Matute recibe el Premio Cervantes
‘El que no inventa, no vive’, dijo la novelista tras recibir el galardón
En presencia de los Reyes, el presidente de Gobierno y otras autoridades, la escritora española Ana María Matute desplegó una férrea y bella defensa de la invención como valor supremo en la vida a la hora de recoger el Premio Cervantes.
«El que no inventa, no vive», afirmó Matute con convicción. Ella es la tercera mujer que recibe el galardón más prestigioso de las letras hispanas. Desde que fuera creado hace tres décadas, también lo merecieron la filósofa española María Zambrano y la poeta cubana Dulce María Loynaz.
Matute ganó el premio en noviembre tras quedar durante varios años entre los finalistas. Lo mereció, según el jurado, por una obra extensa y fecunda que se mueve entre el realismo y «la proyección a lo fantástico» y por poseer «un mundo y un lenguaje propios».
La ficción funciona para la escritora catalana como territorio de salvación, una suerte de santuario donde parapetarse y en el que los personajes en cierta manera protegen al lector. «Si algún día se encuentran ustedes con mis historias, con mis criaturas, créanselas, porque me las he inventado», dijo.
Matute salió también en defensa del cuento como género mayor. El Premio Cervantes, dotado con 125.000 euros ($us 185.000), se da «a los escritores que contribuyen con obras de notable calidad a enriquecer el legado literario hispánico».