Sociedad

Monday 29 Apr 2024 | Actualizado a 07:28 AM

La UPEA impulsa cuatro procesos penales contra exautoridades

La Universidad Pública de El Alto (UPEA) impulsa cuatro procesos penales en contra de exautoridades por hechos de corrupción. El más reciente involucra al exadministrador financiero de esa casa de estudios superiores, Gualberto Tiñini Calle.

/ 3 de septiembre de 2012 / 05:02

Esta exautoridad fue sorprendida el miércoles 22 de agosto en su oficina, cuando aún era titular de ese despacho, en el momento en que recibía 17 mil bolivianos de parte de personeros de la empresa Lesu. El dinero era una recompensa de la compañía por haber sido favorecida con un contrato de dotación de material de laboratorio para la universidad alteña.

La detección in fraganti de este acto fue realizada por el Ministerio de Transparencia Institucional y Lucha Contra la Corrupción y la Fuerza Especial de Lucha Contra el Crimen (FELCC), que desplegó personal para atrapar a la exautoridad.

El director jurídico de la UPEA, Jorge García Pinto, señaló a La Razón que este caso se encuentra en etapa preparatoria del proceso penal y que los otros tres juicios por la vía ordinaria están a la espera de un sorteo que defina el inicio del procesamiento.

“La universidad no va a dejar impune ningún acto que vaya en contra de su institucionalidad, de su imagen y de los recursos que son para mejorar la pedagogía de los estudiantes”.

El primero de los cuatro casos en ser presentado ante la Justicia es contra Rafael Flores, que en 2003 fungía como director administrativo financiero. Entonces, se descubrió que no contaba con ningún título que lo acredite como profesional del área, pese a que había declarado ser egresado de la Universidad San Francisco Xavier de Chuquisaca.

“En la revisión de documentos que hicimos, éste no figuraba ni como economista, menos como auditor, y lo peor de todo es que la universidad no contaba con sus antecedentes de que haya realizado algún curso”, explicó García.

Ahora, Flores espera la finalización de un juicio por falsedad material iniciado por la UPEA.

Procesos. En 2011 se presentaron otros dos casos, que también se encuentran en etapa de sorteo para determinar la fecha y hora del juicio oral.Uno de ellos es contra el exjefe de títulos y diplomas William Soria Galvarro, de quien se descubrió que solicitaba dinero para la emisión y llenado de los títulos, cuando éstos debían entregarse a los estudiantes de manera gratuita.

También, el exdirector jurídico Pavel Vera fue acusado por las autoridades de uso indebido de influencias, incumplimiento de deberes y patrocinio infiel a la institución.

El ex funcionario fue sujeto de un proceso administrativo, junto con un grupo de trabajadores; además, era defendido por su propia esposa. “Él nunca se excusó ni mencionó que su cónyuge los patrocinaba ante la ley”, añadió el director García.

El último caso se trata del exdirector administrativo financiero Gualberto Tiñini, quien fue acusado por uso indebido de influencias, cohecho activo, enriquecimiento ilícito y beneficios en razón del cargo, tras ser sorprendido en flagrancia en las mismas instalaciones de la UPEA.

El juez que procesa el caso determinó la detención domiciliaria de Tiñini, quien además deberá presentar cuatro garantes para evitar una fuga.
Los casos han despertado preocupación en los estudiantes.

Desmienten denuncias de acoso

Según el Sindicato de Trabajadores Administrativos de la UPEA), hubo un caso de acoso laboral por parte del director de Auditoría Interna (JD), quien fue denunciado por las secretarias de carreras, el contador y varios de sus subalternos. El ejecutivo envió una nota al sindicado, al rector Dámaso Quispe y el secretario general, Anastasio Huanca, en la que  pidió una aclaración por parte del director de esta unidad y una intervención del Rector, pero éste descalificó la acusación.

Las juntas vecinales ceden terrenos a la universidad alteña

Miguel Rivas

La Universidad Pública de El Alto (UPEA) consiguió terrenos e infraestructura para instalarse de los vecinos de varios sectores del departamento de La Paz en el área urbana y rural.

Según el rector de esta casa superior de estudios, Dámaso Quispe, la universidad sólo compró un edificio en la zona Tejada Triangular a un precio de 8,5 millones de bolivianos. “Es una extensión de 2.800 metros cuadrados. Aquí no podemos malversar fondos, todo está abierto a la investigación y comprobación”.

