Organizaciones evalúan la labor de los ministerios
Los ministerios de Gobierno, de Economía y de Desarrollo Rural son bien vistos; los de Trabajo, Minería y Salud son cuestionados.
El 2012 termina. Queda poner en la balanza el desempeño de los ministerios que componen el Órgano Ejecutivo. Seis representantes de las organizaciones sociales, unas alineadas y otras divergentes con el gobernante Movimiento Al Socialismo (MAS), aceptaron exteriorizar sus opiniones al margen del proceso de evaluación que comenzó este fin de semana con miras al 22 de enero, cuando cambien las autoridades en el marco del proceso de cambio que desde 2006 lidera Evo Morales.
Algunas voces coinciden, otras se excluyen irreconciliablemente mientras se espera la renuncia generalizada del consejo ministerial, una formalidad que se da a esta altura del año. Es igual cada vez, dirán los visionarios ciudadanos, pero las lecturas y los escenarios cambian.
Los diputados opositores claman por una crisis total del gabinete de Morales y los oficialistas, como Rodolfo Calle, han sugerido cambiar al ministro de Gobierno, Carlos Romero, aunque sin excepción valoraron positivamente las acciones asumidas por su despacho para desmantelar la red de extorsión. Otra autoridad valorada que aparece en la escena del epílogo anual es el canciller David Choquehuanca, cuyo liderazgo —una vez más— no fue cuestionado por las organizaciones sociales y sindicales que sustentan el proyecto político gobernante.
El ejecutivo de la Confederación Nacional de Gremiales de Bolivia, Francisco Figueroa, quien anteriormente apoyó al Gobierno, ahora mantiene una posición crítica por efecto del conflicto de intereses que provocó el proyecto de Ley de Extinción de Bienes. El dirigente cree que Carlos Romero, Teresa Morales (De-sarrollo Productivo) y Luis Arce, de la cartera de Economía, “son los únicos” que han hecho un buen trabajo: “El de Gobierno —justifica— por su trabajo contra la red de extorsión que había en los ministerios; Finanzas (Economía) por el equilibrio de la economía; y Desarrollo (Económico) porque está funcionando”. Figueroa asegura que “ni hablar” del resto de los portafolios. “Han perjudicado la labor del Gobierno (…), deben hacer más trabajo de cara al pueblo y no labor partidaria”, critica. En contrapartida, Braulio Rocha, líder de los comerciante informales afines al Gobierno, se excusó de hablar sobre el gabinete que se va.
Sectores. La Confederación Sindical Única de Trabajadores Campesinos de Bolivia (CSUTCB) es una de las organizaciones sociales que se mantiene cerca del MAS a pesar de los remezones de los últimos dos años. El secretario general de esta organización, Rodolfo Machaca, prefiere comenzar por lo valioso, los “avances notorios” para su sector; destaca la gestión de la ministra de Desarrollo Rural, Nemesia Achacollo, que “se ha ejecutado de manera coordinada con las organizaciones”.
“Algo que va a ser fundamental y que se está programando desde ese ministerio es el Censo Agrario. A nivel internacional, se ha dedicado a promocionar productos estratégicos como la quinua”, dice Machaca. Añade que la presencia y funcionamiento del Servicio Nacional de Sanidad Agropecuaria e Inocuidad Alimentaria (Senasag) se ha consolidado en esta gestión. Lo mismo que el Instituto Nacional de Innovación Agropecuaria y Forestal (INIAF). “La institucionalidad está entrando a las comunidades”.
En el ámbito de la explotación minera, las críticas llegan sobre la base del análisis de un año complejo para el sector. Severino Estallani, ejecutivo del Sindicato de Trabajadores de Colquiri, criticó al gabinete por no haber “impulsado y fortalecido” al aparato productivo. Es una tarea pendiente desde la óptica de los mineros asalariados, un sector que este año mantuvo distancia respecto al Gobierno, a diferencia de los cooperativistas mineros que recibieron ayuda y el aval de sus concesiones mineras. El máximo dirigente de este sector, Albino García, evitó comentarios para evaluar; colgó el teléfono.
Política. El ministro de Gobierno, Carlos Romero, puede cerrar la página 2012 con la certeza de haber calado en el imaginario colectivo, a diferencia de otros funcionarios de su jerarquía que aparecieron poco. Para Julián Jala, por ejemplo, el aporte de Romero es valioso porque el ministro sabe acercarse a los sectores y organizaciones sociales. Por lo demás, “el Presidente verá si hay que cambiar o no a alguien. No podemos imponer nada”, señala luego de recordar lo que dice la Constitución Política del Estado (CPE).
