Los casos de tumor en la retina preocupan a Salud
El ministerio apoyará la edificación de un pabellón e instalación de un laboratorio
Los casos de retinoblastoma o cáncer que nace en la retina de uno o ambos ojos preocupan al Ministerio de Salud y a una experta en Oncología, ya que en Bolivia es la tercera forma más común de este mal, mientras que a nivel mundial no es muy común.
“Entre las variedades de cáncer que más nos preocupa y nos llama la atención está la retinoblastoma , por lo que esto nos obliga a que realicemos un estudio y determinemos cuál es la razón para tener tal incidencia en Bolivia cuando es muy poco recurrente en el mundo”, indicó la coordinadora de la unidad de Riesgo Nacional de Cáncer del Ministerio de Salud, Sdenka Mauri.
La jefa de la Unidad de Oncología del Hospital del Niño de La Paz, Astrid Riveros, coincidió con Mauri al respecto y especificó que al ser tan elevada la frecuencia de casos, se tiene previsto la implementación de un laboratorio especializado para hacer estudios.
“Con el laboratorio genético haremos estudios a los pacientes para determinar si nosotros (bolivianos) llevamos o portamos genes que predisponen a la retinoblastoma”, dijo Riveros.
Mauri anunció que en el Hospital del Niño se construirá un nuevo pabellón de Oncología de tres pisos, en el último estará instalado el laboratorio. Está previsto que la obra concluya en tres años, pues el desembolso de los recursos para la edificación del ambiente se realizará hasta el primer semestre de 2013, cuando ya se contará con todos los planos aprobados.
El peligro de que se expanda
Los niños con retinoblastoma hereditario, además de ser afectados en uno o ambos ojos, pueden correr el riesgo de de-sarrollar un tumor cerebral en el tratamiento. A éste se lo llama retinoblastoma trilateral.
Faltan espacios en Oncología
El Ministerio de Salud reconoció que los tres servicios de Oncología infantil que existen en el país son insuficientes para atender a los pacientes que demandan este servicio. “El promedio de enfermos que acude a un hospital por semana es de dos, considerando que tenemos tres centros de referencia nacional, serían seis los niños que no pueden acceder a los centros de salud (por falta de espacio) a pesar de los esfuerzos que hacen los hospitales, voluntarios y el Ministerio de Salud”, manifestó la coordinadora de Riesgo Nacional de Cáncer, Sdenka Mauri.
Precisó que en 2011 el Oncológico del Oriente, de Santa Cruz, atendió a 62 pacientes; el Manuel Ascencio Villarroel, de Cochabamba, a 21; y el Hospital del Niño, de La Paz, a 56; pero en lo que va de esta gestión el nosocomio paceño agregó a 17 nuevos niños con diferentes tipos de cáncer.
“De 2006 al segundo semestre de 2012 se atendieron en La Paz a 287 niños con leucemia, pero la tendencia es creciente porque en 2009 se atendió a 40 y en 2010 a 51”, indicó. En febrero de este año, especialistas del Hospital del Niño informaron que el 75% de pacientes con cáncer no recibe atención oportuna por falta de información sobre la enfermedad y centros especializados.
Judeh lleva tres años al servicio de los pacientes
El ingreso de Judeh Saba a la sala de Hemato-Oncología del hospital del Niño de La Paz no pasa desapercibido para los pequeños pacientes, quienes lo llaman “hermano” o simplemente por su nombre. Su sola presencia arranca sonrisas de los niños.
“Estoy de voluntario hace tres años y es por un llamado de Dios. Si bien es algo difícil de explicarlo, puedo decir que estoy aquí para alegrar a los niños, tranquilizar a los papás, coordinar con las organizaciones para canalizar la ayuda a los pacientes y que todos reciban un tratamiento adecuado, con calidad y calidez”, manifestó.
Su labor se concentra en apoyar a los niños con cáncer, todos los médicos, enfermeras y auxiliares del área lo conocen porque trabajan juntos para prolongar la vida de los niños o hacer que su partida no sea dolorosa.
Son varias las organizaciones que apoyan a la unidad de Oncología y Saba también es voluntario de la Fundación San Luis. “Somos 60 personas y estamos divididas en comisiones, unos buscan trasplantes gratuitos de médula en el extranjero, otros evitan las deserciones de tratamientos. El éxito está en que es un trabajo de equipo que empieza con médicos, enfermeras, trabajadores del hospital y acaba con los voluntarios”.