Silvia Lazarte: ‘Hice campaña internacional en favor de la Constitución’
Dirigente sindical del Trópico de Cochabamba fue elegida, por el Movimiento Al Socialismo (MAS), como Constituyente en 2016. De ese modo, ejerció la presidencia de la institución que trabajó en la redacción de la nueva Carta Magna. La Constitución cumple ocho años de vigencia este martes y La Razón conversó con Lazarte, quien se siente orgullosa de haber dirigido la Constitución. Hoy está retirada de la política para cuidar de su salud.
Fue promulgada en El Alto por el presidente Evo Morales luego de tres años de debate y una crisis política que fue resuelta en el escenario legislativo. La actual Constitución Política del Estado (CPE), vigente desde el 7 de febrero de 2009, fue redactada por la Asamblea Constituyente que presidió la dirigente campesina Silvia Lazarte.
Ella le contó a La Razón que luego de la promulgación del documento se convirtió en “una embajadora” para presentar la nueva carta fundamental del país a la comunidad internacional. También reveló que estuvo muy enferma y que tuvo que ser enviada a Cuba para recibir tratamiento médico, cuando el MAS estaba en la campaña para validar la Constitución a través de referéndum.
— ¿Cómo aceptó ser la presidenta de la Constituyente?
— Desde La Paz han decidido y mandaron una comisión para que yo sea presidenta y yo dije no. Si estaban peleando los hombres, por qué no hacen presidente a los hombres, porque esta tarea es dura, expliqué. Yo sabía que era grave cambiar la Constitución, yo dije me están mandando a mí para que me maten y con esto me quieren matar, dije. Me informaron que yo nomás tengo que cambiar Bolivia. En ninguna parte de Bolivia tenemos gente de confianza, ni hombres, ni mujeres, ese era el argumento para la tarea.
— ¿Qué recuerda de su presidencia y qué dificultades tropezó la Constituyente?
— Cuando sesionábamos en el Liceo Militar de Sucre (noviembre de 2007) pretendieron quemarnos (quienes estaban en contra del trabajo de la Constituyente). Fuimos secuestrados en el mismo lugar y al final me echaron llave. Casi nos queman en el Liceo y no había cómo defenderse. Los llamados calanchos nos pegaron.
— Tras estos problemas se trasladó el tratamiento de la Carta Magna a Oruro. ¿Por qué se eligió esta ciudad y no otra?
— Nosotros (el directorio) nos reunimos y para mantener la unidad de la Asamblea Constituyente aceptamos Oruro y eso era concertado. Fue propuesto por uno de los secretarios, Ángel Villacorta, quien consultaba con Samuel Doria Medina (asambleísta), entonces, cada cual consultaba sus bancadas. También se propuso Chapare, de dónde yo que he salido líder. A mi me hubiese gustado y a título de presidenta yo quise llevar al Chapare; mi decisión era irme directo al Chapare.
— Todo este proceso le ocasionó problemas en su salud. ¿Qué tipo de males padeció durante este largo proceso?
— Tuve un golpe duro, un maltrato físico en anteriores gobiernos. En 2002, en Sacaba (Cochabamba) me habían pegado en la parte del pulmón, en la parte del diafragma. Mi corazón a un lado, mi pulmón también; tenía sangre coagulada y no me hice curar porque no tenía dinero. En la Asamblea Constituyente cuando fui a La Paz ya me afectó la altura, tenía tos seca, a dos meses de ser presidenta me llevaron al médico y me dijeron que necesito marcapaso.
— ¿Fue operada por esos problemas de salud?
— No. Los médicos cubanos me atendieron y me dijeron que vaya a Cuba para recibir tratamiento, pero como seguíamos tratando la ley, no quise y me curé con la hoja de coca. Tomé mate de coca; así he acabado el tratamiento de la Constitución Política del Estado.