Jubilados retoman las calles y el Gobierno reitera que no atenderá sus demandas por ‘inviables’
“Si se aceptara su segundo aguinaldo y su bono de jubilado, eso implicaría 92 millones de dólares que el Estado boliviano no se encuentra en posibilidad de garantizar", declaró el ministro de Economía, Luis Arce.
Mientras los jubilados retomaron este miércoles sus protestas por su demanda de un bono de 3.000 bolivianos y el pago del segundo aguinaldo, el Gobierno ratificó que no atenderá sus pedidos por inviables y por no tener sustento en el tiempo. Advirtió además que aceptar la petición sería irresponsable.
El dirigente de los jubilados, Gregorio Anze, explicó que su sector decidió, en un ampliado realizado el martes, bloquear desde hoy calles y avenidas de las principales capitales del país y preparar para el lunes “una gran movilización” a fin de conseguir sus demandas, que según el Gobierno costarían al Estado 92 millones de dólares.
“El Gobierno es tozudo. El Ministro de Economía no quiere entender nuestra necesidad (…) el sector rentista del país va a ser consecuente con su lucha”, anuncio Anze en declaraciones a la red Erbol, mientras se preparaba para retomar las protestas de los jubilados.
Y mientras los jubilados salían a las calles, el ministro de Economía, Luis Arce, en conferencia de prensa en Palacio de Gobierno, desahució una vez más el pago del bono y el segundo aguinaldo. “No es sostenible en el tiempo”, indicó.
“Si se aceptara su segundo aguinaldo y su bono de jubilado, eso implicaría 92 millones de dólares que el Estado boliviano no se encuentra en posibilidad de garantizar (…) el Ministerio de Economía actúa con absoluta responsabilidad en el manejo de las finanzas públicas. Hemos visto que en el tiempo no es sostenible este pago. ¿Qué quiere decir? Que si hoy les pagaríamos el bono y el segundo aguinaldo, el próximo año no habría posibilidad de hacerlo y eso es irresponsable por parte de un Gobierno aprobar medidas de ese tipo”, declaró.
Arce recordó que el dinero que es destinado al pago de las rentas para los jubilados, que asciende a más de 560 millones de dólares, está garantizado.
Los jubilados comenzaron sus movilizaciones el lunes en busca de la aprobación del bono de 3.000 bolivianos y el doble aguinaldo. En horas de la tarde, tras una reunión con Arce, decretaron un cuarto intermedio hasta el 3 de septiembre para reponer el diálogo con la presencia del presidente Evo Morales. El Ministro desconoció el martes haber concertado una reunión con el Jefe de Estado y reiteró la imposibilidad de aceptar las demandas.
Irineo Rivera, también dirigente jubilado, anunció que en caso de no ser escuchados incrementarán sus medidas de presión. “Se termina con las marchas y se inicia directamente con el bloqueo de arterias importantes de la ciudad. Luego de una evaluación vamos a determinar otra situación que sea más contundente”.