¿Por qué el Presupuesto General del Estado (PGE) 2024 es tan importante? Últimamente se ha dado cobertura a políticos que con comentarios y sus “análisis” quisieron observar e interrumpir el tratamiento y la revisión del proyecto de Ley del PGE en la Asamblea Legislativa.
Pero, desde julio de 2023, el Ejecutivo inició un trabajo de socialización con talleres de capacitación de forma presencial y virtual en los nueve departamentos, dirigido a las 585 entidades del sector público: 336 alcaldías, 117 instituciones descentralizadas, 55 empresas públicas, 27 órganos del Estado, 15 instituciones de seguridad social, 14 universidades, nueve gobernaciones, seis gobiernos autónomos indígenas originarios campesinos, cinco instituciones financieras y un gobierno autónomo regional, con el objeto de formular el PGE para 2024, precautelando la sostenibilidad de las finanzas públicas, dando continuidad, principalmente, a las políticas sociales, garantizando la reconstrucción de la economía y transformando el aparato productivo con sustitución de importaciones e industrialización.
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Es así que, de acuerdo con el cronograma del Calendario de Formulación Presupuestaria, el requerimiento de las entidades públicas fue remitido a la Asamblea para su aprobación. Este procedimiento es desconocido por analistas políticos, economistas, que sin contemplar aspectos técnicos y normativos realizan comentarios y publicaciones con información errónea, señalando que el presupuesto es centralista, cuando en realidad está distribuido en todos los departamentos, abarcando un mayor porcentaje en dos sectores muy importantes: salud y educación.
El PGE 2024 prevé asegurar la estabilidad macroeconómica y la sostenibilidad de las finanzas públicas, y a pesar de un contexto internacional complejo proyecta una tasa de crecimiento del 3,71%.
Además, nuestra economía se fortalece cada vez más al profundizar el desarrollo del proceso de industrialización con sustitución de importaciones, que reforzará la soberanía productiva y alimentaria, con una inversión de más de $us 4.274 millones, de los cuales el 56% va destinado al aparato productivo e industrial, impulsando la productividad y el mayor rendimiento, lo que permitirá generar más fuentes de empleo, mayor dinamismo y una economía de base ancha que diversifique sectores y multiplique actores competitivos y productivos.
El PGE, a su vez, consolida la política de acceso universal y gratuito a la salud y la educación, y permite continuar con la implementación de políticas sociales buscando la equidad con la redistribución de los recursos, la disminución de la desigualdad y la reducción de la pobreza.
Estos objetivos fueron expuestos a la Asamblea, que inicialmente aprobó el PGE en Diputados, pasando al Senado, donde se repitió lo ocurrido en el tratamiento del PGE 2023 reformulado, debido a que senadores observaron y rechazaron disposiciones normativas, sin considerar que el PGE es uno de los instrumentos más importantes de la política fiscal porque permite la implementación de los programas y proyectos del Modelo Económico Social Comunitario Productivo, que amerita sea tratado con un criterio responsable y sin intereses políticos o personales, dándole certidumbre a la población.
(*) Elizabeth Valencia es administradora de empresas