Las tres salas de la calle Sucre del Museo de Arte Contemporáneo de Santa Cruz de la Sierra albergan la segunda versión de Revolución Orgullo, una muestra montada para conmemorar a las diversidades sexuales. Se inauguró el 15 de junio y estará abierta hasta el 15 de julio. Contará con varias actividades paralelas y pretende ser un gran espacio de convocatoria y movida LGBTIQ+ para toda la ciudad.

En esta edición se busca exponer el aporte que han tenido históricamente las diversidades sexuales en la construcción de identidad y cultura cruceña, destacando la incursión de las personas LGBTIQ+ en el arte, la moda, el folclore, el estilismo, el deporte y la lucha por los derechos humanos. Para esta ocasión, La Pesada Subversiva (colectiva transfeminista y disidente sexual), ha trabajado de forma colectiva en alianza con un grupo de artistas, activistas y gestores culturales para hacer posible la muestra. La Casa Trans, Paranoia School y la Casa Cabana son algunas de participantes. El Colectivo Rebeldía y OXFAM Bolivia han puesto los recursos necesarios para materializar las obras expuestas en Revolución Orgullo. La artista Alejandra Menacho y la activista Sarah Sanjinés son las responsables de la dirección general, bajo la curaduría de María Teresa “Matecha” Rojas, reconocida curadora de arte, militante de las causas feministas y conocedora de las luchas LGBTIQ+ en Bolivia.

El camino de la exposición

Para construir la muestra, la pluma ha cumplido la figura de hilo conductor. El texto curatorial indica: “Esta es una de las características más potentes de las diversidades y disidencias sexuales. Tiene que ver con nuestra forma de ser y la manera en que cada persona expresa su propia diversidad, nuestra forma de andar, hablar y vestirnos; nuestro tono de voz, la estética de nuestros cuerpos y el lenguaje tan particular que usamos al comunicarnos entre nosotros, nosotras y nosotres. Además, la pluma ha sido siempre un estímulo de creatividad que le da sentido a un conjunto de manifestaciones transgresoras y de carácter artístico, social y político de las personas LGBTIQ+”.

Revolución Orgullo está compuesta por más de un centenar de piezas. Se exponen obras en formato fotográfico, objeto, muralismo, instalación, diseño, ilustración digital, videoperformance y se tocan temas de gran relevancia para el activismo actual. En la sala central se expone una instalación con la gráfica principal de la muestra: la obra contiene objetos tradicionales cruceños, como sombreros de saó y ángeles chiquitanos, intervenidos con simbologías y colores característicos de las diversidades sexuales. Destaca un tipoy confeccionado con colores de la bandera trans.

Repasemos ahora las obras. Transgresión estética está compuesta por una serie de nueve fotografías en las que el cuerpo es el principal protagonista. Se muestra a ocho personas en escena, vistiendo de una manera extravagante, con el objetivo de exteriorizar sus militancias políticas, tanto a nivel personal como colectivo. En esta obra la ropa se convierte en una forma de protesta y cada participante sostiene un cartel con lemas y consignas características de los movimientos LGBTIQ+. Se hace una crítica al sistema binario del género, al machismo y la violencia, pero también se remarca la visibilidad de las personas que viven con VIH y la necesidad de educación integral en sexualidad.

Amores diversos muestra retratos de parejas conformadas por gays, lesbianas, bisexuales y personas trans. Las fotos fueron tomadas en la plaza principal 24 de Septiembre de Santa Cruz, con la finalidad de defender el derecho de las diversidades sexuales a expresar sus afectos y muestras de cariño en espacios públicos sin que esto sea un motivo para sufrir insultos, señalamiento, hostigamiento ni juicio moral. La obra incluye a parejas muy diversas y en su etapa de producción fue motivo de un impasse con la Gendarmería Municipal: un par de uniformados interrumpieron al equipo de Revolución Orgullo, afirmando que lo que se estaba retratando no era “correcto”. La Pesada Subversiva denunció esto hechos a través de sus redes sociales.

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Disidencias digitales – Un hogar orgulloso presenta obras en formato de ilustración realizadas por jóvenes artistas emergentes que forman parte de la población LGTBIQ+ a partir de una convocatoria abierta. Los cuadros se encuentran montados de tal manera que simulan una pared de fotografías familiares. Su ficha de descripción señala: “Con este muro se pretende traer obras de artistas que hasta ahora se habían visto marginalizados a los espacios digitales y en esta ocasión tienen la oportunidad de exponer en las paredes del museo. Las ilustraciones abordan diversas temáticas y técnicas, demostrando la inmensa diversidad de expresiones artísticas que quedan excluidas de los espacios públicos”.

