La Embocada respeta a su santo ‘malito’
La caminata de protesta se encuentra desde hace una semana en esta comunidad cerca de la frontera entre Beni y La Paz, en la que la vida está marcada por San Isidro
«Nuestro santo es malito. Si le haces una promesa y no le cumples, seguro te castiga», sostiene Pabla Cortez, una de las vecinas más antiguas de esta comunidad beniana, ubicada cerca de la frontera con el departamento de La Paz y a 275 km de Trinidad, el punto de partida desde donde llegaron unos 1.500 indígenas en su marcha de protesta contra la posibilidad de que se construya una carretera por el TIPNIS.
«Si alguien hace una promesa delante de él y no cumple, San Isidro les castiga. Por eso, si el Gobierno hace promesas a los indígenas en nuestro pueblo, tiene que cumplirlas», añade la anciana, que llegó a esta zona en 1952.
En el caserío de La Embocada sus habitantes hablan sin reparos de su santo. «Es malito», responde la mayoría de los consultados ante las preguntas de los periodistas visitantes.
«Si le prometes que vas a traerle una ropita y no cumples, te cae el castigo», afirma María, una señora de pollera que llegó del altiplano hace unos 20 años y que ahora es propietaria de una tienda en este poblado que da sustento a unas 80 familias.
Entre pausas y distanciamientos, Gobierno e indígenas iniciaron el pasado martes el séptimo intento de diálogo desde que comenzó la marcha, el 15 de agosto, en busca de dar soluciones y alternativas a la protesta de los habitantes del Territorio Indígena Parque Nacional Isiboro Sécure (TIPNIS) que se oponen a que la carretera entre Villa Tunari y San Ignacio de Moxos pase por el corazón del parque.
REGALOS. «Mire, yo no creo en santos, pero porque estamos descansando en la iglesia del pueblo le pusimos estas dos velas a manera de agradecimiento», explica Enrique Choquetijlla, del Conamaq, que junto a otros compañeros dormía por estos días en el templo católico de la comunidad, dentro del cual una imagen de San Isidro de La Embocada observa el ir y venir de los fieles.
Los pobladores de La Embocada le hacen una fiesta cada 15 de mayo. En esa jornada, el santo estrena hasta tres juegos de ropa y los vecinos organizan bailes con macheteros y un jocheo de toros en su nombre.
Debido a la migración de muchos paceños a esta región beniana, ahora ya se nombran prestes en su honor. En alguna ocasión, San Isidro lució incluso un traje de Umopar y en otra fue vestido como una cholita.
«Los kollitas ¡puej! le han vestido esa vez (el 2007), pero eso sí nunca le falta su ropa y sus velas», reafirma Esperanza Palma, hija del recordado «Animador» (así llamaban al cofrade) de la imagen, Máximo Palma, que falleció este año.
«Ahora los kollitas y los indígenas le ponen velas para pedirle protección y para rogarle que solucione este problema por el cual marchan, porque si alguien promete algo delante de él, debe cumplir, sino San Isidro les castiga», apunta doña Pabla Cortez.
Apoyo de la oposición a la marcha
Santa Cruz
Políticos de oposición y representantes de ONG se adhirieron a la protesta por el TIPNIS, en una vigilia instalada en la plaza principal de Santa Cruz, explicó el senador cruceño Germán Antelo.
Sin señal
El exvicepresidente Víctor Hugo Cárdenas considera que el mandatario Morales es «prisionero de los productores de coca de Cochabamba», sector que estaría presionando para beneficiarse del tramo II de la carretera.
Revilla aguarda la marcha en La Paz
El alcalde de la ciudad de La Paz, Luis Revilla, declaró ayer que si la marcha de los pueblos del Territorio Indígena Parque Nacional Isiboro Sécure (TIPNIS) llega a la urbe paceña, será recibida «con los brazos abiertos» y se le brindará asistencia.
«Si es que la marcha llega a la ciudad de La Paz, por supuesto, como ha ocurrido en otras oportunidades, La Paz va a demostrar su solidaridad con nuestros hermanos indígenas», sostuvo el burgomaestre en la jornada que estuvo signada por el paro cívico en esta capital.
Señaló que posiblemente este tema entre en la agenda de la Asamblea de la Paceñidad que se llevará adelante el lunes a las 18.00 en el salón Rojo del Palacio Consistorial. De momento, explicó el Alcalde, se piensa en asistir y colaborar a los indígenas en caso de que lleguen a La Paz.
Por su parte, el defensor del Pueblo, Rolando Villena, mencionó ayer que los efectivos policiales que se encuentran en la carretera Yucumo-San Borja, evitando el paso de los pueblos del Territorio Indígena Parque Nacional Isiboro Sécure (TIPNIS), están vulnerando el derecho a la libre locomoción.
Villena habló tras conversar con el ministro de Gobierno, Sacha Llorenti, sobre el traslado de policías con la orden de mantener a distancia a indígenas y colonos.