Tránsito retuvo 146 taxis que no cumplían normas
Consejos. Los choferes recibieron una charla para reflexionar
En el marco del plan Bolivia Segura, el Organismo de Tránsito de La Paz realizó un operativo en el que se controló a poco menos de 1.000 vehículos en toda la ciudad.
El comandante del Batallón de Tránsito de La Paz, coronel José Villarroel, en contacto telefónico con La Razón, informó de que las acciones se desarrollaron en 10 puntos de la ciudad.
El objetivo principal del operativo, según Villarroel, era el de concienciar y motivar a los choferes a que presten un mejor servicio, tanto a nivel de transporte —poniendo sus vehículos a punto y en condiciones adecuadas— como en lo que se refiere a seguridad, al identificar tanto al conductor y a la línea del radiotaxi como el número de placa del motorizado.
«Los choferes deben exponer en un lugar visible la Tarjeta de Identificación del Conducto (TIC), que incluye el nombre y la fotografía del conductor, además del número de placa del motorizado», explicó Villarroel.
Control. El operativo comenzó a las 22.00 del viernes y terminó a las 2.00 de ayer. Se exigió que los vehículos tengan tanto sus placas delantera y trasera como las laterales, que cumplan con las dimensiones establecidas (30cm x 15cm ó 35cm x 15cm).
«Muchos de ellos no tenían el número de placa en el interior del vehículo, no funcionaban sus luces, tenían más de un número de teléfono como referencia de la empresa a la que representaban. También se controló que no porten objetos contundentes o armas blancas ni de fuego», precisó el responsable de Tránsito.
Villarroel aclaró que no se cobró «ni un solo peso» a los choferes de los vehículos retenidos, sino que se los llevó al garaje del batallón, donde el director del organismo paceño, coronel Johnny Troncoso, ofreció una charla de reflexión a los conductores para que cumplan las normas.
Tras la exposición habría surgido el compromiso de regularizar los aspectos observados en cada vehículo. Luego fueron devueltos a los conductores y éstos volvieron a sus labores.
En el operativo, Tránsito constató que hay conductores que trabajan con permisos de conducir caducos o sin identificación.
Que circulan sin el RUAT correspondiente a cada vehículo ni con las tarjetas de propiedad de los mismos. Ese hecho, advierte Villarroel, aumenta la inseguridad tanto de pasajeros como de los propios choferes del servicio público.