4 de los 6 reactores de Fukushima están fuera de control
Hay problemas de distinta índole, los reactores más dañados de la central nuclear japonesa son el 2 y el 3.
La información de última hora en la planta nuclear japonesa de Fukushima (a 270 km de Tokio) dañada seriamente por el terremoto y tsunami del viernes pasado indica que cuatro de los seis reactores están afectados, algunos de forma muy grave, según El Mundo.
Hay problemas de distinta índole en cuatro de los seis reactores de la central. Lo peor está en los reactores 2 y 3, que parecen tener dañadas sus estructuras de contención, segunda de las tres capas de protección de un reactor, según El País.
La ministra francesa de Ecología, Nathalie Kosciusko-Morizet, aseguró hoy que «el peor escenario es posible e incluso probable», en referencia a la crisis nuclear que atraviesa Japón.
Los reactores 1, 2 y 3 tienen parte del núcleo al descubierto, agrega El Mundo. Eso significa que el combustible nuclear está expuesto y por tanto carece de la refrigeración adecuada para evitar que el proceso de fusión avance. Si esto ocurre, la reacción puede ser incontrolable y podría fundirse totalmente el núcleo del reactor.
Explosiones, fusiones parciales del núcleo, incendios, expulsión de partículas radiactivas a la atmósfera… Los seis reactores que configuran la central japonesa, con graves problemas desde el terremoto del viernes, siguen su camino hacia la catástrofe nuclear. Y lo que muchos intentaban controlar se va de las manos.
El 2, uno de los más afectados, no tiene prácticamente refrigeración, mientras que su vasija de contención resultó dañada tras la explosión de hidrógeno que se produjo en la madrugada del martes. Los reactores 5 y 6 también viven problemas de refrigeración ya que la temperatura de sus piscinas se ha incrementado considerablemente, aunque se encuentra en niveles normales.
El 3, el más peligroso
Sin lugar a dudas, el reactor más peligroso es el 3, ya que es el único de la planta en el que se utiliza plutonio, mucho más nocivo que el uranio.
Dañado por una explosión desde el lunes, tiene graves problemas de refrigeración, ha producido una fusión parcial del núcleo y su sistema de contención está dañado, por lo que ha expulsado partículas radiactivas a la atmósfera, lo que junto al escape del reactor 2 ha elevado los niveles de radiación hasta los 100 milisievert por hora, por lo que las labores de refrigeración se han parado hasta que desciendan dichos niveles.
En este reactor se han medido tasas de dosis muy elevadas (400 milisievert) junto a una de las paredes del edificio del reactor. Estos valores podrían estar relacionados con la situación en la que se encuentra el núcleo del reactor, que está descubierto, con su recinto de contención o con el estado de la piscina de combustible tras la deflagración sufrida.
El 4, en estado crítico
Por su parte, el reactor 4, que se encuentra en estado «crítico», según la compañía TEPCO. Desde ayer se han producido dos incendios y la piscina que enfría las barras de combustible está completamente vacía.
Tal es la situación que el Gobierno ha ordenado a la empresa inyectar agua en la piscina «tan pronto como sea posible para evitar un desastre nuclear importante».
Aunque las llamas en el reactor 4 fueron controladas rápidamente, la detonación provocó dos orificios de ocho metros cuadrados en el muro del edificio exterior del reactor, dejando en contacto con el aire la piscina de combustible. Además, el techo se ha agrietado.
En resumen, se estima que un 70% de las barras de combustible nuclear han resultado dañadas, de las que un 33% pertenecen al reactor 2. Además, se cree que los núcleos de los reactores se han fusionado parcialmente ante la falta de refrigeración.
Mensaje inusual
El emperador Akihito dirigió hoy a los japoneses el primer mensaje por televisión de sus 22 años de reinado para pedirles que resistan y se ayuden unos a otros con el fin de superar una crisis sin precedentes, informa EFE.
La excepcionalidad del mensaje del emperador de la era Heisei (Paz) da muestra de la situación extrema que vive Japón por el seísmo de 9 grados del viernes, causante de un aún más devastador
tsunami y de una crisis nuclear que tiene en vilo al mundo.
«Espero, sinceramente, que el pueblo pueda superar este momento desafortunado cuidándose los unos a los otros», dijo Akihito, de 77 años y salud delicada, a través de la cadena de televisión pública japonesa NHK.