‘Sería un privilegio trabajar en Bolivia y que un director me llame’
Jürgen Gómez El actor colombiano de 25 años dejó todo en su tierra natal para ser el protagonista del filme peruano ‘Cementerio General’, cinta de terror en la que interpreta a Pablo, un joven inseguro, y que se exhibe actualmente en Multicine en funciones de noche. El joven artista también visitó suelo boliviano. Dentro de sus proyectos a futuro, le gustaría trabajar en el país para filmar alguna película.
— ¿Cómo surgió la propuesta de protagonizar un filme en Perú?
— Conocí a Dorian Fernández- Moris, el director de la cinta, en Colombia, en uno de sus viajes. Hablamos de una película e hice una audición, pero yo no sabía que era para el papel protagónico. En Perú me enteré de que estaba en el elenco y que comenzábamos rodaje y, sorpresa, yo era el protagonista. Fue maravilloso, la experiencia de grabar en la selva, el trato de la productora con los actores, la organización, toda la experiencia de Cementerio General fue mágica.
— ¿Qué significa para usted Cementerio General?
— Un sueño cumplido, la oportunidad para decirle al mundo que lo que deseamos se puede conseguir. El filme fue un sueño, desde su concepción, el director y productores querían hacer una película de terror con alto impacto. Yo deseaba tener un protagónico y el cine es lo que más amo hacer.
Aunque la televisión y el teatro son maravillosos, el cine me desvela y apareció esta oportunidad. Eso es magia, es Dios, significa que nos apoya en cualquier cosa que queramos emprender con amor y sin hacer daño a nadie.
— El terror tiene sus códigos, ¿cómo fue encarnar a Pablo?
— En mi forma de ver la actuación, debo crear un universo del personaje y así entiendo sus comportamientos y aprendo a justificar cada acto bello o miserable que tiene. Pablo es un personaje muy humilde, tímido y con muchas inseguridades. Él debe enfrentar momentos que no tienen explicación lógica. A él le asusta contarle sus cosas a alguien por miedo al qué dirán. Para encarnarlo busqué en mis inseguridades y mis miedos. Pablo definitivamente fue un reto maravilloso y un personaje al que le tengo mucho cariño.
— ¿Como le trató Perú?
— Amo Perú, es un país maravilloso en el que he encontrado amigos, tengo mi familia peruana —así llamo a una familia que me adoptó como hijo suyo—, los Almandoz. Soy Jürgen Gómez Gómez Almandoz (risas). En un futuro quiero tener una de mis bases en Perú.
— ¿Le interesaría trabajar en algún filme en Bolivia?
— Sería un privilegio trabajar en Bolivia. Ojalá un director boliviano vea mi reel y decida llamarme. Estuve en La Paz y en Copacabana; me gustó mucho la gente, es maravillosa y sería una experiencia conocer al pueblo boliviano más de cerca.
— ¿Qué le diría al público boliviano que aún no vio la cinta?
— Que vayan acompañados, para que tengan a quién abrazar, y que no se la pierdan. En los cementerios la energía es muy pesada y es allí donde van a entrar.