“Los otros predios que se ha logrado, gracias al apoyo de las comunidades y vecinos, están ubicadas en Alto Chijini, Guaqui, Ancoraimes, Chayaguaya, Cruz Loma, 50 hectáreas en Alto San Antonio, Cajuata, Camata”, agregó. Además de Villa Ingenio, Achacachi, Callucata, Viacha y Achocalla, que está por consolidarse.

El edificio emblemático es el último logro de esta entidad, con una inversión de 23.505.911 bolivianos financiados por el Gobierno a través del programa Bolivia cambia, Evo cumple. Su ejecución demoró cuatro años y fue entregado parcialmente en julio de 2012. Falta la construcción del paraninfo detrás de este inmueble, butacas, obra gruesa y fina. Esperamos la buena voluntad del presidente Morales, indicó el rector.

La UPEA también tiene predios que están a la espera de que sean saneados por los mismos vecinos, es el caso de la zona Alto de la Alianza, donde se cedió una extensión de 5.000 metros para la Facultad de Ingeniería.

“Lamentablemente aparecieron supuestos dueños reclamando el derecho propietario”, dijo.

Quispe aseguró que se buscará financiamiento para construir edificios en esos terrenos.

En 12 años, la UPEA graduó a 1.500 estudiantes

Miguel Rivas

En 12 años de vida institucional, la Universidad Pública de El Alto (UPEA) lanzó al mercado laboral 1.500 estudiantes que se graduaron de 22 carreras. A fines de agosto, 100 alumnos obtuvieron su diploma profesional, informó el rector de esta institución educativa, Dámaso Quispe.

Esta casa superior de estudios extendió, además, 600 títulos de posgrado. “Esto demuestra que la universidad está mejorando cada día, ya que antes no se escuchaba de producción intelectual”, resaltó Quispe.

Estos avances, según el Rector, han mejorado la imagen de la universidad alteña, que en sus inicios enfrentó gran inestabilidad debido a pugnas internas que derivaron en cambios de autoridades, marchas, toma de la universidad por los estudiantes, entre otros.

Ahora, dijo, más población se anima a inscribirse aquí debido a la estabilidad. Hace cinco años, esta universidad tenía 16 mil alumnos, pero ahora tiene 27 mil, que reciben instrucción de 1.500 docentes distribuidos en 35 carreras universitarias.

La UPEA destinó 3 millones de bolivianos a apoyar la producción intelectual, con lo que se editaron 17 libros y para septiembre se tiene prevista la publicación de 15 libros resultado de ese número de investigaciones académicas.

Pedagogía. El secretario ejecutivo de la Federación Universitaria de Docentes, Felipe Paucara, considera que la universidad alteña necesita una mejora en su infraestructura en un 50 por ciento de sus edificios para elevar el rendimiento académico.

Además, dijo que hay que aumentar el número de aulas debido al crecimiento poblacional de la ciudad, especialmente por la migración de los jóvenes bachilleres.

Aunque no precisó la cantidad de libros que existen en la universidad, informó que se pretende conseguir un mayor número para diferentes carreras y distribuirlos en las bibliotecas facultativas. Destacó la incorporación de 17 pizarras interactivas en la carrera de Ciencias de la Educación. “Desde un punto de vista crítico, esta carrera tendrá una ventaja sobre las otras y los resultados se esperan que sean a corto o mediano plazo en la formación”.

La autoridad educativa dice que su despacho impulsa un proyecto para dotarse de herramientas para la investigación académica.

Aumenta la oferta académica

Currículo

Las nuevas carreras de la UPEA son Ingeniería Textil, Ambiental, Eléctrica, Autotrónica, Física y Energías Alternativas, Artes Plásticas, Ciencias Políticas, Educación Parvularia, Gestión Turística y Hotelera, Comercio Internacional, Nutrición y Dietética, Zootecnia e Industria Pecuaria y Psicología. Éstas, sumadas a las primeras 22 carreras de la Universidad Pública de El Alto (UPEA), hacen un total de 35.

Comparte y opina:

El boleto inteligente abarata el transbordo en el teleférico

El ticket no debe ser mojado, estrujado, doblado o raspado, ya que el dispositivo no reconocerá el código de respuesta rápida y el pasajero no podrá recuperar la suma invertida.

