Chile califica a alegatos de ‘confusos y cambiantes’
Canciller Muñoz dijo que confía en los argumentos del equipo chileno
Bolivia cerró ayer la ronda de alegatos que presentó con Chile respecto a la competencia de la Corte Internacional de Justicia (CIJ) para conocer la demanda marítima. A la conclusión de las audiencias, el canciller de ese país, Heraldo Muñoz, afirmó que los argumentos fueron confusos y cambiantes.
“Quisiéramos decir que nuevamente hemos escuchado argumentos confusos y cambiantes de parte de Bolivia, no responden a la realidad y no son capaces de darle a conocer a la Corte que tiene competencia para conocer este asunto”, manifestó el representante de la diplomacia chilena. Tras un balance de los cuatro días de presentación de alegatos por parte de ambos países, afirmó que existe confianza jurídica. “Estamos reafirmados en la confianza y fortaleza de nuestros argumentos”, insistió el Canciller, en declaraciones recogidas por medios de comunicación de su país.
Demanda. El equipo jurídico del país vecino, el jueves, cerró su ronda de alegatos, cuando enarboló, una vez más, el Tratado de 1904, aunque admitió que ofreció un acceso marítimo a Bolivia; empero, los juristas afirmaron que tales promesas no incluyeron concesiones soberanas en el mar.
Ayer fue el turno de Bolivia, que además debía responder la pregunta que hizo, el martes, el juez Christopher Greenwood: “¿En qué fecha mantiene Bolivia que se concluyó un acuerdo respecto de la negociación relativa al acceso soberano?”.
Al respecto, Muñoz aseveró que Bolivia “no contestó con ninguna precisión los planteamientos de Chile y no respondió a la pregunta del juez, lo que me parece significativo”, sostuvo a la consulta de los periodistas chilenos que se instalaron en los jardines del Palacio de la Paz, sede de la CIJ. “No hay un principio en el derecho internacional que requiera de un momento mágico”, respondió el abogado Payam Akjavam, que representa a Bolivia, a la pregunta que el juez Christopher Greenwood formuló el jueves.
En 2013, el país interpuso una demanda contra Chile ante la CIJ para que ese tribunal obligue al país vecino a entablar el diálogo para negociar una salida soberana a las costas del océano Pacífico. No obstante, un año después, la administración de Michelle Bachelet interpuso un recurso preliminar de incompetencia para que la CIJ no pueda ver este caso.
Caso. El proceso de fondo se paralizó temporalmente y se abrió, entre el 4 y 8 de mayo, una ronda de alegatos orales en la que ambos países presentaron sus argumentos para defender sus posiciones. Bolivia defendió la competencia del tribunal internacional para tratar la causa marítima asegurando que esta causa se basa en el incumplimiento de compromisos “unilaterales” que hizo ese país a lo largo de la historia para resolver el diferendo marítimo, sin tocar el Tratado de 1904. Esos ofrecimientos, en criterio del equipo jurídico boliviano, demuestran que ese documento bilateral no zanjó el conflicto y que existen compromisos posteriores a 1948.
Al concluir los alegatos bolivianos, el juez japonés Hidashi Owada lanzó una cuestionante a ambos países, respecto a la definición que tienen sobre el concepto de “acceso soberano al mar”. Al respecto, Muñoz afirmó que su país responderá “oportunamente”.
Confianza en alegato chileno
– El canciller Heraldo Muñoz se mostró satisfecho al finalizar los alegatos orales en los que Chile fundamentó la solicitud de incompetencia de la CIJ ante la demanda boliviana. El jefe de la diplomacia chilena aseguró que los razonamientos nacionales “fueron claros, contundentes y no evasivos”.
– “Nos parece que nuestros argumentos han sido respetuosos del derecho internacional (…), no son los méritos del caso, no es el fondo de la demanda, sino que la Corte que —a nuestro juicio— no tiene jurisdicción para conocer un asunto que fue resuelto por un tratado válido y vigente, el de 1904”, señaló Muñoz.
Juicio enfrenta a políticos
El juicio que interpuso Bolivia contra Chile ante la CIJ enfrentaron a los presidente de las cámaras de Senadores de ese país y a la de Diputados de La Paz. Tras la conclusión de alegatos que se registró ayer en La Haya, el presidente del Senado chileno, Patricio Walker, afirmó que el proceso busca solucionar un problema de política interna en el país.
“Buscaron, efectivamente, una salida en La Haya para solucionar un problema de política interna (en Bolivia). Podemos estar tranquilos, estamos en muy buenas manos, hemos sido bien defendidos (…). Es una demanda artificial construida con mucha creatividad, pero sin fundamentos jurídicos”, afirmó la autoridad del Legislativo chileno, según reportó Emol.com.
Al respecto, la titular de la Cámara de Diputados de Bolivia, Gabriela Montaño, manifestó que los que tienen “problemas” en su política interna son la administración de Michelle Bachelet, quien renunció a todo su gabinete ministerial, el jueves, justo cuando su equipo jurídico presentaba los alegatos ante la CIJ.
Entre los que se alejaron por pedido presidencial fue el canciller Heraldo Muñoz, quien tuvo que ser ratificado de forma inmediata, puesto que lideraba la comisión chilena que acompañó a sus abogados defensores. “En Bolivia existe estabilidad política, social y económica (…), parece que el senador Walker se ha desconectado de su realidad (…) en la que Chile ha pedido la renuncia de todo su gabinete y vive probablemente la crisis política más estructural de las últimas décadas”, dijo.