No todo es bueno para este líder campesino, se queja de que cuando su organización se acerca a los otros ministerios, no se le proporciona información. “Pedimos que nos den informes. Además, recién al final se socializan los proyectos de ley, eso tiene que mejorar”, sostuvo el dirigente.
Los cocaleros de los Yungas paceños tienen diferencias, en algunos casos irreconciliables, con sus pares del trópico de Cochabamba, uno de los sectores más empoderados desde hace siete años. René Álvarez, líder cocalero de la Federación San José de La Asunta, criticó el desempeño de la ministra Achacollo. “No se están cumpliendo los compromisos que tenía con los productores (…), el Viceministerio de la Coca no tiene ningún control de las plantaciones. Eso a nivel internacional nos está costando”, asegura.
El dirigente yungueño destaca los resultados de la cartera de Obras Públicas por la infraestructura de caminos, “aunque (en esas obras), a nivel departamental, continúa débil”. Agrega que “el resto de los despachos despertó nuestra disconformidad”.
El secretario general, miembro de la mesa directiva de la Central Obrera de Bolivia (COB), Hermo Pérez, no tuvo inconveniente en evaluar la gestión 2012 de los ministerios. La COB era uno de los aliados incondicionales del MAS hasta que comenzaron las fricciones por efecto del gasolinazo (fines de 2010, inicios de 2011) y este año la relación empeoró por el conflicto desatado por el incremento de horas laborales de médicos y salubristas del sector público.
Pérez juzga que se necesita un cambio de ministros. “Quisiéramos una renovación” que se aleje de las medidas de corte neoliberal. Este líder sindical opina que los ministerios de resultados “más bajos” fueron el de Trabajo (Daniel Santalla), Salud (Juan Carlos Calvimontes), Minería (Juan Carlos Virreira) y Economía (Luis Arce). A éste último le reprocha porque sus políticas económicas no coinciden con el discurso del vivir bien. Sobre Virreira, el dirigente cree que “no tiene conocimiento de lo que es la mina” debido a su formación como ingeniero civil. La cartera de Trabajo no cumplió —asegura— su función, pues “muchos obreros y trabajadores” fueron retirados este año aún cuando tenían el fuero sindical. “Su finalidad es proteger a los trabajadores, no darles la espalda”, dice esta autoridad de la COB. Además, reclama que ese ministro “tarda mucho en firmar las resoluciones sindicales”. Al Ministerio de Salud le recrimina la “mala administración” del conflicto sobre las horas de trabajo de los médicos. “Ese problema sólo se ha pospuesto”. Otra tarea pendiente para 2013.
Rodolfo Machaca, líder de la CSUTCB, al momento de apuntar los puntos flacos, cree que desde el Ministerio de Justicia no se ha trabajado en la “la honestidad al interior del Estado.
Tampoco se ha coordinado con las organizaciones” estos aspectos vinculados con la lucha contra la corrupción. Expresa una similar evaluación con relación al Ministerio de Agua y Medio Ambiente, cuya autoridad máxima es José Zamora: “Si bien ha asumido hace unos meses, se puede calificar a la gestión 2012 como débil”. En efecto, el anterior responsable del despacho, Felipe Quispe, fue destituido, en agosto, tras ser acusado por el presidente Evo Morales de haber mentido al decir que “había agua” en el aeropuerto de Uyuni, cuando no era así.
Para Machaca, el resto de los ministerios y ministros han respondido: “Hay que seguir trabajando para llegar a las metas trazadas por el mandatario Evo Morales. Además, se debe controlar quién entra como funcionario. A veces, los que hacen consultorías externas y los mandos medios entran con objetivos diferentes”.
Jaime Solares, ejecutivo de la Central Obrera Departamental de Oruro, organización opositora y crítica al gobernante MAS, al contrario, sostiene que no hay un solo despacho que haya tenido un buen desempeño. “Todos están vendidos al orden mundial. Se habla de cambio, pero se está vendiendo todo al capital; no hubo nacionalización”, dice y luego justifica sus criterios con críticas a la nueva Ley de Pensiones y las indecisiones para mantener vigente la actual Ley de Bancos. “Los mismos se siguen enriqueciendo a costa de los pobres”, asegura.