/ 12 de junio de 2018 / 14:49

Mi Teleférico lanzó ayer el Boleto Inteligente (BI), que permite a sus usuarios que no tienen tarjeta beneficiarse también con la rebaja por el uso de más de una línea. El ticket tiene un código QR (respuesta rápida) que registra las interconexiones pagadas.

El BI tiene validez de un día y el o los pasajeros no podrán superar un tiempo de transbordo “x”, que no está establecido. El código QR será reconocido por el lector de los molinetes.

El usuario debe informar sobre su destino y la cantidad de personas al llegar a las cajas. El vendedor calcula cuánto tiene que abonar y le entrega la factura y el BI.

En cada transbordo, el pasajero tiene que acercar el código QR al lector del molinete; una vez que llegue a su destino, el boleto ya no tendrá validez, explicó César Dockweiler, gerente general de la empresa Estatal de Transporte por Cable Mi Teleférico,

El ticket no debe ser mojado, estrujado, doblado o raspado, ya que el dispositivo no reconocerá el código de respuesta rápida y el pasajero no podrá recuperar la suma invertida.

Por un recorrido en la primera línea pagará Bs 3 y Bs 2 en cada transbordo. Hasta antes de ayer accedían a este descuento solo los usuarios que utilizan tarjeta y que ascendían a fines de febrero a 600.000. “Si una persona quiere ir de Irpavi (Macrodistrito Sur de La Paz) a Río Seco en El Alto usará las líneas Verde, Celeste, Blanca, Naranja, Roja y Azul, solo el primer pase (trazo Verde) le costará Bs 3; por cada interconexión con las otras cinco será de Bs 2”, explicó el directivo.

Todo el trayecto le costará solamente Bs 13; antes hubiera tenido que abonar Bs 18.

Dockweiler aclaró que el pasaje tiene que ser usado en el día  —no se lo puede guardar para otra jornada—, y en un tiempo determinado, por lo que la misma persona que va a Río Seco, por ejemplo, no podrá hacer una escala para ir a comprar a la Uyustus y retomar su viaje en la Línea Roja.

“Si alguien va en familia, puede solicitar este boleto e informar la cantidad de personas que usarán el servicio y el destino al que pretenden llegar”, recalcó.

Para evitar errores y difundir las ventajas de adquirir el BI y la forma de usarlo, brigadas de 26 jóvenes se desplazarán por las estaciones de las diferentes líneas.

Indicaciones

  1. Caja. En caja deberá indicar. El destino al que quiere llegar y si viaja solo o la cantidad de personas que lo acompañan.
  2. Corrido. No puede desviarse, hay un tiempo limitado de viaje hasta llegar a su destino final y   el BI no es válido pasado ese tiempo.
  3. Excepción. En casos en los que haya largas filas, el tiempo de llegada se extenderá automáticamente.

Comparte y opina:

El boleto inteligente abarata el transbordo en el teleférico

El ticket no debe ser mojado, estrujado, doblado o raspado, ya que el dispositivo no reconocerá el código de respuesta rápida y el pasajero no podrá recuperar la suma invertida.

/ 12 de junio de 2018 / 14:49

Mi Teleférico lanzó ayer el Boleto Inteligente (BI), que permite a sus usuarios que no tienen tarjeta beneficiarse también con la rebaja por el uso de más de una línea. El ticket tiene un código QR (respuesta rápida) que registra las interconexiones pagadas.

El BI tiene validez de un día y el o los pasajeros no podrán superar un tiempo de transbordo “x”, que no está establecido. El código QR será reconocido por el lector de los molinetes.

El usuario debe informar sobre su destino y la cantidad de personas al llegar a las cajas. El vendedor calcula cuánto tiene que abonar y le entrega la factura y el BI.

En cada transbordo, el pasajero tiene que acercar el código QR al lector del molinete; una vez que llegue a su destino, el boleto ya no tendrá validez, explicó César Dockweiler, gerente general de la empresa Estatal de Transporte por Cable Mi Teleférico,

El ticket no debe ser mojado, estrujado, doblado o raspado, ya que el dispositivo no reconocerá el código de respuesta rápida y el pasajero no podrá recuperar la suma invertida.

Por un recorrido en la primera línea pagará Bs 3 y Bs 2 en cada transbordo. Hasta antes de ayer accedían a este descuento solo los usuarios que utilizan tarjeta y que ascendían a fines de febrero a 600.000. “Si una persona quiere ir de Irpavi (Macrodistrito Sur de La Paz) a Río Seco en El Alto usará las líneas Verde, Celeste, Blanca, Naranja, Roja y Azul, solo el primer pase (trazo Verde) le costará Bs 3; por cada interconexión con las otras cinco será de Bs 2”, explicó el directivo.

