Raúl Mayta: La producción industrial de litio en Bolivia está a punto de despegar
Las pruebas de laboratorio de la planta de tratamiento de agua salieron positivas. Esto es clave pues coadyuvará a la obtención del carbonato de litio
Imagen: ABI
La transición energética ha disparado la necesidad del mundo por los dispositivos acumuladores de energía. Las baterías tienen como un componente esencial al litio, el metal blanco del cual Bolivia es el país que posee los mayores recursos cuantificados. El Gobierno del presidente Luis Arce está enfocado en hacer de este mineral una importante fuente de ingresos, para lo cual se está desarrollando la infraestructura que permita su explotación industrial.
Conversamos al respecto con el viceministro de Exploración y Explotación de Recursos Energéticos, Raúl Mayta. La autoridad brinda información amplia y detallada sobre la situación y perspectivas de este proyecto en el cual las bolivianas y bolivianos tienen sumadas buena parte de sus esperanzas por un mejor futuro.
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Producción industrial de litio
—¿Cuáles son las últimas novedades sobre la Planta Industrial de Carbonato de Litio (PICL)?
—Yacimientos de Litio Bolivianos (YLB) concluyó la construcción de la Planta Industrial de Carbonato de Litio (PICL), misma que se encuentra ubicada en la localidad de Llipi en el salar de Uyuni. Corresponde al primer paso de la cadena industrial del litio que el Estado Plurinacional de Bolivia encara mediante la estatal litífera. Actualmente se encara el inicio de la etapa de pruebas, para próximamente iniciar la fase de producción. Es decir, está en la etapa de pruebas del proyecto y su respectiva conclusión mecánica. Es por ello que se requiere verificar que todos los equipos estén correctamente instalados, con las condiciones adecua[1]das para entrar en operaciones y cargas, evaluando los insumos y la materia. Están en prueba de equipos para comenzar las pruebas funcionales y, a partir de allí, tener un régimen de estabilización de la planta. Cabe mencionar que las pruebas de laboratorio de la planta de tratamiento de agua salieron positivas. Este es un elemento clave que coadyuvará a la obtención del carbonato de litio. De acuerdo con las características de la planta de tratamiento, sus funciones son, primero, proporcionar agua ultra tratada y especial para obtener litio grado batería y, segundo, que ese líquido se pueda reutilizar para que no se desperdicie. En la actualidad suministra alrededor de 150 metros cúbicos (m3) de agua para las pruebas operativas.
—Según informó YLB, la PICL iniciará pruebas en septiembre y la producción en octubre. ¿En qué momento se espera alcanzar una producción con grado batería y con qué volúmenes se espera llegar al cierre del presente año?
—Al respecto, se requiere que todos los equipos comiencen a funcionar adecuadamente y se realicen las pruebas que son necesarias antes de que arranque la producción. Posteriormente tenemos que iniciar la etapa de funcionalidad y operación de la planta. Por lo señalado, se tiene que evaluar cada una de las etapas y sus plazos, para que sea una realidad la operación de la planta en un tiempo prudente.
En cuanto al momento, se requiere cumplir con las etapas de ingeniería requeridas que permitan visualizar el comportamiento de la planta para la operación. Esto incluye la estabilización de la misma.
Actualmente se trabaja para que a la brevedad posible se tengan los resultados esperados. Una vez se obtenga el producto, se proyecta incrementar la producción de carbonato de litio a más de 2.000 toneladas métricas anuales, contando para ello también con la actual Planta Piloto, que está en operaciones, y con la Planta Industrial.
—¿Cuál es la situación de las plantas de EDL sobre las que se firmó convenio con las empresas chinas y una rusa?
—Recordemos que, en la presente gestión, YLB firmó tres importantes convenios con dos empresas chinas y una rusa, que comprometen un total de $us 2.800 millones de inversión para la construcción de cuatro plantas de Extracción Directa del Litio (EDL) con las cuales producirá 100.000 toneladas anuales de carbonato de litio grado batería.
En enero de este año, YLB y CBC (Catl Brunp & Cmoc) firmaron un convenio para emplazar dos plantas EDL para la producción anual de 50.000 toneladas de carbonato de litio, grado batería (25.000 toneladas cada una), en los salares de Uyuni y Coipasa. Para ello, el consorcio chino comprometió $us 1.400 millones de inversión.
Posteriormente, en junio, YLB con la corporación china Citic Guoan y la empresa rusa Uranium One Group (perteneciente a la Corporación Rosatom) también firmaron convenios para la construcción de dos plantas EDL de 50.000 toneladas anuales de capacidad entre ambas (25.000 toneladas cada una).
Los convenios fueron firmados en el marco del Modelo Económico Social Comunitario Productivo (MESCP) que consiste en industrializar los recursos naturales para el beneficio de los bolivianos, bajo un modelo de negocios soberano. Es decir que YLB tendrá el 100% de control sobre las cuatro plantas EDL ya que, en función a la legislación vigente, en ningún momento hay una participación societaria con las empresas extranjeras que construirán las plantas.
Se tiene previsto el inicio del proceso de construcción de las plantas EDL a la brevedad posible con el consorcio chino CBC, el cual presentó un “diseño final de factibilidad de inversión e ingeniería en la parte financiera”, ingresando a una etapa de análisis y posterior intercambio de criterios de acuerdo con las oportunidades de negocio.
