Doria Medina dice que resistirá ‘persecución’ del Gobierno
Doria Medina sostuvo que "nadie confía" en la Justicia boliviana, pero pese a ello se presentará a la audiencia cautelar por una "obligación moral de resistir esta persecución que hay porque es la manera de defender la democracia".
El dirigente opositor boliviano Samuel Doria Medina sostuvo hoy que resistirá la «persecución política» que, a su juicio, ejerce en su contra el Gobierno de Evo Morales porque esa es la «manera de defender la democracia».
El empresario hizo estas declaraciones a Efe por teléfono desde la ciudad sureña de Sucre, donde en las próximas horas asistirá a una audiencia en el Tribunal Supremo de Justicia, que definirá si es detenido o no por la acusación de que provocó un daño al Estado hace 25 años, cuando era ministro de Planeamiento.
Doria Medina sostuvo que «nadie confía» en la Justicia boliviana, pero pese a ello se presentará a la audiencia cautelar por una «obligación moral de resistir esta persecución que hay porque es la manera de defender la democracia».
«Es un juicio sobre algo que sucedió hace 25 años, entonces es una persecución política pero tengo el deber moral de resistir, de hacerme presente porque todos quienes defendemos la democracia tenemos la obligación de resistir ante estos actos de judicialización de la política», afirmó.
La audiencia debía instalarse el pasado 3 de noviembre, pero finalmente se aplazó a hoy por la inasistencia por motivos de salud de dos de los diez imputados dentro de este caso.
La Fiscalía ha acusado al líder de la centrista Unidad Nacional y a otras nueve exautoridades por los supuestos delitos de incumplimiento de deberes, contratos lesivos al Estado y conducta antieconómica.
Las acusaciones tienen que ver con la autorización para la creación de la entidad Formación de Capital en Áreas Secundarias (Focas), que transfirió 21 millones de dólares a Fundapro, una entidad sin fines de lucro de apoyo al microcrédito.
Doria Medina ha justificado que la financiación a Fundapro fue aprobada porque era uno de los requisitos de Estados Unidos para condonar a Bolivia una suma total de 361 millones de dólares.
Fundapro comunicó en las semanas pasadas que ha terminado de pagar la deuda contraída con el Estado boliviano más los respectivos intereses.
El político afirmó hoy que como «se ha desvirtuado» que hubo un daño económico al Estado, el Gobierno buscó en las últimas semanas otros temas para intentar procesarlo.
«Es conocida esa forma de operar del Gobierno de que cuando le falla un tema hace otra acusación. Claramente es una persecución política la que estoy sufriendo, pero vamos a resistir sin miedo porque sabemos que la democracia va a prevalecer y que este Gobierno es pasajero», insistió.
Las autoridades bolivianas han rechazado las acusaciones de persecución política y han tildado de «injerencia» el que la Organización de Estados Americanos (OEA) haya enviado a un observador a la audiencia de hace dos semanas.
Doria Medina señaló que «quien nada malo tiene, nada teme», por lo que opinó que el Ejecutivo boliviano «no debería temer que haya observadores» de organismos de los que el país es parte y que «han sido creados para vigilar el cumplimiento de los derechos humanos».
Ratificó que a la audiencia de hoy asistirá un representante de la OEA y también de otros organismos internacionales que no precisó. (17-11-2016)