Grecia acepta implementar un nuevo plan de ajuste
Apoyo. Papandreu supera la moción de confianza en el Parlamento
Desde la próxima semana, el Gobierno griego podrá implementar el nuevo plan de ajuste que le exige la Unión Europea y el FMI para desbloquear el quinto tramo (12.000 millones de euros) del rescate que aprobaron en mayo del 2010.
Papandreu ha superado en el Parlamento heleno una moción de confianza y ha recabado así el apoyo a su nuevo Gobierno. El margen de aprobación fue mínimo. Sólo 155 diputados, de un total de 298 votos emitidos, dieron su voto de confianza al Gobierno; sólo cuatro más de los que necesitaba. «Votaron en contra 143», ha anunciado el presidente del Parlamento heleno, Filipos Pachálnikos.
Durante el debate previo a la votación, el nuevo ministro de Finanzas, Evangelos Venizelos, afirmó que Atenas quiere introducir «un plan de recuperación nacional» que sobrepase las reformas que exigen la Unión Europea (UE) y el Fondo Monetario Internacional (FMI). «Necesitamos un plan paralelo de reestructuración» del país «cuyos objetivos estén armonizados con el programa presupuestario plurianual», el nuevo plan de austeridad dictado por la UE y el FMI, «pero que nos permita mejores resultados en materia presupuestaria, de crecimiento y de justicia social», afirmó.
En espera de la votación, y bajo draconianas medidas de seguridad, varias miles de personas (entre indignados, huestes sindicales y gente con el bolsillo dañado) convocaron a una masiva marcha de protesta para emitir un «voto de desconfianza» al propio Papandreu, y para protestar contra las medidas de austeridad dictadas al país por la UE y el FMI. El poderoso sindicato de funcionarios también convocó a una concentración, pero su cortejo no se distinguía de la multitud de «indignados» que no cesaba de afluir, con pancartas con el euro en forma de cruz gamada y alusiones muy críticas a la canciller alemana, Angela Merkel, y al presidente francés, Nicolas Sarkozy, a quienes los griegos hacen responsables de sus cuitas, según un fotógrafo de la AFP.
Para los socios europeos de Grecia, la alternativa a este esquema sería la bancarrota. Por su parte, el presidente de la Comisión Europea, José Manuel Barroso, propuso desbloquear fondos del presupuesto de la UE para Grecia que podrían elevarse a 1.000 millones de euros, para ayudar al país a reactivar su economía y luchar contra el desempleo.
Criticando la posición europea, el secretario del Tesoro de Estados Unidos, Timothy Geithner, instó a los líderes de la UE a hablar «con una clara, única voz» sobre la crisis económica en Grecia. Los países europeos «tienen un complejo conjunto de instituciones. Pero tienen que ponerse de acuerdo sobre una estrategia, y con claridad, para que las personas en los mercados entiendan cuál es el plan básico», sostuvo. El mercado sigue presionando a Grecia. En la emisión de 1.625 millones de euros en títulos a tres meses, los intereses subieron a 4,62%, en alza con relación al 4,06% de la última emisión del mismo tipo en mayo.
Causas de la crisis helena
Para los analistas, el excesivo gasto público, el bajo nivel de ingresos por concepto de impuestos, la manutención de empresas gubernamentales deficitarias y otros activos mal manejados son algunos de los motivos detrás de la crisis griega.