El universo drag

Dragmatizando es un video performático y documental que invita a sumergirse en el fascinante mundo drag, revelando la persona detrás del personaje y explorando sus vivencias y aprendizajes. Está proyectado en una pared adornada con una variedad de accesorios emblemáticos de este arte, como vestidos, pelucas, tacos y mucho más. La pieza busca ser una ventana al corazón y el alma de la comunidad drag. El documental también muestra momentos de vulnerabilidad, donde las drags se despojan de su maquillaje y vestuario, revelando las emociones y experiencias que las han moldeado y fortalecido. El objetivo es darle al espectador una comprensión más profunda y de respeto por el arte drag, comprendiendo que detrás de cada personaje hay una persona que anhela ser vista y escuchada. Participan las artistas Adri Kardashian, Bruna Cabana, Kira Cabana y Miz Aleiah.

LesboRebeldías es un muro dedicado a los movimientos de mujeres lesbianas y bisexuales de Santa Cruz. En la serie Marimachas se exponen retratos de personas con diversas expresiones de género, demostrando la diversidad que hay dentro del propio mundo lésbico y apropiándose de uno de los insultos más comunes que se le suele decir a las lesbianas en nuestro país, convirtiendo esa injuria en una bandera de reivindicación. También se pueden ver fotografías de La Cancha, un grupo de chicas dedicadas al fútbol que lleva más de 14 años organizando campeonatos y eventos deportivos con la participación de lesbianas en Santa Cruz, defendiendo el derecho a jugar fútbol despojándose de todo prejuicio. Completa el muro una serie de fotografías de hitos sociales del activismo lésbico cruceño.

El closet es una pieza que llama mucho la atención: literalmente es un closet, un ropero intervenido con frases y accesorios característicos de las marchas del orgullo. Su descripción expresa: “El closet ha significado mucho dolor para nuestras vidas, ha sido un espacio en el que la sociedad LGBTIfóbica, machista y patriarcal nos ha acorralado para que sintamos culpa y vergüenza de mostrar lo que realmente somos. Con esta obra convertimos el closet en un lugar de expresión de nuestra diversidad, para que no sea el miedo lo que determine la decisión de expresar abiertamente nuestra orientación afectiva y sexual”.

El mural del orgullo

Por otra parte, un impresionante mural se exhibe en una de las salas. La obra ha sido trabajaba por la muralista Renate Hollweg, el artista urbano Harry Montec, la activista Kerana de Santa Cruz y el activista Maximiliano Vargas. Es un mural de protesta sobre las causas trans, principalmente referido a los derechos cercenados en el año 2017 a la vigente Ley de Identidad de Género, la cual recibió una sentencia del Tribunal Constitucional Plurinacional de Bolivia, dejando sin efecto el reconocimiento pleno para mujeres y hombres trans de nuestro país.

Por último, se ha recuperado un enorme archivo fotográfico perteneciente al activista Victor Hugo Vidangos, más conocido como Ninón, y la señora Kitty Flores, una de los mayores referentes de las diversidades sexuales de Santa Cruz. Este archivo es parte de una memoria histórica nunca antes vista públicamente: narra visualmente los escenarios sociales que muchas personas LGBTIQ+ vivieron en el transcurso de las décadas de los 80, 90 y principios de los 2000. Se puede ver cómo las personas trans desde hace varias décadas atrás vienen aportando a los eventos culturales más importantes de Santa Cruz. Por ejemplo, el Carnaval, organizando grandes eventos de confraternización y manifestación artística.

Para sus organizadores, esta muestra simboliza muchas cosas. “No se reduce a una exhibición dentro de un museo, es también un espacio amplio de convocatoria y movida cultural y artística para conmemorar el mes de las diversidades sexuales. Significa la continuación de la trayectoria de lucha y resistencia de nuestros movimientos, es un homenaje a quienes estuvieron antes, un reconocimiento a quienes están ahora y un impulso para quienes vendrán después. Revolución Orgullo es un espacio para abandonar el miedo, dejar el silencio y olvidarnos de la vergüenza impuesta socialmente sobre nuestras identidades y afectos, es un lugar para sentirnos orgullosamente libres y es un aporte a la construcción de una sociedad libre de odio, sin violencia y respetuosa hacia las personas LGBTIQ+”.

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Texto: Chris Egüez (Marica y Marginal)

Fotos: Marco Hurtado