—En días pasados se informó de que se registrará la patente de una tecnología desarrollada en Bolivia para la obtención de carbonato de litio con grado batería. ¿Cómo se logró esto?
—Se trata de una patente de invención por el desarrollo de un método tecnológico propio para el proceso de obtención de carbonato de litio de alta pureza, entre 99,5% y 99,9%, denominado también grado batería, mediante el uso del AEDT2Na (Etilen diamin tetra acético di sódico) a partir del carbonato de litio comercial. Es decir, consiste en un proceso de optimzación en la formación de cristales y en una cristalización efectiva y sistemática para disminuir la concentración de impurezas y obtener carbonato de litio de calidad. El método fue patentado a través de la emisión de una Resolución Administrativa por parte del Servicio Nacional de Propiedad Intelectual (Senapi). Fue desarrollado por tres profesionales bolivianos en el Centro de Investigación en Ciencia y Tecnología de Materiales y Recursos Evaporíticos de Bolivia (CICYT MAT-REB). Es por ello que nos enorgullece contar con profesionales altamente calificados en esta ind
—En los últimos días los precios internacionales del carbonato de litio vienen experimentando una caída. ¿Cuál es la razón para esto y cuál es la previsión que se tiene al respecto?
—Un elemento clave es la desaceleración en la demanda de vehículos eléctricos. El punto de inflexión para los precios del litio se produjo a finales del año pasado, cuando la demanda de vehículos eléctricos en China se desaceleró bruscamente antes del cese planificado por Beijing de los subsidios para la industria de $us 87.000 millones. Los fabricantes de baterías para vehículos de nueva energía redujeron la actividad de compra desde el comienzo del tercer trimestre a medida que sus inventarios de insumos se llenaron y los fondos de los subsidios gubernamentales anteriores se agotaron.
A pesar de un crecimiento interanual del 32% en las ventas de vehículos eléctricos en el país, los informes mostraron que 10 productores chinos de este tipo de movilidades presentaron nuevas rondas de recortes de precios para cumplir con los objetivos de ventas del segundo semestre.
El contexto macroeconómico preocupante para la economía china también se tradujo en un bajo gasto de los consumidores en automóviles eléctricos, ya que los riesgos para la estabilidad financiera sistémica agravaron el menor gasto de los consumidores.
Paralelamente, también existe una sobreoferta y exceso de capacidad, con la rápida expansión de la capacidad de producción de litio y de baterías de iones de litio en China. Los productos de litio aptos para baterías deben ser de la más alta calidad y pureza y, por tanto, son los más complejos de producir, consecuencia de ello, la oferta todavía no es una variable controlable, al menos en el corto plazo. Luego, la cuestión de una mayor eficiencia en la producción.
A medida que la tecnología de producción de baterías mejora y se vuelve más eficiente, es posible que se requiera menos litio para lograr la misma capacidad de almacenamiento de energía. El mayor desafío a la hora de pronosticar el futuro del mercado del litio grado batería es que la industria se encuentra todavía en una etapa inicial. No existen especificaciones aceptadas globalmente para el producto y, por lo tanto, no existen anclajes aceptados para el precio básico
—¿Con cuánto de producción total de carbonato de litio cerró Bolivia la gestión 2022 y a qué volumen de producción se espera llegar a finales de 2023?
—YLB cerró 2022 con Bs 555,2 millones de ingresos por ventas de carbonato de litio y cloruro de potasio. Por segundo año consecutivo, la estatal rompe su propio récord de comercialización. YLB registró la mayor producción de carbonato de litio el año 2022, llegando a las 600 toneladas métricas ™, las cuales se exportaron a China, Rusia y Emiratos Árabes por un valor de Bs. 366,8 millones.
Asimismo, se comercializó esta gestión alrededor de 55.000 tm de cloruro de potasio en los mercados interno y externo por un valor de Bs 188,4 millones. Los países a los que se exportó el producto fueron Brasil, Chile, Perú, Malasia y Paraguay, a los que se destinaron aproximadamente 33.500 toneladas.
Para la gestión 2023, YLB pretende ampliar las plazas de exportación a nuevos mercados como India y otros países de Asia. Además, se prevé incrementar los ingresos por ventas de los evaporíticos con la puesta en marcha de la PICL, con todo lo cual se proyecta incrementar la producción de carbonato de litio a aproximadamente 2.000 toneladas métricas anuales.
PERFIL
Raúl Mayta Viceministro de Exploración y Explotación de Recursos Energético
Es Ingeniero Geológica por la Universidad Mayor de San Andrés (UMSA), donde también concluyó el diplomado en Especialidad en geofísica aplicada a la exploración de hidrocarburos y otro en Alta especialización en geociencias en el Instituto Francés del Petróleo. Trabajó en YPFB desde 2012, donde desarrolló sus cono[1]cimientos en elaboración de proyectos exploratorios, estudios de evaluación hidrocarburífera regionales y locales, análisis de sistemas petroleros, estimaciones de volúmenes, riesgo geológico y planteamiento de propuestas de perforación exploratoria y programas de adquisición de información geológica y geofísica.