El jefe máximo de las FARC, Rodrigo Londoño expresó su confianza en que se superarán los “escollos” de última hora, como el trámite de suspensión de órdenes de captura de algunos guerrilleros nombrados delegados, y que el diálogo con el Gobierno colombiano se iniciará mañana en Oslo.

“Lo más importante es que llegamos a un acuerdo para instalar la mesa de conversaciones” y que “cada uno está obrando al máximo para destrozar los escollos que necesariamente surgen”, dijo Londoño en su primera entrevista con un medio colombiano (RCN) desde que asumió  la dirección de la guerrilla (diciembre de 2011).

Londoño, alias Timochenko, se mostró confiado en que el diálogo se iniciará mañana en Oslo (Noruega), a pesar de que los negociadores de ambas partes (hasta el cierre de esta edición) aún no han podido viajar a Noruega. “Aceptamos finalmente la fecha del 17 partiendo de que los cálculos del Gobierno en cuestión de trámites y logística eran los correctos. Confiamos que así sea”, subrayó.

En alusión a las dificultades de último minuto que impedían que los negociadores guerrilleros y los del Gobierno estén ya en la capital noruega, señaló: “A unos se le crecen los ríos, al otro lo afecta la lentitud paquidérmica del Estado para adoptar decisiones, pero ahí vamos, que es lo importante”.

Tareas. El protocolo acordado con el Gobierno para permitir una salida segura del país a los delegados designados por la guerrilla, definió que “Iván Márquez” (número dos de la FARC y jefe negociador) estaría en el quinto grupo que sería recogido  por funcionarios gubernamentales.

“Por cuestiones de seguridad, nuestra gente no se traslada hasta que no se confirme el punto y la hora”, comentó, antes de señalar que cuando esos datos fueron confirmados se presentaron inconvenientes meteorológicos.

La última noticia sobre Arango, indicó, fue que estaba cruzando un río que bajaba con una gran creciente por las lluvias que se presentan en algunos puntos de Colombia, lo que supuso un “retardo de dos o más horas”.

Además, habló sobre “demoras no previstas” en “el trámite de la suspensión de las órdenes de captura”, un compromiso del Estado colombiano que se realizó semanas atrás con vistas a facilitar el tránsito de los negociadores guerrilleros por el país antes de viajar a La Habana y de allí a Oslo.

“Quien tenga una orden de captura vigente está corriendo riesgos donde quiera que esté, por tanto resulta elemental la necesidad de suspenderlas para hacer posible nuestra presencia en la mesa, ¿y de qué carácter? Cabría explicar a quienes se comprometieron con nosotros en la mesa”, dijo.

Cuba es la sede oficial del proceso

El Gobierno colombiano y las FARC acordaron negociar la paz a partir de una agenda de seis puntos definida en unas conversaciones secretas concluidas en agosto en Cuba, donde se desarrollará también la negociación después de la inauguración en Oslo. AFP