ONU señala que los sistemas penitenciarios de la región enfrentan una “crisis profunda”
La reintegración social es la finalidad esencial de las penas privativas de libertad, pero adicionalmente, la rehabilitación y la reintegración de los que han delinquido son garantías de la seguridad ciudadana, y consecuentemente el Estado debe fomentar las condiciones necesarias para lograr estas metas.
La Organización de los Estados Americanos (OEA) considera que los sistemas penitenciarios de los países del continente atraviesan por una “crisis profunda” por lo que organizó un encuentro institucional que permita mejorar los esfuerzos para prevenir y enfrentar los desafíos planteados por la delincuencia y la violencia.
La reunión, de carácter técnico, contó con la participación de autoridades de los Estados Miembros de la OEA con responsabilidad en el desarrollo e implementación de las políticas penitenciarias y carcelarias en sus países, así como participantes de diversos organismos internacionales y organizaciones de la sociedad civil.
“Los sistemas penitenciarios de las Américas enfrentan una crisis profunda, con un evidente deterioro de las condiciones carcelarias”, destacó el Secretario de Seguridad Multidimensional de la ONU, Adam Blackwell, durante el desarrollo de la Tercera Reunión de Autoridades Responsables de Políticas Penitenciarias y Carcelarias de América.
A decir del diplomático, la preocupación de los ciudadanos, y por consecuencia de los actores políticos, se ha centrado en el castigo de aquellos que delinquen, en lugar de la reintegración de los mismos, por lo que el incremento poblacional en las cárceles del Hemisferio tiene directa relación con políticas de prevención que no han tenido el éxito esperado.
Según Blackwell, la reintegración social es la finalidad esencial de las penas privativas de libertad, pero adicionalmente, la rehabilitación y la reintegración de los que han delinquido son garantías de la seguridad ciudadana, y consecuentemente el Estado debe fomentar las condiciones necesarias para lograr estas metas.
La reunión llega en un momento en que los países de la región, especialmente en América Central y el Caribe, han comenzado a desarrollar e implementar estrategias integrales de seguridad pública y se han comprometido a llevar a cabo amplios procesos de reforma institucional, incluyendo las políticas penitenciarias y de los sistemas carcelarios y las políticas de reintegración, según un comunicado de la ONU.
Entre los principales temas que fueron discutidos estuvieron las áreas de infraestructura, seguridad y evaluaciones de admisión (planificación correccional, seguridad e inteligencia, evaluación de riesgos), estrategias de intervención, liberación y supervisión comunitaria (programación/ intervenciones; rehabilitación, reintegración de empleo, educación y capacitación; estrategias de liberación graduales; colaboración con las comunidades; sector privado y ONGs), y datos y estadísticas sobre prisiones.