Minería. Severino Estallani, ejecutivo del Sindicato de Trabajadores de Colquiri, exteriorizó su malestar por los resultados que entregó el Ministerio de Minería y el portafolio de Trabajo. Lamenta la ausencia de respaldo de esas carteras a la empresa estatal minera. “Minería y Trabajo, particularmente, fueron los participantes del conflicto de Colquiri. Cuando pedimos la reversión del yacimiento no tuvieron una posición clara. En vez de apoyar a la empresa estatal, han preferido sectorializarse con el sistema cooperativista”, dice este líder de los asalariados mineros. Luego agrega que este escenario se configuró porque en el gabinete hay “encaramados de los gobiernos que han vendido (a las firmas trasnacionales) las empresas estratégicas del país”.
Estallani reprocha la retardación del nuevo Código Minero. “Esto hace que la situación jurídica sea imprecisa. Hay miedo por los avasallamientos, no hay garantías jurídicas para la empresa estatal ni para las privadas”. Sin embargo, Estallani destaca, al igual que Machaca, el desempeño del Ministerio de Gobierno por su “pronta respuesta y castigo contra la red de extorsión”, aunque esa tarea aún esté pendiente en los juzgados de Santa Cruz de la Sierra.
Entre buenas y malas calificaciones que dan organizaciones alineadas o divergentes del Gobierno, la presidenta de las seis Federaciones del Trópico de Cochabamba, Segundinda Orellana, señaló que se harán “sugerencias” al presidente Morales para que modifique el gabinete.
Tres grupos de trabajadores ven con buenos ojos la labor de la cartera de Gobierno: Carlos Romero, ministro de Gobierno
Rodolfo Machaca y Julián Jala (Confederación Sindical Única de Trabajadores Campesinos de Bolivia), Severino Estallani (líder de los asalariados mineros de Colquiri), y Francisco Figueroa (representante nacional de los gremiales) destacan al ministerio dirigido por Carlos Romero por la intervención e investigación contra la red de extorsión en su cartera. Machaca pide mayor control de los funcionarios de rango medio.
Un ministerio que es defendido por unos y criticado por otros: Nemesia Achacollo, ministra de Desarrollo Rural y Tierras
El despacho de Desarrollo Rural y Tierras es rescatado por Rodolfo Machaca (Confederación Sindical Única de Trabajadores Campesinos de Bolivia) por su trabajo en la promoción internacional de los cultivos de la quinua. No obstante, el líder cocalero René Álvarez está disconforme. Afirma que esa cartera ha perdido el control de la coca y que favorece a los cultivos ilegales en desmedro de las áreas tradicionales.
‘La posición de Virreira no fue clara al momento de manejar el aparato productivo minero’: Mario Virreira, ministro de Minería y Metalurgia
Severino Estallani, ejecutivo del Sindicato de Trabajadores de Colquiri, afirma que en 2012, la posición del ingeniero Mario Virreira, “no fue clara” para manejar el aparato productivo del sector minero. “Lamentablemente, el Gobierno, al nominar a este señor, se ha equivocado. Los problemas en Colquiri y Mallku Khota aún siguen latentes hasta hoy”. El líder de los cooperativistas Albino García evitó hacer evaluaciones y colgó el teléfono.
En 2012 los indicadores macroeconómicos superaron a los obtenidos en 2011: Luis Arce, ministro de Economía y Finanzas
El ejecutivo nacional de la Confederación de Gremiales de Bolivia rescata la gestión que tuvo en 2012 el Ministerio de Economía y Finanzas, luego de recordar que los indicadores macroeconómicos fueron positivos durante todo el año y superaron a los de 2011. Sin embargo, para el secretario General de la Central Obrera Boliviana (COB), Hermo Pérez, el ministro “se encierra y no logra que el vivir bien se vea en la economía del ciudadano”.
El momento crítico fue el conflicto sobre la jornada laboral de los médicos: Juan Carlos Calvimontes, ministro de Salud
El momento más conflictivo que tuvo que enfrentar esta oficina del Órgano Ejecutivo fue cuando Evo Morales decretó que la jornada laboral de los trabajadores del sector de Salud se incremente de seis a ocho horas. Hermo Pérez, secretario general de la Central Obrera Boliviana, asegura que mucho antes de que se inicie el conflicto se solicitó al ministro que detuviese el decreto. El conflicto aún se mantiene latente para 2013.
Los trabajadores se sienten desprotegidos y critican la gestión de Daniel Santalla: Daniel Santalla, ministro de Trabajo
El secretario general de la Central Obrera Boliviana, Hermo Pérez, no ve positiva la gestión del Ministerio de Trabajo porque asegura que no cumplió su finalidad de proteger a los trabajadores. Pone el ejemplo de varios obreros con fuero sindical que pudieron haber sido despedidos. Lamentó la lentitud del despacho de Santalla que demora mucho tiempo a la hora de reconocer el fuero de las organizaciones sindicales.