Cambios en la estructura de las exportaciones
Si uno realiza un análisis retrospectivo y nos remontamos 30 años atrás, a 1992, podemos observar que la estructura de las exportaciones bolivianas ha sufrido importantes cambios hasta 2022.
Con base en la clasificación uniforme del comercio internacional CUCI que utiliza la OMC, la industria extractiva, que comprende a la minería, la metalurgia y los hidrocarburos, participaba, a noviembre de 2022, con un 70,9% en el total exportado, reflejando un aumento en 2,4 puntos porcentuales respecto a la importancia del 68,5% que tenía en 1992. Las exportaciones de productos agropecuarios y alimentos mantuvieron su importancia en torno al 22% y las exportaciones de manufacturas, propiamente tales, cerca al 8,8%
No obstante, al interior de la estructura de las exportaciones han ocurrido cambios relevantes a tener en cuenta.
En primer lugar, el sector exportador más importante en los últimos años ha vuelto a ser el sector minero-metalúrgico, como lo fue a principios de los años 90 cuando representaba un 50,5% del total exportado. Empero, al interior del sector también se registraron cambios, como el hecho de que el oro metálico desplazó al zinc del primer lugar que ocupaba desde los años 90 cuando relevó al estaño, que tuvo un ciclo de más de 80 años desde principios del siglo XX. El oro metálico se constituye, desde 2017, en el tercer producto en importancia en el ranking de las exportaciones con un 23,5% de su total, desplazando al zinc al cuarto lugar con una participación del 14,4% y al estaño, que quedó relegado al sexto puesto, con una incidencia del 4,1%. En 1992, las exportaciones de oro mineral y metálico pesaban solo un 4,6% del total.
En segundo lugar, los hidrocarburos, que en 1992 era el tercer sector en importancia con una participación del 18%, en 2005 se constituyó en el principal sector exportador con más del 50% del total, pero en los últimos años pasó al segundo lugar con una participación en 2022 de un poco más de una quinta parte del total. Empero, el gas natural desde 2005-2022 sigue siendo el principal producto de exportación del país, pero con una estrella declinante que de un peso del 38% del total en 2005, llegó a un 48% en 2014, para luego descender al actual 22,6%. Al interior del sector se ha dejado de exportar petróleo y se está exportando GLP ($us 122,3 millones) que está en el décimo puesto en el ranking de los principales productos de exportación.
En tercer lugar, las exportaciones de productos agropecuarios y alimentos (incluyen derivados de la soya y girasol) a noviembre de 2022 están disputando el segundo lugar en importancia a los hidrocarburos con una participación del 22,4% en las ventas externas. Está siendo liderado por la soya y sus derivados que representan el 16,7% del total exportado y ocupa el puesto tres entre los 10 principales productos. Después de la crisis del estaño en los años 80 (Daniel Schydlowsky) ya se habló de la soya como un nuevo ciclo de exportación. A principios de los años 90, la soya y sus derivados representaban un 7,6% del total exportado y en 2000 llegaron a concentrar una cuarta parte de las exportaciones totales y actualmente están en torno a una sexta parte.
En cuarto lugar, están las exportaciones de manufacturas propiamente tales, que excluye a alimentos y a la metalurgia, que en 2000 representaban un 14,7% de las exportaciones totales, peso similar a las exportaciones de hidrocarburos, pero declinaron en 2005 a un 8,8% y a fines de 2022 bajó su importancia a un 6,9% de las ventas externas. En 2000 resaltaban las exportaciones basadas en recursos naturales, como maderas y manufacturas (4,6%), joyería de oro (3,7%), textiles (2,4%), prendas de vestir (1,3%), manufacturas de cuero (1,8%) y muebles de madera (1,4%), que concentraban un 13,5% de las exportaciones totales, mientras que más de 20 años después apenas suman un 2% del total.
Con esta retrospectiva, creo que no hay tal maldición de recursos naturales, puesto que la naturaleza nos dotó de alimentos, minerales e hidrocarburos, una estructura relativamente diversificada de recursos naturales que nos ha permitido enfrentar los distintos cambios en los ciclos de productos de auge y declinación, como el del estaño, posiblemente, el gas natural, ahora el oro y ¿después qué? ¿El litio?
Gabriel Loza Tellería es economista, cuentapropista y bolivarista.