La mano de Zago
Imagen: Archivo La Razón
Ricardo Bajo
Imagen: Archivo La Razón
Introducción: es el primer partido de la era Zago. El rival es Perú que llega con un punto y cero goles. El primer onceno del brasileño trae un dibujo novedoso: es un 4-2-3-1. Tiene a Quinteros de lateral derecho.
Tiene a Ramiro Vaca en doble cinco con Justiniano; tiene un tridente formado por Henry y Algarañaz de extremos con Miguel Terceros de enganche (pasará desapercibido); y arriba tiene a Martins.
El peruano Juan Reynoso (se marchará con gritos en su contra) coloca una mezcla de juventud y veteranía. En Perú juega (un) Quispe: en Bolivia, no. Hay (muchos) más hinchas peruanos en el Siles que bolivianos. Es un duelo de coleros; el que pierda se hundirá en el fondo; el que gane recuperará la ilusión.
Nudo: Bolivia entrega la pelota y se coloca para llegar gracias a la presión alta. La verde va a explotar los errores/horrores en salida de la bicolor. El primer gol llegará así: robo de Marcelo y golazo de Henry Vaca.
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El otro recurso son los disparos de fuera del área; así lo hace Ramiro Vaca -el hombre del partido. Con el uno a cero, los de Zago no se meten atrás para esperar pasivamente: agobian, tienen orden, marcan y muerden. La actitud/agresividad están de regreso.
Quinteros es el que más sufre con el extremo Zanelatto. Justiniano se queda solo por momentos en la contención y es el que más sufre con Piero Quispe. A Lapadula le llegan pocas pelotas y cuando le llegan, la hinchada boliviana corea: Viscarra, Viscarra.
Desenlace: Zago cambia el dibujo en la segunda parte. Por fin se nota que hay entrenador. Bolivia tiró a la basura los cuatro primeros partidos con la era Costas.
El brasileño, inteligentemente, puebla el medio y coloca un 4-4-2 con Henry y Marcelo de puntas. Mete a Ramallo (por Terceros). El hombre de Aurora hará un gran trabajo, sacrificado; tapará la banda derecha y dará salida.
Entonces Zago hace el segundo movimiento: mete a Villarroel para acompañar a Justiniano y adelanta a Ramiro que se coloca de media punta, más cerca del área, su hábitat predilecto. Pasan dos minutos y el chaqueño filtra un pase a Martins que debió ser penal.
Colocado en modo contragolpe, será Ramiro, gracias a una contra de Arrascaita, quien sentencia el “match”. Es la mano de Zago.
Post-scriptum: para llegar al Mundial (repechaje) necesitamos que tres equipos queden por detrás nuestro. Pueden ser Perú, Paraguay y Chile. Bolivia ahora tiene un entrenador y una idea.
La feliz tarde termina con un merecido tributo a Martins que se va con lágrimas, homenajeado por hinchadas y compañeros. Alguien tiene que hacer algo para que siga. No nos podemos permitir el lujo de prescindir de un jugador que pesa tanto dentro como fuera de la cancha.
(17/11/2023)