En un año al menos 10 personas murieron en Pando por heridas múltiples de bala
No se descarta que se trate de ajustes de cuentas, debido a la forma en que fueron atacadas las víctimas. En 2011 el hospital Roberto Galindo atendió 11 casos y este año 10.
En Cobija, ciudad ubicada en el extremo norte de Bolivia y vecina con Brasil, este año fueron atendidas al menos diez personas con múltiples heridas de bala en el hospital público Roberto Galindo, una menos que en 2011. Se cree que podría tratarse de víctimas de ajustes de cuenta del narcotráfico u otras actividades ilícitas.
Un hecho de estos ocurrió el 27 de noviembre, cuando un grupo de sicarios ingresó a ese nosocomio y victimó a un adolescente a plena luz del día.
Adolfo Mitre, jefe de médicos del hospital, informó a La Razón Digital que el 70% de las personas atendidas con múltiples heridas de bala tiene nacionalidad boliviana, mientras que en el restante 30% aparecen brasileños y peruanos.
En el caso antes citado, un grupo de sicarios ingresó al nosocomio en la madrugada del 27 de noviembre y asesinó con varios disparos de armas de fuego a Jaime A. de 16 años, de nacionalidad peruana, quien se recuperada de otro ataque violento. Una semana antes, Jaime A. había sido abandonado en las afueras de la ciudad tras haber sido degollado, donde fue rescatado por la Policía y logró salvar la vida tras una oportuna intervención médica.
El adolescente recibió cuatro impactos de bala. Los asesinos ingresaron por una puerta alterna para evadir la vigilancia policial que se había dispuesto en el pasillo por donde se accedía a la habitación de la víctima en el hospital Roberto Galindo .
En las estadísticas del nosocomio no hay un detalle sobre el número exacto de heridas de bala que recibieron las víctimas, pero “vienen con varias heridas”, afirmó Mitre. Precisó además que entre las cifras tampoco figuran aquellos cuerpos con heridas de bala que son directamente derivados a la morgue porque fallecieron en el trayecto al nosocomio o porque fueron encontrados sin vida.
El 18 de noviembre, la fuerza antidroga capturó en Cobija a Mauro Vásquez, considerado un “pez gordo del narcotráfico”, por sus nexos con narcos en Brasil y su influencia en Pando.
Los antecedentes de Vásquez datan de 2008, cuando fue detenido por primera vez. En ese entonces ingresó a operar en la capital pandina de Cobija, frontera con Brasil y Perú, y según datos periodísticos a partir de informes de la Fuerza Especial de Lucha Contra el Narcotráfico (FELCN), el detenido se dedicaba a la compra de motocicletas que luego vendía a bajo costo a personas de pocos recursos. A cambio, los beneficiarios le daban información.
Mitre recordó que hace dos años también un grupo de delincuentes protagonizó una balacera en la capital pandina cuando intentó liberar a una persona vinculada con hechos delictivos. Consideró que se trató de un ajuste de cuentas lo ocurrido la madrugada del 27 de noviembre.