Animales en cautiverio están condenados a morir
El mascotismo fomenta el tráfico de animales de fauna silvestre.
FERIA. Luego de ser rescatado en una feria de venta de animales, una especie de mono se encuentra en una jaula
Nueve de cada 10 animales silvestres, capturados por traficantes, mueren fuera de su hábitat natural.
El otro está condenado a morir en cautiverio.
Especialistas recomiendan endurecer sanciones contra ese ilícito.
Animales silvestres capturados por traficantes están condenados a morir después de salir de su hábitat natural. Especialistas afirmaron que es muy difícil que ellos vuelvan a su hogar, lo que significa que están sentenciados a morir lejos de su hogar.
“No se pueden reinsertar, los animales que llegan del tráfico no pueden reinsertarse, o sea, están condenados a tener una vida (de cautiverio), si es que sobreviven, porque uno de cada diez animales que sale de su hábitat sobrevive y ellos están destinados a una vida de cautiverio o semicautiverio”, explicó a LA RAZÓN la cofundadora del refugio de animales La Senda Verde, Vicky Ossio.
El tráfico de animales silvestres, según Ossio, es cada vez más frecuente porque la gente adopta animales silvestres como mascotas y de esta forma se fomenta ese ilícito, penado por la Ley 700.
Tráfico de animales
“El mascotismo de fauna silvestre ha crecido muchísimo después de la pandemia (del COVID- 19) en Bolivia, es muy lamentable, hay mucho tráfico interno y por el otro lado hay mucho animal que sigue saliendo al exterior”, explicó.
La especialista agregó que la actividad minera y la extracción de madera son otros factores que contribuyen a que las especies pierdan sus hogares y lleguen a caer en manos de traficantes.
“Entran a sacar madera y matan tal cantidad de árboles que caen y con ellos cualquier cantidad de animales que luego son comercializados y con la minería de oro, también. Ahora, como que se ha puesto de moda que estos mineros tengan en esos lugares sus pequeños zoológicos de todos los animales que van encontrando mientras van destruyendo todo el entorno”, enfatizó Ossio.
La bióloga Andrea Morales sugieres que los animales de fauna silvestre se sometan a evaluaciones físicas y psicológicas.
Eso, antes de ser remitidos a un centro de custodia para su rehabilitación.
“Se hace esta evaluación inicial y luego el animal va a entrar en un tiempo de cuarentena y durante ese tiempo se le va a ir evaluando el progreso, ya sea de las heridas que tuviera o de los traumas psicológicos o físicos que pudiera tener el animal. Y dependiendo de la afectación que hubiera tenido previamente va a depender su tiempo de recuperación”, explicó Morales.
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La bióloga añadió que el proceso de restablecimiento de un animal de fauna silvestre contempla una evaluación física psicológica inicialmente. Un espacio donde se pueda desenvolver durante el proceso. Una dieta adecuada para cada especie y entrenamiento físico cuando el objetivo es la liberación hacia un área que debe contar con las características necesarias para que el animal se sienta cómodo.
“Otras cosas que se deben analizar es el origen de los animales porque así como en la ciudad los humanos tenemos una casa y un barrio donde vivimos, igual los animales en vida silvestre tienen sus nichos, tienen sus lugares de donde provienen. No es nomás soltar a un animal, hay que analizar que ese espacio tenga las condiciones para que ellos puedan acomodarse y, si bien va a haber la competencia, que normalmente deben tener, éste no debe ser demasiado grande como para matarlo (al animal)”, dijo Morales.
Las especies más amenazadas por los traficantes de fauna silvestre, según la especialista, son los monos.
Normalmente son utilizados como mascotas los tejones, loros, tortugas.
Incluso, en algunos casos, los reptiles son rescatados de traficantes o personas que se dedican a la venta de animales silvestres.
Animales del norte de La Paz
Por ejemplo, en el norte del departamento de La Paz y otras regiones tropicales del territorio.
En el país existen, al menos, 24 centros de custodia entre centros privados, bioparques y centros de rescate.
Sin embargo, no se debe apuntar al crecimiento de estas infraestructuras sino a la lucha contra la trata y tráfico de especies silvestres.
Esa actividad debe ser afrontada desde el Estado central, gobiernos departamentales y municipales
Aparte de eso se busca concienciar a la sociedad sobre la importancia de mantener a los animales en su hábitat natural.
En 2022, la Policía Forestal y Preservación del Medio Ambiente (Pofoma) atendió 1.137 casos, un 15 % más que en la gestión 2021.
Esa unidad atendió 637 casos, informó el jefe administrativo de la dirección nacional de Pofoma, capitán Franco Balboa.
POFOMA.
“La gestión 2022 cerramos con 1.137 casos atendidos, de los cuales la mayor cantidad corresponden a maltrato de animales domésticos, canes y felinos y, también, de vida silvestre, lo que es el tráfico”, explicó a LA RAZÓN el jefe policial.
Los registros de esa unidad policial dan cuenta que las regiones donde se presentaron más casos son Santa Cruz, Beni y Pando, departamentos donde se evidenció la mayor parte de los casos de tráfico de especies silvestres, porque esas regiones están más cerca de los bosques y muchas personas se dedican al ilícito.
Pofoma, en distintos operativos ejecutados en los nueve departamentos, rescató centenares de animales de fauna silvestre.
Se logró sacar del mercado artículos elaborados con base en la piel de animales protegidos.
“En fauna silvestre es un aproximado de 1.500 a 2.000 animales rescatados entre vivos y también sus derivados, además de sus partes, los cuales también son traídos a las unidades de Pofoma para que posteriormente la gobernación se haga cargo para su rehabilitación y posterior liberación”, informó Balboa.
Animales rescatados
Desde la Dirección de Recursos Naturales de la Gobernación de La Paz, su titular, Luis Saucedo, informó que en 2022 se rescató al menos 134 animales de fauna silvestre.
Además, otros 687 animales de fauna exótica.
La Policía Forestal y preservación del Medio Ambiente (Pofoma) coordina esas acciones con la Policía Boliviana.
Las especies están en distintos centros de custodia animal.
El funcionario lamentó que no exista respeto por la fauna silvestre y muchas personas tengan en sus inmuebles animales como mascotas.
Los dueños los enjaulan o encadenan.
Estas especies al no estar en su hábitat natural experimentan cambios que pueden culminar en su muerte.
Saucedo pidió a la población ayudar en la identificación de los inmuebles donde existan animales que viven en cautiverio.