El líder cubano Fidel Castro apareció ayer en el Parlamento por primera vez desde que dejó el poder hace cuatro años por una enfermedad, para hablar de política internacional, en una sesión que los medios transmitieron en vivo.

Vestido de verde olivo, el ex gobernante, quien cumplirá 84 años el próximo viernes, entró caminando en medio de una fuerte ovación y en presencia de su hermano, el presidente Raúl Castro, y leyó un mensaje a la Asamblea Nacional, de la cual aún es diputado.

La sesión legislativa extraordinaria, difundida para todo el país por radio y televisión, con presencia de prensa extranjera, fue solicitada por Castro para hablar del peligro de una guerra nuclear si Estados Unidos e Israel atacan a Irán.

De pie en la tribuna, Castro dijo que el presidente estadounidense, Barack Obama, tendría que tomar «en solitario» la orden que desatará un conflicto nuclear, pero «no la dará si se logra que tome conciencia de esto». «Estamos haciendo una contribución a ese esfuerzo persuasivo» que llevan también otras personas, manifestó.