La tasa de recuperados de COVID-19 en el país alcanza a 52,9%, pero arrecian las muertes
“Santa Cruz tiene peso porque tiene el mayor volumen de casos, y, evidentemente, la curva se ha desacelerado y ha empezado probablemente una meseta”, dijo a La Razón Virgilio Prieto.
Al 1 de septiembre, con 117.267 casos confirmados de COVID-19, la tasa de recuperados es del 52,9% respecto del total (62.124). El dato genera optimismo, aunque tropieza con el número de fallecidos, 5.101, que es apenas del 4,3%.
De acuerdo con el reporte, Santa Cruz es el departamento con mayor número de pacientes, 40.638; luego están La Paz (31.039), Cochabamba (12.432), Tarija (8.269), Beni (6.639), Potosí (5.655), Chuquisaca (5.295), Oruro (4.968) y Pando (2.332).
El departamento de Santa Cruz también tiene el mayor número de recuperados, 32.431; le siguen La Paz con 11.202, Cochabamba con 8.368, Tarija con 3.852, Chuquisaca con 2.016, Oruro con 1.932, Beni con 1.084, Potosí con 902 y Pando con 337.
Y sobre fallecidos, Santa Cruz tiene 1.854. Más atrás están Cochabamba con 949, La Paz con 748, Chuquisaca con 400, Oruro con 266, Potosí con 199 y Pando con 147.
Respecto a la recuperación, Santa Cruz tiene la mayor tasa de recuperación, que alcanza a 79,2% respecto del total (40.638). A juzgar por el segundo número mayor de pacientes, La Paz solo tiene un 36% de recuperados respecto de su total (31.039). Y Cochabamba también tiene una importante tasa de recuperados, 67,3%.
“Santa Cruz tiene peso porque tiene el mayor volumen de casos, y, evidentemente, la curva se ha desacelerado y ha empezado probablemente una meseta”, dijo a La Razón el jefe nacional de Epidemiología del Ministerio de Salud, Virgilio Prieto.
El funcionario analizó con este medio de información estos ítems del ciclo de contagios del nuevo coronavirus en el país, los recuperados y los fallecidos.
Si bien en Santa Cruz es importante el número de recuperados, “la letalidad no está bajando al mismo ritmo. Incluso las autoridades de Santa Cruz dijeron que tienen camas libres en terapia intensiva y en centros de aislamiento”.
Prieto se pregunta ¿por qué ocurren tantos fallecimientos? “Es posible que la gente no esté acudiendo a los servicios y que esté automedicándose en casa, ésa es la razón por que haya más mortalidad”, se responde.
—De todas maneras, ¿los muertos, así en vida hayan estado convalecientes en casa, se registran en el Ministerio de Salud?
—Claro, porque se hace diagnóstico posmortem también. Por eso discrepamos mucho con aquella información malhadada del The New York Times que dijo que con cinco veces la mortalidad.
Donde hay un fallecimiento, se va y se toma la muestra y se comprueba si ha sido o no por coronavirus.
—¿Es proporcional a los casos la toma de muestras para tener un registro real de casos?
—Sí, Santa Cruz ha adquirido 30.000 pruebas, en general no hay falta de pruebas. Tenemos pruebas en todo el país.
—¿Es proporcional al número o faltan?
—En el momento ya no hay aquello de que “nos han faltado; se ha regularizado. Lo que pasa es que, de principio, estamos aprendiendo todos, para ser honestos. Por ejemplo, cuando enviamos las primeras muestras a Beni, por un paciente positivo tomábamos muestra a 35, diciendo que eran asintomáticos. Bajo ese sistema, qué va a aguantar (el número de pruebas).
Hemos aclarado las cosas sobre a quiénes se tiene que tomar y eso ha sido en todo el país. Actualmente, ya tenemos claras las cosas en todo lado.
Lamentablemente, hemos empezado tarde con esto; yo me he hecho cargo (de esta oficina) el 18 de abril, después de casi 15 o 20 años.
—¿Cuántas pruebas se hacen al día en todo el país?
—El momento que usted dice hemos llegado hasta más 2.000 y casi 3.000, pero cotidianamente desde un tiempo atrás se han hecho cuanto menos 1.000 pruebas al día.
—Sobre el reporte de recuperados, son ya más del 50%
—Ya ha sobrepasado la línea de casos activos (62.124 recuperados, 50.042 activos). Es otro elemento que nos induce a pensar que estamos nomás en una desescalada. Además, habla también de la eficiencia de los servicios en cuanto a diagnóstico y tratamiento.
Hasta hace poco teníamos pocos recuperados, pero estamos subiendo rápidamente, sobre todo con base en Santa Cruz y Cochabamba, que están teniendo gran número de recuperados.
—¿La tasa está en función de la media regional o hay que apretar más?
—Todavía, siquiera debemos llegar al 60%; estamos sobre 40%, hemos subido de 32%.
—¿Qué falta por hacer para no decaer en la desaceleración?
—Primero que nada pedirles a los periodistas, mencionar que este momento es más peligroso que la cuarentena rígida. Si no mantenemos las medidas de prevención y control, podemos volver a tener una frecuencia y una explosión de casos, que será difícil controlar, sobre todo la mortalidad.
Cuidado en todas las actividades que se han flexibilizado.
Por otra parte, vamos a hacer estudios de prevalencia, de mortalidad, para afinar el trabajo en adelante.
—¿Bajo qué parámetros se ha determinado el posconfinamiento?
—Bajo parámetros epidemiológicos, que damos nosotros, y parámetros socioeconómicos, que define el gabinete.
—¿Fue prudente, considerando que antes se dijo que en agosto y septiembre iban a ser los meses más críticos? Que por eso se han postergado también las elecciones.
—Todo momento es crítico si no cumplimos las medidas de prevención y control. Como preguntó, le digo que nosotros hemos dado el criterio epidemiológico y el social y económico el gabinete.
Creo también que no se puede mantener a la gente permanentemente en cuarentena. Si hubiera movimientos sociales, peor aún, contagios masivos.
—Sobre esto último, ya deberían estar manifestándose los contagios por las movilizaciones de agosto. Aparentemente no hay tal incremento.
—Eso me lleva a pensar por qué no hay mortalidad y no hay casos. Posiblemente no están denunciando los casos no acudiendo a los servicios.
(02/09/2020)