Todo el trayecto le costará solamente Bs 13; antes hubiera tenido que abonar Bs 18.

Dockweiler aclaró que el pasaje tiene que ser usado en el día  —no se lo puede guardar para otra jornada—, y en un tiempo determinado, por lo que la misma persona que va a Río Seco, por ejemplo, no podrá hacer una escala para ir a comprar a la Uyustus y retomar su viaje en la Línea Roja.

“Si alguien va en familia, puede solicitar este boleto e informar la cantidad de personas que usarán el servicio y el destino al que pretenden llegar”, recalcó.

Para evitar errores y difundir las ventajas de adquirir el BI y la forma de usarlo, brigadas de 26 jóvenes se desplazarán por las estaciones de las diferentes líneas.

Indicaciones

  1. Caja. En caja deberá indicar. El destino al que quiere llegar y si viaja solo o la cantidad de personas que lo acompañan.
  2. Corrido. No puede desviarse, hay un tiempo limitado de viaje hasta llegar a su destino final y   el BI no es válido pasado ese tiempo.
  3. Excepción. En casos en los que haya largas filas, el tiempo de llegada se extenderá automáticamente.

Comparte y opina:

Heridas que no sanan; violaciones en el hogar

La mejor forma de prevenir es la información y comunicación. “Pero es difícil tomar algún recaudo del entorno, ¿dónde uno se siente más seguro?, es en la familia, con los padres”, sostuvo Núñez.

/ 10 de junio de 2018 / 19:42

De enero a fines de mayo, 271 menores de edad fueron víctimas de violación, dentro y fuera del hogar en Bolivia, según la Policía; en al menos 15 casos, madres o abuelas fueron cómplices o encubridoras, y al menos en tres, participaron de los vejámenes.

¿Qué pasa en la cabeza de estas mujeres? y ¿qué mecanismos de prevención deberían activarse en estos casos? Estas dos preguntas fueron planteadas a las psicólogas María Inés Villanueva y María Teresa Núñez, y al director nacional de la Fuerza Especial de Lucha Contra la Violencia (FELCV), coronel Erick Millares.

Una mujer se convierte en cómplice, coincidieron los expertos, por varios factores: miedo, dependencia emocional y económica del agresor, el ejercicio de la violencia y amenazas o una desviación por motivos que deben ser estudiados (madres que formaron “tríos” , por ejemplo).

Según Villanueva, las madres saben que el agresor es violento, lo que les genera miedo, creen que su pareja nunca haría algo así o temen las consecuencias sociales y familiares, el rechazo y repudio a ella y a toda su familia.

Otro aspecto es que la mujer considera a su hija como una rival. “Cree, que ella es la amante de su pareja, y hace de cuenta que no pasó nada, en el fondo es un conflicto emocional interno y perverso”, sostuvo Villanueva.

Núñez apuntó que hay mujeres que vienen de familias violentas, donde pudieron ser víctimas del mismo delito o de otro tipo de maltrato por sus hermanos, tíos, padres e incluso su misma progenitora. “Hay mujeres que salen a trabajar, piden al padre, a los hermanos mayores, a los primos o tíos de la víctima que ayude a cuidarlos y ocurre lo peor”.

Encuentre la información completa en la edición impresa de La Razón. (10/06/2018)

Comparte y opina:

Heridas que no sanan; violaciones en el hogar

La mejor forma de prevenir es la información y comunicación. “Pero es difícil tomar algún recaudo del entorno, ¿dónde uno se siente más seguro?, es en la familia, con los padres”, sostuvo Núñez.

/ 10 de junio de 2018 / 19:42

De enero a fines de mayo, 271 menores de edad fueron víctimas de violación, dentro y fuera del hogar en Bolivia, según la Policía; en al menos 15 casos, madres o abuelas fueron cómplices o encubridoras, y al menos en tres, participaron de los vejámenes.

¿Qué pasa en la cabeza de estas mujeres? y ¿qué mecanismos de prevención deberían activarse en estos casos? Estas dos preguntas fueron planteadas a las psicólogas María Inés Villanueva y María Teresa Núñez, y al director nacional de la Fuerza Especial de Lucha Contra la Violencia (FELCV), coronel Erick Millares.

