‘Es necesario recurrir a tribunales competentes’. Fernando Cajías
Cajías recapitula cuatro acercamientos entre Bolivia y Chile que pudieron resolver el diferendo marítimo. Perú obstaculizó acuerdos en tiempos pasados.
Asesor en temas históricos de la Dirección de Reivindicación Marítima (Diremar), aportó a la demanda marítima que será presentada ante cortes internacionales. Es partidario de recurrir a los tribunales jurídicos pertinentes para resolver este centenario conflicto. En esa razón, apoya la iniciativa que expone el gobierno de Evo Morales, porque también sugiere que este diferendo debe asumir un carácter multilateral. Dice que Perú juega un rol importante en la resolución de este tema.
Tiene la confianza del presidente Evo Morales. Es una figura clave en la estructuración de la demanda marítima que será presentada ante cortes internacionales. Fernando Cajías de la Vega aportó, junto a su equipo, la documentación histórica para afianzar el proceso. Experto en la historia boliviana, hace un repaso de los momentos cuando La Paz y Santiago pudieron lograr acuerdos respecto al diferendo marítimo. Ante la frustración, ve necesario que este conflicto adopte un carácter multilateral y tiene la posición de enjuiciar a Chile como mecanismo de resolución pacífica de este centenario diferendo.
Es el asesor principal en temas históricos de la Dirección Estratégica de Reivindicación Marítima (Diremar). Como un logro principal de sus actividades, dice que el Centro de Documentación —entidad que dirige— reunió varios documentos que son parte de la demanda. Está seguro de que el Tratado de 1904 fue impuesto. Dice que fue por dos razones: temas militares y económicos.
— ¿Existen temas pendientes entre Bolivia y Chile?
— Por supuesto que sí existen temas pendientes con Chile…
— ¿El más importante?
— El más importante es el relacionado con la demanda boliviana de recuperar su cualidad marítima con soberanía, perdida a consecuencia de la Guerra del Pacífico.
— ¿Cuáles fueron las oportunidades más cercanas en que Bolivia y Chile pudieron firmar un acuerdo?
— En 1895, cuando se llegaron a firmar los tratados en los que Bolivia cedía la provincia de Atacama y a cambio Chile se comprometía a traspasar a favor de Bolivia Tacna y Arica. Esos tratados no se firmaron. En 1926, cuando Chile y Perú nombraron a Estados Unidos como mediador para solucionar el tema pendiente de la posesión de Tacna y Arica. Ese año, el secretario de Estado norteamericano Kellog sugirió que la solución para una paz duradera en el Pacífico era entregar esas dos ciudades a Bolivia y que Bolivia pague por ellas. Perú se opuso. En 1950 y 1975 se abrieron negociaciones para dotar a Bolivia de un corredor al norte de Arica a cambio de compensaciones. Las negociaciones fracasaron.
— ¿Qué aspectos dificultaron la firma de pactos concretos?
— Primero, que la solución en las cuatro oportunidades pasaba por un puerto en territorio anteriormente peruano. La posición reivindicacionista se opuso a una solución por territorio peruano. El tema de las compensaciones, especialmente las territoriales.
— ¿Qué rol juega Perú en este diferendo marítimo?
— Han existido dos etapas en la relación con el Perú respecto a este tema. La primera, en la primera mitad del siglo XX, el Gobierno peruano se opuso firmemente a una solución que pase por territorio peruano. En una segunda mitad del siglo, la posición ha sido de mayor apertura, como la propuesta de un territorio trinacional, la promesa de que no sería obstáculo, las facilidades para la utilización de puertos peruanos, la concesión en Ilo, etcétera.
— Perú dijo que no obstaculizará un acceso al mar para Bolivia; sin embargo, existe el Tratado de 1929 firmado por Lima y Santiago. ¿Este documento en qué medida puede afectar el reclamo boliviano?
— Afecta, porque establece que ni Chile ni Perú pueden entregar ese territorio a un tercero (en este caso Bolivia) parte del territorio de Tacna y Arica sin consulta del otro. Por lo tanto, convierte al problema en trinacional. Sin embargo, es todavía una de las soluciones más probables, a la que Perú ha planteado no presentar ningún obstáculo.
