Porque la cuestión es embocar
Universitario fue a Venezuela y recuperó lo cedido en casa, ante Cruzeiro.
Su principal mérito radicó en saber resolver una de las escasas ocasiones que elaboró. Sí, porque al margen de la deficiente respuesta del arquero Romo, después del disparo de Bejarano, el oportunismo del colombiano Castro desniveló un partido discreto, monótono, de muy pocas luminarias.Tampoco se puede negar que el visitante supo aminorar las revoluciones de un local —el Mineros— que entró decidido a prevalecer, como que a los 2 minutos el travesaño se interpuso a un remate de Peña. Después, el cuadro venezolano se limitó —producto de evidentes falencias— al deseo infructuoso de alcanzar supremacía. Entonces, puso de manifiesto que con ganas no bastaba.
“U” le arrebató la pelota (Ribera y De la Cuesta anduvieron bien en este acápite) y eso —que se traduce como control de juego— alcanzó para reducir en buen grado el posible peligro sobre Robles, aunque habrá que convenir en que el meta jugó tranquilo y transmitió seguridad.
Entonces, al margen de la trascendencia del resultado, cabe no ignorar que la fórmula de apuntar a que Mercado, a fuerza de pelotazos, prevalezca en el área contraria continúa como una asignatura pendiente. El ecuatoriano volvió anoche a abandonar la zona determinante en varios tramos del cotejo. Es la natural reacción de un atacante que recibe poco el balón. Y cuando retrocede en pos de buscarlo hace a un lado la misión esencial que se le encomienda.Está claro que la ausencia de Saucedo se deja sentir porque este equipo de Baldivieso extraña mayor cuota de gestación y talento. Lo advertimos en el debut y también en Puerto Ordaz.
Y más allá de problemas como el referido, el equipo de Sucre mantiene el invicto al cabo de dos fechas. Y su valla está en cero. No es poco, por cierto. Alimenta su esperanza de avanzar.
Con todo lo que padecen nuestros representantes si de ganar en el extranjero se trata es imposible pasar por alto la importancia de estos tres puntos, pero la producción exige ajustes. Esos que ahora aparecen como imprescindibles para cosechar las seis unidades que Universitario precisa atesorar en el Patria como trampolín hacia la clasificación.
(*) Óscar Dorado es periodista.