Censo y avances del Estado Plurinacional
Imagen: INE
Martha Oviedo durante la conferencia de prensa
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Cifras y apuntes a la espera de los resultados del ejercicio censal que se realizó recientemente en el país.
Dibujo Libre
El 23 de marzo se realizó el tan esperado día del empadronamiento del Censo de Población y Vivienda 2024. Este artículo analiza, extrapola y conjetura los posibles resultados que se observarán luego de las labores censales y la publicación de datos oficiales a partir de las encuestas de hogares de 2011 y 2021, los censos anteriores y otros registros administrados con el objetivo de evaluar algunos avances en la construcción del Estado Plurinacional de Bolivia.
Según el conteo del número de habitantes se confirmará que la población boliviana superó -hace un par de años- los 12 millones de habitantes. Todos los departamentos reportarán un mayor número de habitantes empero, a excepción de Pando, el resto de departamentos alcanzará un menor ritmo de crecimiento poblacional que Santa Cruz. Santa Cruz habrá desplazado a La Paz como el departamento con mayor población boliviana respecto al último censo de 2012.
Estado
Sin embargo, Santa Cruz está lejos de alcanzar los 4 millones de habitantes que estimó el departamento de estadísticas de su gobernación. Para que ello ocurra, tendría que haber crecido a razón de 4% anual los últimos 12 años. En cambio, si tomando en cuenta el crecimiento cruceño entre los dos últimos censos -de 2001 y 2012- que fue de 2,2% y la tendencia nacional e internacional de moderación del ritmo poblacional, lo más seguro es que el crecimiento promedio anual en este último periodo se encuentre a la mitad (2%).
Pero más allá de número de ciudadanos, existen otros datos importantes que deben ser analizados. El censo confirmará la aceleración de la transición demográfica en el país. Entre 2011 y 2021, la población niña, niño adolescente se ha reducido del 33,6% a 29,3%, principalmente en el área rural (de 38,6% a 31,5%). En cambio, la población adulta mayor se incrementó de 8,7% a 11,2% con mayor incidencia en el campo de 10,6% a 15,2%. Para 2024, los nietos duplican a sus abuelos en el campo mientras que en las ciudades son cuatro veces más números aún, confirmando la tendencia mundial de encogimiento del extremo inferior y ensanchamiento de la base superior de la pirámide poblacional. El envejecimiento poblacional tendrá consecuencias fiscales en los presupuestos públicos.
Censo
Bolivia continuará siendo una de las poblaciones más jóvenes del continente. La edad media de los bolivianos se incrementará aproximadamente de 27 a 30 años, aunque la mitad de la población aún poseerá menos de 27 años, lo que sugiere que Bolivia todavía puede explotar -si así se lo propone- su bono demográfico que es la proporción relativa de jóvenes y adultos en edad de trabajar respecto de la población dependiente que está formada por niños y adultos mayores.
El fenómeno migratorio campociudad y occidente-oriente, que comenzó en los años 50, continuó en la segunda década del siglo XXI. Se advierte que los municipios que más crecieron en el país provienen de los departamentos de Pando, Beni y Santa Cruz y Cochabamba. En cambio, se advierte una posible disminución poblacional en algunos municipios de los departamentos de Oruro, Potosí e incluso La Paz y Cochabamba. Las ciudades capitales de cobija, trinidad, Santa Cruz de la Sierra, Cochabamba, Tarija y Oruro y algunas ciudades intermedias como Cotoca, Quillacollo, La Guarida, Villamontes por mencionar algunas, podrían ser las mayores receptoras de la migración interna proveniente de los municipios más pequeños y medianos.
Datos del Censo
La recomposición de la estructura poblacional, implicará una redistribución de recursos cada vez más desigual, en términos absolutos, aunque en relación a la población parezca justa. Los municipios más pequeños recibirán menos coparticipación tributaria nominalmente en favor de los municipios más grandes. Tomando en cuenta que los municipios más grandes son lo que también más han diversificado sus ingresos fiscales, la nueva redistribución de ingresos conducirá potencialmente a una mayor concentración de los ingresos fiscales en áreas urbanas y un posible bajo gasto público subnacional en áreas rurales, sino se hace nada al respecto.
Con seguridad el déficit habitacional en Bolivia se ha reducido. En la última década se han otorgado más de 100.000 Créditos de Vivienda de Interés Social que han beneficiado a cerca de medio millón de bolivianos. Las mejoras en las condiciones de habitabilidad de la población estaban previstas en el artículo 19 de la Constitución Política del Estado (CPE).
Según la encuesta de hogares, en 2021 el 80,8% de las personas declararon estar registradas o afiliadas a algún seguro de salud público. En cambio, en 2011 sólo el 38% de la población tenía acceso al sistema de salud. La implementación del Sistema Único de Salud forma parte de la política de universalización de la salud incorporada en el art.18 de la CPE. Empero, se advierten todavía diferencias importantes en el área urbana donde el porcentaje de cobertura llegó 90,2%, en cambio en el campo se sitúa en 76,9%.
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En 2021, el 93% de las mujeres en edad fértil señaló que su parto fue atendido en algún establecimiento de salud frente al 81% en 2011. El sostén financiero al seguro materno infantil y la implementación del bono Juana Azurduy de Padilla desde 2009 fueron esenciales para este logro. Sin embargo, aún existen diferencias importantes en área urbana 97,7% y el área rural 83,5%. Por otro lado, la tasa de deserción escolar bajó de 5,59% en 2011 a 1,46% en 2021, gracias al Bono Juancito Pinto. Esta tendencia se esperaría se mantenga en los ciclos de primaria y secundaria con un mayor número de bachilleres y titulados, aunque con marcadas diferencias nuevamente en el área rural y la ciudad.
La población boliviana también mejoró su acceso a las tecnologías de información. En 2012, el 60% de la población tenía acceso a un celular y 30% al internet. Para 2021 se incrementaron a 75% y 67% respectivamente. Una parte importante de este avance lo dio Entel ampliando su cobertura principalmente en el área rural.
Estas cuantas cifras son un pequeño esbozo de lo que el Censo de Población y Vivienda podría informar a los hacedores de política pública sobre las brechas aún existentes en el país y las demandas insatisfechas de la población. Pero, por otro lado, podrán constatar los avances vinculados. La construcción del Estado Plurinacional de Bolivia ha permitido mejoras en materia de salud y educación, habitabilidad, acceso a servicios básicos, tecnologías de información y otros ámbitos del desarrollo humano que el Censo 2024 deberá reflejarlos.
(*)Omar Velasco Portillo es economista