— ¿Por qué Bolivia accedió a la rúbrica del Tratado de 1904?
— Existía una enorme presión militar y económica; un país salido de dos guerras: Federal y la del Brasil.
— ¿Este pacto fue impuesto por la parte chilena?
— Por supuesto que sí, basta leer la carta del comisionado Abraham König para constatarlo.
— Usted habló de razones históricas en el conflicto. ¿Cuáles son éstas? y si pueden ser resueltas.
— Existen muchas razones que explican el conflicto, pero la principal es la económica. Chile buscó desde 1840 apropiarse de las riquezas que encerraba el litoral boliviano, riquezas que hasta el día de hoy (el cobre, por ejemplo) constituyen la riqueza que genera más ingreso a ese Estado.
— El Ejecutivo boliviano realzó el reclamo marítimo. ¿En qué se diferencia la administración de Morales a otros gobiernos bolivianos respecto a este tema?
— Todos los gobiernos, unos más que otros, incluido el liberal, presentaron ante Chile y ante organizaciones bilaterales la demanda boliviana de un puerto soberano y útil. Lo propio del gobierno de Evo Morales es la ofensiva multilateral buscando un consenso político para consolidar la demanda como política de Estado y por la formación de un equipo multidisciplinario a largo plazo para que prepare la demanda.
— ¿Cómo evalúa su aporte al sustento histórico de la demanda marítima? ¿Cuál fue la metodología de su trabajo? ¿Cuántos profesionales reunieron este esfuerzo?
— Es importante señalar que todo el trabajo fue en base a un equipo en el que han participado una decena de historiadores jóvenes bajo mi coordinación y de las direcciones de la Dirección Estratégica de Reivindicación Marítima (Diremar). Son varios los aportes, pero creo que el más importante es la construcción paulatina de un Centro de Documentación con miles de documentos sobre el tema y el inicio de un análisis de los grandes capítulos relacionados con el tema. Tareas que deben continuarse, de seguro.
— ¿Qué avances se lograron en la recolección de documentación histórica que aporte a la demanda marítima?
— Como avance, podemos decir que se está trabajando con un grupo de estudiantes de la carrera de Historia y se formó un grupo de expertos historiadores para el análisis y recopilación de documentación histórica en vistas a la demanda internacional.
— ¿Lo más acertado es acudir a tribunales para resolver este tema?
— Ante el fracaso de las negociaciones bilaterales, es necesario recurrir a lo multilateral, especialmente a los tribunales competentes.
— Después de haber ingresado en este tema, ¿cree usted que es necesario redireccionar el enfoque del abordaje histórico que tradicionalmente se ha hecho?
— De los documentos pueden elaborarse muchas investigaciones con distintos enfoques, lo importante es que sirvan para ampliar el conocimiento sobre el tema.
— ¿Los tratados con Chile fueron objeto de análisis específico de su grupo? ¿Puede adelantarnos algunos resultados?
— No, éste es trabajo de juristas y diplomáticos. Nuestro aporte es en sistematizar la documentación sobre esos tratados desde el tratado mismo, los debates, las opiniones periodísticas del momento, etcétera.
— ¿Cuál es el aporte que considera más importante del trabajo de su equipo, en función de accionar en el proceso de la demanda de Bolivia contra Chile ante organismos internacionales?
— Existen muchos aportes, varios hay que mantenerlos en reserva. En todo caso, en esta primera fase, el principal aporte es la cantidad y calidad de documentos que comprueban la posesión de Bolivia sobre Atacama, base fundamental para demostrar la justicia de nuestra demanda.
Perfil
Nombre: Fernando Cajías de la Vega
Nació: 28-02-1949
Profesión: Historiador
Cargo: Asesor de Diremar
Carrera
Personaje notable por sus conocimientos en la historia boliviana. Fue prefecto de La Paz en 1989 y embajador de Bolivia en España, en 1993. En el gobierno de Carlos Mesa (2002) fue viceministro de Cultura. En la actualidad, es asesor histórico de Diremar.