Ellos están para jugar
Giorgian de Arrascaeta no es Superman. Uruguayo, tan solo es un jugador más del fútbol profesional, como los hay miles y miles. Y al servicio de su selección, con ella hizo un largo viaje hasta Asia, donde jugó contra Corea del Sur y Japón los amistosos en la fecha FIFA de octubre; y tras cumplir esa parte de su trabajo subió al siguiente avión de regreso a Brasil.
Giorgian de Arrascaeta no es Superman. Uruguayo, tan solo es un jugador más del fútbol profesional, como los hay miles y miles. Y al servicio de su selección, con ella hizo un largo viaje hasta Asia, donde jugó contra Corea del Sur y Japón los amistosos en la fecha FIFA de octubre; y tras cumplir esa parte de su trabajo subió al siguiente avión de regreso a Brasil.
Más de 25 horas después de otro vuelo agotador, con escalas incluidas, aterrizó faltando otras cinco para que su equipo, el Cruzeiro de Belo Horizonte, jugara la final de la Copa de Brasil ante el Corinthians. Llegó a la concentración y se puso a disposición, no fue titular en el partido, pero entró en el segundo tiempo e hizo el gol del triunfo y del título. Fue el héroe.
En Bolivia, el viernes, Alfredo Arias, entrenador de Bolívar —uruguayo como De Arrascaeta— pedía “sentido común” para convocar jugadores a la selección, preocupado porque los tres suyos que también fueron a Asia para jugar con Myanmar e Irán, regresaban ese día después de un larguísimo viaje y no se sabía si estarían en condiciones de ser o no tomados en cuenta para jugar el domingo contra Aurora.
Leonel Justiniano fue titular y figura del primer tiempo en el valle. Salió porque lo golpearon. Moisés Villarroel resistió como si nada los 90 minutos. Y Erwin Saavedra entró en el segundo tiempo y también corrió fiel a como es.
Ni Arrascaeta ni los bolivianos se quejaron de cansancio, de la readaptación que tuvieron que hacer al horario o cosas como esas de las que suelen hablar los entrenadores, expertos para poner excusas antes de que las cosas pasen.
En la alta competencia, los futbolistas están para eso. No es que todas las veces son sometidos a ese trajín. Es muy de vez en cuando. Ellos están para jugar si se los piden, porque aparte de ser su trabajo, hacen lo que más les gusta. Muy a pesar de algunos DT.