Gobierno electrónico
Estas cuatro plataformas digitales buscan simplificar algunos trámites en el Estado.
Días atrás, con motivo de conmemorarse el Día de Internet, el Ejecutivo presentó cuatro plataformas digitales destinadas a simplificar algunos trámites en el Estado, dando un pequeño pero significativo paso en la construcción del “gobierno electrónico”, cuya principal virtud está en ser pensado desde el usuario de los servicios y no desde la lógica burocrática del papel y sello.
Las iniciativas presentadas el jueves 17 de mayo por el Presidente son el tercer paquete de desburocratización del Estado, tarea emprendida por la Agencia de Gobierno Electrónico y Tecnologías de Información y Comunicación (AGETIC) desde 2017, cuando se consultó a la ciudadanía sobre qué trámites se deseaba ver simplificados y a partir de las respuestas se inició el diseño y construcción de sistemas informáticos que respondiesen a esas necesidades y demandas.
El paquete de plataformas digitales presentado el jueves incluye el portal www.gob.bo, donde está disponible información como los requisitos, costos, plazos y horarios de atención para 323 trámites en instituciones públicas. La segunda plataforma permite hacer pagos digitales, combinando un código de pago generado al iniciar un trámite con las prestaciones del portal web o la aplicación móvil del Banco Unión.
La tercera iniciativa es un sistema de información para la minería, donde se gestiona el Registro Único Minero, en el que están inscritos los productores y comercializadores de minerales. La cuarta plataforma, bautizada como Moto Méndez, enlaza las bases de datos de los ministerios de Salud, de Trabajo, de Economía y Fianzas, del Instituto Boliviano de la Ceguera, y de los 339 gobiernos municipales del país, para realizar el pago del bono a las personas con discapacidad.
Estos cuatro sistemas se unen a otros 21 trámites digitales desarrollados y presentados durante 2017, además de la firma digital, innovación que permitirá a las personas contar con una identidad única en el mundo cibernético y prescindir de la presencia física a la hora de rubricar documentos, que tampoco necesitarán estar impresos en papel.
Se trata, pues, de una serie de pasos que conducen hacia un nuevo estado de desarrollo en la administración pública y su relación con la ciudadanía, habitualmente tensa y complicada debido a la complejidad inherente a los trámites en soporte físico y su pesada herencia histórica, que hasta ahora demanda abundante uso de papel y la presencia obligatoria de la persona interesada.
Es probable que aunque la tecnología avanza a pasos agigantados, reduciendo cada vez más el tiempo entre una actualización y otra, su adopción por parte de la población sea más bien lenta, ora por desconfianza en las nuevas tecnologías, ora por desconocimiento del modo de uso; de ahí que habrá que considerar la urgencia de implementar, paralelamente, proyectos de alfabetización digital.