Mañana, el príncipe Guillermo-Alejandro será entronizado rey de Holanda y su esposa Máxima será reina consorte, convirtiéndose en los primeros herederos europeos en llegar al trono en el siglo XXI que deberán demostrar que la monarquía todavía tiene sentido.

La ceremonia de relevo se celebrará en la medieval Nieuwe Kerk (Iglesia Nueva) en Amsterdam, luego de la abdicación de la reina Beatriz en el Palacio Real de la misma ciudad. Fue en esa Iglesia donde Guillermo-Alejandro se casó con Máxima Zorreguieta, de origen argentino, hace poco más de 11 años.

Será el primer rey varón de su país de los últimos 123 años y junto a su esposa, la pareja real más joven de las monarquías occidentales. La reina Beatriz, de 75 años, fue contundente cuando anunció en enero su abdicación: “Ha llegado el momento de dar paso a otra generación”.

El príncipe, que durante sus años de juventud parecía más interesado en la vida nocturna y la cerveza, ha demostrado en los últimos años que está listo para ser rey, aupado por la popularidad de su esposa, Máxima. “Solamente hay un jefe de Estado en Holanda, ahora es mi madre y luego del 30 de abril yo”, precisó. No será una tarea fácil representar a una de las monarquías más caras y ricas de Europa en plena crisis del continente.