Acero boliviano
La Siderúrgica Acero SRL es un poderoso ejemplo de inversión privada nacional
Quien creyó que la industria siderúrgica boliviana estaba condenada mientras el proyecto del Mutún no produzca en las cantidades inicialmente esperadas, se equivoca. Un grupo de empresarios ha instalado en Oruro la primera planta laminadora de acero que, aunque trabaja con hierro importado, compite con precios menores a los del mercado internacional.
En efecto, un reciente reportaje de nuestro suplemento El Financiero permitió conocer este emprendimiento de cruceños y cochabambinos, quienes aseguran haber invertido más de $us 10 millones para comenzar a producir este imprescindible material de construcción, cuyo precio hasta ahora dependía tanto de las fluctuaciones del mercado internacional como de la situación económica en las naciones productoras desde donde se importa al país.
El Gerente General de la iniciativa, bautizada como Siderúrgica Acero SRL, informó que este año tienen previsto producir 20.000 toneladas (t) de acero de construcción y llegar hasta las 36.000 en 2015. La producción de la factoría cubrirá en principio la demanda de barras de construcción de Oruro, La Paz, Tarija y Potosí, para posteriormente competir con los productos de Chile y Perú.
Según la explicación del empresario, la industria producirá barras de construcción lisas a un precio inferior en 20% al del mercado externo, donde la tonelada cuesta entre $us 1.100 y $us 1.150. La ventaja competitiva está en que, por una parte, la mano de obra es nacional y, por otra, que los costos de transporte serán menores por la menor distancia entre la planta laminadora y los mercados.
Asimismo, se explicó que la planta está ubicada en Oruro debido a dos factores: primero, los beneficios aduaneros e impositivos para la implementación de industrias nacionales en ese departamento y, segundo, la ubicación estratégica que tiene, próximo a los puertos chilenos de Arica e Iquique y a los peruanos de Arequipa y Matarani.
Finalmente, se informó que además de participar en el mantenimiento, reparación y puesta en funcionamiento de algunos de los equipos ya existentes, expertos orureños y brasileños construyeron el nuevo horno de calentamiento de palanquillas, importadas desde EEUU, Europa y China, que hoy incluye una cámara de precalentamiento con quemadores de última tecnología capaz de procesar hasta 12 t por hora.
Se trata, pues, de un poderoso ejemplo de inversión privada nacional que, además, cuando fructifique el proyecto siderúrgico del Mutún, bien podría ser el primer centro industrializador del hierro boliviano, lo cual ahorraría más de un problema durante el proceso de instalación de las que, algún día, serán las plantas estatales de producción de acero, ya que hasta entonces se habrá desarrollado el conocimiento local necesario para desarrollar este tipo de proyectos.