Repatrian el cuerpo del niño asesinado en Brasil
Dolor. Los padres deciden quedarse en Bolivia
Los restos de Bryan Yanarico Capcha, repatriados de Sao Pablo, Brasil, llegaron anoche a El Alto, donde fueron recibidos por sus familiares. Los padres del menor anunciaron que no volverán a ese país por el dolor y la falta de seguridad.
El cajón que contenía el cuerpo sin vida del menor arribó a las 19.05, en el vuelo comercial 679 de la estatal BoA. Estaba acompañado de sus progenitores que fueron colaborados por la Cancillería de Bolivia para traer los restos.
En puertas del Aeropuerto Internacional de El Alto les esperaban los abuelos maternos y paternos, además de sus hermanos, todos con flores blancas y con lágrimas en los ojos, a la espera de poder tener en sus manos el ataúd del menor asesinado.
“Nosotros hemos decidido ya no volver a Brasil por la tragedia que sucedió con mi hijo, por los robos y asesinatos que se cometen. No podríamos estar más allá, queremos pedir ayuda, pedimos que haya trabajo para nosotros por favor, porque ya no queremos volver, es muy doloroso”, contó la decisión a La Razón, Edilberto Yanarico, padre del menor.
Impacto. El viernes anterior, cuatro sujetos armados ingresaron a un humilde domicilio del barrio Sao Mateus, donde diez personas vivían junto a la pareja de padres del menor asesinado. El asalto se produjo cuando un tío y un amigo del menor llegaban en su automóvil y fueron increpados por sujetos con pasamontañas. Les robaron al menos $us 2.000. Uno de los delincuentes disparó contra Bryan, que estaba en brazos de su madre, porque el niño no paraba de llorar.
La muerte del menor movilizó a la comunidad boliviana en Sao Paulo, que ayer en un número de 200 pasaron la noche con velas y carteles en las afueras de la comisaría que investiga el caso. Según los últimos informes, en Brasil ya fueron detenidos tres sujetos involucrados. Uno de ellos, de 17 años, habría confesado ser el autor del disparo fatal.
Anoche, los padres del menor, acompañados de sus familiares, ingresaron a las oficinas de la Aduana Nacional de Bolivia (ANB) para concluir con los trámites de desaduanización del féretro, que estaba embalado con cajas de cartón y envuelto en mantos blancos.
Cerca de las 20.30, el cuerpo de Bryan fue trasladado en un vehículo hasta Achacachi, al cantón Tacamara, donde hoy en la tarde será enterrado. Verónica Capcha, madre de Bryan, con lágrimas en los ojos contó lo mucho que le hace falta su hijo y pide justicia. “Era mi compañerito, siempre estaba hablando conmigo, tengo muchos recuerdos. Le gustaba jugar, hacer dibujos”, relató entre sollozos.