Primer grito libertario de América
El 25 de mayo recordamos 205 años del primer grito libertario de América, realizado en Chuquisaca
El 25 de mayo recordamos 205 años del primer grito libertario de América, realizado en Chuquisaca en 1809. Esa fecha fue la culminación de un largo proceso de resistencia de los movimientos libertarios indígenas contra la colonia española. Los mentores de las acciones del 25 de mayo de 1809 fueron los doctores (abogados) de la Universidad San Francisco Xavier de Chuquisaca (USFXCH), a la cabeza de los hermanos Manuel y Jaime Zudáñez, Bernardo Monteagudo y otros. ¿Por qué el primer grito se dio en 1809 y no antes o después? La respuesta parece ser lógica: porque para 1809 se acumularon las condiciones sociales y políticas, tanto externas e internas.
En el ámbito externo, cabe recordar que el emperador francés Napoleón Bonaparte conquistaba casi toda Europa, y que por entonces el poder político de España fue víctima de un severo proceso de desestabilización. El rey Carlos IV no estuvo tranquilo desde la Revolución Francesa de 1789. En 1807 por poco fue destronado por su propio hijo Fernando. Un año más tarde, el pueblo español se levantó contra los reyes, lo que obligó a Carlos IV a abdicar en favor de su hijo Fernando VII, quien recibe doble presión: de sus padres y de Napoleón. Poco tiempo después le devolvió el poder a su padre, pero un día antes de recibirlo, Carlos IV había pactado pasar la corona a Napoleón. Así en 1808, tanto Carlos IV como Fernando VII dejan el reinado, y Napoleón traspasa la dirección de España e Indias a su hermano.
En cuanto a las condiciones internas para los sucesos ocurridos en 1809, voy utilizar una analogía entre un partido de fútbol y la guerra de la independencia de 1825, comparación que surgió de un docente en un análisis académico en la USFXCH. La Colonia española y la lucha de los indígenas por su libertad (hasta la independencia de los criollos) duró cerca de tres siglos (290 años), desde 1535 a 1825. Esto representa los 90 minutos “reglamentarios” del partido, el primer tiempo duró 274 años (de 1535 a 1809), el segundo tiempo, 16 años (de 1809 a 1825).
Los movimientos libertarios encabezados por los indígenas habían resistido a la Colonia por 274 años y, si comparamos con el primer tiempo de un partido de fútbol, habían jugado más de 40 minutos, mientras que los movimientos independentistas liderados por los criollos estuvieron en la cancha de jugadores delanteros los últimos minutos, tuvieron la oportunidad de hacer el gol en 1809 y fueron reconocidos por la historia oficial.
Pero quienes sudaron la camiseta por más de 27 décadas fueron los denominados levantamientos indígenas. Entre aquellos que ocurrieron antes de 1809 considerados como los más importantes cabe señalar el de la hacienda Real de la Corona de Potosí en 1612, el de Filinco en La Paz en 1661, Calatayud en Cochabamba en 1730, el de Oruro en 1739, el de los hermanos Katari de 1781 (Carlos Terrazas, 2011). El último es conmemorado por dos cercos a La Paz, durante 109 y 64 días, respectivamente. En esta lista habría que agregar a Dámaso Katari, Bartolina Sisa y a Micaela Bastidas, entre muchos otros líderes indígenas que alimentaron con grandes jugadas a los “delanteros oportunistas”. Por cuestiones de espacio, tendré que realizar el comentario sobre el segundo tiempo en una siguiente oportunidad.