Barras Los más fanáticos aún celebran el tri
Tres familias exponen su amor al Tigre en las fachadas de sus domicilios y en la intimidad de su hogar
Muchos fanáticos stronguistas aún disfrutan la obtención del tricampeonato de The Strongest y lo demuestran abiertamente, como las familias Canaviri, Butrón y Móldez, quienes no dudaron en embanderar y hasta pintar sus paredes con los colores aurinegros y mantenerlos así hasta ahora, pese a que ya pasaron casi dos semanas de la conquista del tri.
Tal exposición en la fachada de sus domicilios no pasó desapercibida para propios y extraños, menos para sus vecinos, que en el caso de los dos inmuebles en Villa Copacabana generó hasta el malestar de algunos hinchas académicos, que la situación fue tomada como una provocación y no faltó quien intentará arrancar alguna de las gigantes banderas y las pretendiera quemar.
“Es una manera de expresar nuestra alegría, porque no todos los años se sale tricampeón. Por eso tenemos la casa embanderada con nuestra gigante enseña que se extiende en todo el frontis”, afirma Ramiro Canaviri, quien transformó su domicilio, ubicado entre las calles Antonio Velasco y Carlos Winner, y lo volvió atigrado, como si fuese una casa de campaña política.
Aclara que en absoluto hizo eso por molestar a los académicos, sino que vive los días más felices desde que es hincha del club del barrio de Achumani. “Los stronguistas tenemos que reconocer que sufrimos muchos años, porque no nos iba bien, pero ahora tenemos una buena directiva, mejor plantel y yo creo la mejor hinchada de Bolivia. Siempre fuimos”, sostiene.
Canaviri, que se dedica a construir letreros luminosos, destaca que el Tigre se caracterizó por ser primero en la historia del fútbol. Unas cuadras más abajo, por la avenida Tito Yupanqui, en la misma Villa Copacabana, otro apasionado vecino y fanático atigrado siguió la misma línea de pintar su fachada con los colores atigrados, además de que cuenta con una sala llena de souvenirs con motivos atigrados.
Se trata de Rómer Butrón, quien afirma que es uno de los fundadores de la barra Rugido Atigrado, que alienta en cada partido desde la zona de preferencia del estadio Hernando Siles. “Desde hace 20 años, ahora lo hacemos con mayor frecuencia alentando desde esa parte del escenario miraflorino al equipo de nuestros amores. Se dice que es un lugar aristocrático, por eso estamos nosotros para dar la fiesta”, aseveró este coripateño.
Butrón, nacido en Coripata, comentó que: “Nosotros tratamos de imponer otro estilo y por ello decidimos instalarnos en la zona de preferencia, donde en el ámbito futbolístico todos denominan el lugar aristocrático, nosotros quisimos ganar esa parte de la tribunas porque nuestros demás compañeros están ubicados en la zona de general, curva sur”. Asegura que en el espacio o sector que es de su propiedad, siempre le añade un motivo o detalle atigrado. Dice que en su casa no falta ningún decorado atigrado, ya sea dentro o fuera.
“Además llegó al club un ángel como el presidente Kurt Reintsch, quien nos ha hecho recuperar la autoestima para creer en nosotros mismos”, destacó. Con esa misma honda, pero ya en el barrio de Miraflores, otro fanático atigrado como Édgar Móldez decidió embanderar su domicilio con las banderas atigradas y así permanecerá hasta Reyes.
“Nosotros como hinchas nos sentimos motivados para apoyar al equipo y a la dirigencia no sólo por los títulos, sino porque enseñamos a las nuevas generaciones de stronguistas, como nuestros hijos y nietos, a apoyar al equipo en todo momento”, manifestó
Sostiene que el hecho de utilizar banderas, coleccionar souvenirs relacionados al aurinegro es una pasión que la lleva dentro y no tiene freno, porque la misma cobró intensidad desde hace más de diez años. “Además es una manera de levantar el orgullo y la felicidad que uno siente de ser stronguista. Porque la verdad uno espera que los éxitos sigan, pero lo vivido ahora con el tri se recordará por muchos años”, expresó.
Explicó que con estas muestras de identidad, como embanderar la casa de uno, el aficionado stronguista transmite fuerza a otros hinchas, a los mismos jugadores. “Es una muestra de confianza hacia ellos. El Tigre fue superior a todos los rivales, porque comenzó ganando desde la tribuna y en la cancha los jugadores hicieron su parte”, aseveró el aficionado.
Los atigrados exponen su razón
‘Disfrutamos este momento’: Ramiro Canaviri, hincha atigrado
“Con el aporte de todos los que estamos pendientes del club se logró un tercer título. Nosotros disfrutamos este momento y así será hasta que se vuelva a jugar”.
‘El Tigre está de moda’: Rómer Butrón, hincha atigrado
“En todo espacio que me pertenece o depende de mi tengo algo atigrado, además que el Tigre está de moda pero no por casualidad, sino por los títulos seguidos que ganó”.
‘Los jugadores quieren al Tigre’: Édgar Móldez, hincha stronguista
“Algo importante es que no-sotros los stronguistas estamos con el club en todo momento y los jugadores quieren al Tigre, están bien identificados y eso hace mucho”.