Una mujer se convierte en cómplice, coincidieron los expertos, por varios factores: miedo, dependencia emocional y económica del agresor, el ejercicio de la violencia y amenazas o una desviación por motivos que deben ser estudiados (madres que formaron “tríos” , por ejemplo).

Según Villanueva, las madres saben que el agresor es violento, lo que les genera miedo, creen que su pareja nunca haría algo así o temen las consecuencias sociales y familiares, el rechazo y repudio a ella y a toda su familia.

Otro aspecto es que la mujer considera a su hija como una rival. “Cree, que ella es la amante de su pareja, y hace de cuenta que no pasó nada, en el fondo es un conflicto emocional interno y perverso”, sostuvo Villanueva.

Núñez apuntó que hay mujeres que vienen de familias violentas, donde pudieron ser víctimas del mismo delito o de otro tipo de maltrato por sus hermanos, tíos, padres e incluso su misma progenitora. “Hay mujeres que salen a trabajar, piden al padre, a los hermanos mayores, a los primos o tíos de la víctima que ayude a cuidarlos y ocurre lo peor”.

Encuentre la información completa en la edición impresa de La Razón. (10/06/2018)

Comparte y opina:

Diálogo deja a mesa técnica ver viabilidad de modificar la Ley 195 para atender pedido de la UPEA

Los representantes del Gobierno, Legislativo y del Universidad Pública de El Alto (UPEA) sostuvieron este sábado un diálogo que fue declarado en cuarto intermedio hasta contar con el resultado del trabajo de la mesa técnica

/ 9 de junio de 2018 / 22:36

Fueron un poco más de siete horas ininterrumpidas de conversaciones entre autoridades del Gobierno, Legislativo y representantes de la Universidad Pública de El Alto (UPEA). Decidieron dejar a una comisión técnica el análisis de la viabilidad o no de modificar la Ley 195 de asignación de recursos de coparticipación tributaria, principal demanda de los universitarios.

La mesa técnica, que estará formada por personal del Ministerio de Economía y de la casa de estudios superiores, se reunirá a las 08.00 de este domingo. El presidente del Senado, José Alberto Gonzales, informó del acuerdo y que las conversaciones estuvieron centradas, justamente en garantizar las actividades académicas.

Instalaciones de la Vicepresidencia del Estado fueron escenario del encuentro acordado el viernes tras semanas de movilizaciones y piquetes de huelga de hambre. En una de esas movilizaciones, el 24 de mayo, perdió la vida el universitario Jonathan Quispe como resultado de un impacto de canica disparada, según la Fiscalía, por un uniformado parte del operativo de represión.

La principal demanda es modificar la Ley 195 para que se les asigne un mayor porcentaje de los recursos de coparticipación tributaria como una solución de fondo de tal manera de evitar que cada año deban iniciar protestas por un presupuestario extraordinario. El Gobierno, a diferencia del pasado, ahora expresó su disposición a discutir la viabilidad de la demanda.

“Hemos avanzado positivamente, estamos revisando el tema vinculado al presupuesto y lo que ellos piden es la modificación a la Ley 195, nosotros también ya les hemos dado nuestra postura. Nuestro desafío es garantizar los recursos a la UPEA para que pueda trabajar con absoluta normalidad”,  aseguró Gonzales en una conferencia de prensa.

Gonzales compareció ante los medios de comunicación con el rector de la UPEA, Ricardo Nogales, y el resto de delegados de la UPEA.

“Hubo un acercamiento entre el Gobierno y la UPEA, estamos analizando si se puede o no modificar la ley, y hemos ratificado las resoluciones de la asamblea Docente- estudiantil. Una vez que concluya la mesa técnica nos reuniremos para firmar los acuerdos”, explicó Nogales en las escalinatas de la Vicepresidente del Estado, donde se hizo la conferencia.

Hasta el jueves el Gobierno daba por descartada la modificación de los porcentajes de asignación definidos en Ley 195 por su complejidad y porque implicaría necesariamente restarle recursos a otros sectores. El rector de la Universidad Mayor de San Andrés (UMSA), Waldo Albarracín, expresó su desacuerdo con un posible ajuste en los porcentajes de redistribución.

Una vez que concluya el trabajo técnico, la comisión en pleno volverá a ser convocada para analizar el trabajo y de darse suscribir un acuerdo, en el que participaría el presidente Evo Morales de acuerdo al compromiso del Ejecutivo.

Comparte y opina: