En Austria embalan piezas de las torres de las líneas Azul y Blanca
Teleférico. La empresa estatal de transporte por cable apoya a otros 3 municipios
A miles de kilómetros de La Paz, en Wolfurt, Austria, un grupo de los más de 1.000 empleados de la empresa Gassner trabaja en tres turnos para elaborar una a una las piezas de las torres de las líneas Azul y Blanca de la fase II del teleférico.
Cerca de la fábrica donde se construyen las torres, la planta de preensamblaje de Doppelmayr también trabaja a tiempo completo probando y embalando las partes en 600 contenedores que serán enviados a Bolivia para instalar esos dos nuevos ramales.
La primera línea tendrá 4,9 kilómetros (km) y será la más larga de todo el proyecto. Su trazo comienza en Río Seco y concluye en la estación 16 de Julio de la Línea Roja. La segunda, que empieza en la plaza Villarroel y concluye en la Estación del Libertador, en la Curva de Holguín.
El trabajo será intenso hasta 2019, cuando se entreguen las seis líneas de la segunda etapa del proyecto, y es probable que se extienda aún más, ya que se analiza la posibilidad de reproducir esta experiencia en otras tres capitales del país: Sucre, Potosí y Oruro. En Gassner el trabajo es de alta precisión; cada una de las piezas debe encajar en el lugar que fue definido por el diseño.
Nacional. “No hay dos iguales”, explica Mario Vacca Gámez, gerente de supervisión de la firma Alwa, quien se trasladó hasta Wolfurt con el gerente de la empresa estatal Mi Teleférico, César Dockweiler, y una comisión para inspeccionar el avance de obras.
Algunas piezas ya fueron enviadas a La Paz y otro importante cargamento será embarcado rumbo a Bolivia hasta diciembre. El directivo anuncia que el avance del ramal Azul es del 65% y el del Blanco del 35%. Se espera que entren en operación en 2017.
Luego, hasta 2018, se fabricarán las piezas e instalarán las líneas Naranja y Morada y, finalmente, la Café y la Celeste, con lo que concluirá la segunda fase de este proyecto, en la que se invierten $us 450 millones, 216 millones más de lo que costó la primera fase en la que se puso en marcha las líneas Roja, Amarilla y Verde.
Pero no todo se queda en La Paz. El Gobierno se ha fijado la meta de encontrar soluciones a los problemas de tráfico y vialidad en las nueve ciudades capitales y El Alto, por lo que se analiza repetir la primera experiencia del sistema de transporte por cable en tres capitales.
En Sucre se realizaron reuniones entre representantes de Mi Teleférico y autoridades de la Gobernación y la Alcaldía. “Hemos decidido trabajar de manera conjunta en un estudio de prefactibilidad para determinar la conveniencia”, cuenta Dockweiler, quien en estos días de visita a Austria sostuvo continuas reuniones con los representantes de Doppelmayr.
En estos encuentros estuvo presente el dueño de la compañía, Michael Doppelmayr, quien reconoció la importancia que tuvo para su empresa el haber trabajado con el Gobierno boliviano. En la ciudad de Potosí se realizaron reuniones con las autoridades ediles y de la Gobernación.
“Hemos establecido mesas de trabajo, un cronograma y pretendemos llegar a fin de año con estudios. Esto dependerá de la coordinación en los próximos días”, explica el directivo de la estatal. En Oruro, la Asociación Accidental Tele Cabina Poma-Oruro comenzó las obras del tramo II del teleférico que unirá por cable el cerro de la Virgen de la Candelaria con el Santuario del Socavón.
La asociación francocolombiana suscribió un contrato con la Gobernación para instalar ese ramal y realizar el estudio a diseño final de los otros tres tramos, destinados al transporte urbano. Dockweiler anticipó que lo que se estudia es la posibilidad de unir el proyecto turístico con uno de transporte urbano.
“No hemos tenido una reunión, pero tengo el mandato del Presidente (Evo Morales) de realizar un estudio que nos permita complementar el proyecto en ejecución, que es un proyecto turístico, para integrar con un sistema que tenga finalidad de transporte urbano. Esperamos una reunión para ver cómo podemos articular un trabajo conjunto”.