Del Castillo denuncia la quema en Santa Cruz de una clínica dental del gobernador de Beni
La Unidad de Bomberos llegó hasta el lugar del hecho, pero se encontraron con el 70% de la infraestructura ya consumida por las llamas.
El ingreso de la clínica dental quemada en Santa Cruz.
Imagen: RRSS
El ministro de Gobierno, Eduardo del Castillo, denunció la quema de una clínica dental en Santa Cruz que pertenece al gobernador del departamento de Beni, Alejandro Unzueta.
El hecho, según una publicación en la cuenta de Facebook de la autoridad, ocurrió cerca de las 22.10 del martes, cuando “grupos radicalizados e irregulares atacaron el hospital dental”.
“El hospital dental «Orest» en #SantaCruz de propiedad del gobernador de #Beni, Alejandro Unzueta, el cual fue dañado un 70%.”, escribió la autoridad.
En la misma publicación, del Castillo informó que los miembros de la Unidad de Bomberos llegaron al lugar y lograron apagar el fuego.
“Lamentamos el suceso, y le manifestamos nuestra solidaridad al gobernador beniano”, agregó.
Asimismo, el titular de esa cartera señaló que “la Policía Boliviana y su cuerpo de bomberos, están en apronte ante este tipo de acciones irracionales impulsadas por grupos irregulares”.
Ese ataque ocurre en medio de protestas que exigen la liberación del gobernador cruceño, Luis Fernando Camacho.
La autoridad departamental cumple con una detención preventiva dictada por el juez Sergio Pacheco, en el penal de Chonchocoro, en La Paz.
Movilizaciones en Santa Cruz
Las movilizaciones de los seguidores de Camacho comenzaron inmediatamente luego de su aprehensión, el pasado 28 de diciembre, en medio de un gran operativo policial.
Horas más tarde de ese hecho, otro grupo de movilizados por la misma causa, tomó y quemó la estación policial ubicada en Pampa de la Isla, en la capital cruceña.
Las movilizaciones derivaron en enfrentamientos con la Policía.
Los movilizados atacaron a los efectivos con petardos y otro tipo de fuegos artificiales, y los uniformados contestaron con gases lacrimógenos y, según reportes, con balines.
La Policía, incluso, tuvo que evitar la toma de su Comando Departamental en al menos dos ocasiones.
La intensa gasificación por partes de los efectivos alcanzó a vecinos que nada tenían que ver en el problema.
Aunque los movilizados también generaron destrozos a propiedades privadas y públicas.
En medio de esos hechos, al menos cuatro vehículos resultaron quemados y varias viviendas terminaron con daños, como la rotura de vidrios, el robo de rejas, entre otros.
Existen al menos 30 personas arrestadas que fueron puestas a disposición de las autoridades judiciales; algunas ya cuentan con medidas cautelares.
Mientras, se anunció desde la Policía que también se investigará el uso excesivo de la fuerza por parte de sus miembros.