Trimestre turbulento
Luis Callapino López
En sujeción al cumplimiento del Calendario Escolar 2023, el 12 de mayo debería culminar el desarrollo curricular del primer trimestre en los niveles inicial, primaria y secundaria de las unidades educativas fiscales, privadas y de convenio; sin embargo, todo hace deducir que se ampliará, por los conflictos en la implementación del currículo actualizado, aprobado mediante Resolución Ministerial 1040/2022.
Al respecto, el artículo 6, parágrafo I, de la Resolución Ministerial 001/2023 “Normas Generales para la Gestión Educativa”, resalta que el Calendario Escolar 2023 contempla 200 días hábiles de planificación, desarrollo y evaluación curricular, organizados en tres trimestres, bajo las modalidades de atención presencial, semipresencial y a distancia.
No obstante, la posición ambivalente del Ministerio de Educación y el Viceministerio del Subsistema Regular con relación a la implementación del currículo actualizado, derivó en la anarquía de las concreciones curriculares; vale decir, se aplican contenidos de acuerdo con el criterio y la decisión de los maestros y/o directores, en plena ausencia de criterios rectores emanados por autoridades educativas superiores.
Si bien este extremo puede ser interpretado como un procedimiento propio de la planificación y el desarrollo curricular amparado en el principio de flexibilidad, es menester resaltar que el libre albedrío de la aplicación de contenidos data de hace varios años atrás, principalmente en algunas unidades educativas privadas, que todavía mantienen las áreas de Historia y Educación Cívica, anexadas a Ciencias Sociales desde la vigencia (20 de diciembre de 2010) de la Ley 070 “Avelino Siñani-Elizardo Pérez”.
Consecuentemente, el Instructivo IT/VER 0031/2023, autorizado el 3 de abril por el viceministro de Educación Regular, Bartolomé Puma Velásquez, determinó la flexibilidad en el seguimiento académico de la presente gestión, conllevando a la anarquía en el desarrollo curricular.
Con ese antecedente, los 69 días hábiles destinados al primer trimestre, según el Calendario Escolar 2023, fueron sin duda plagados de incertidumbres en la implementación del currículo actualizado, y hasta la fecha sigue en duda el porcentaje de su implementación, en perjuicio irreversible de los estudiantes.
En tal sentido, es imperante que las Direcciones Departamentales de Educación y las Subdirecciones del Subsistema Regular promuevan a la brevedad posible encuentros pedagógicos para maestros sobre la unificación de contenidos curriculares, en razón de tener un currículo rector para el segundo y tercer trimestres.
(*) Luis Callapino López es magister en Políticas de Formación Docente