó la serie Star Trek, La nueva generación (1987-1994) se filmaron varios episodios cuyos guiones se inspiraron, o fueron transcripciones, de historias que los mismos fans enviaron a los productores.
Y la explosión llegó en 1977, cuando un joven director cedió los ingresos por la venta de entradas para que un estudio financiara su película. A cambio decidió “conformarse” con mantener los derechos de sus personajes. De esta forma, George Lucas creó el imperio multimedia Star Wars.
IMPERIO. Las amen o las odien, fueron las precuelas de la serie (estrenadas entre 1999 y 2005) en las que más se notó la importancia del transmedia. Las cintas no cuentan toda la historia del ascenso y caída de Anakín Skywalker, el protagonista. Pudo ser un error —de acuerdo con las críticas de expertos y público—, pero para tener la imagen clara la audiencia además de ver los filmes también debe leer las varias novelas, cómics y jugar los videojuegos. Asimismo, entre los episodios II y III se encuentra la serie de animación The Clone Wars y entre el III y IV estás Rebels y el videojuego The Force Unleashed.
Marvel, propiedad de Disney, ha estructurado su universo cinematográfico enlazando sus películas con una serie de televisión y, hasta ahora, tres series en la red Netflix. En televisión también está la serie Castle, en la cual un escritor de misterios asume un rol de detective. Como parte de la trama están las novelas que el personaje escribió y que el fan puede adquirir. Pero aún falta mucho que explorar en la transmedia y los medios digitales, como las redes sociales han abierto un mar de posibilidades.