El año empieza con inflación negativa debido a los alimentos
Bolivia cerró la gestión pasada con una inflación anualizada de 1,47%, la tasa más baja de la última década, apuntalada por un registro negativo en diciembre de 1,54% respecto a noviembre.
El Índice de Precios al Consumidor (IPC), que mide la tasa de inflación, registró en enero una variación negativa de 0,03% respecto a diciembre de 2019 por un decremento de precios, principalmente de la división alimentos y bebidas no alcohólicas.
Según el último reporte del Instituto Nacional de Estadística (INE), publicado en su sitio de internet, los precios de la papa, la cebolla, el plátano, la zanahoria, el tomate y el haba verde registraron la mayor incidencia porcentual negativa en el mes de enero.
Al contrario, añade el informe, la carne de pollo, la educación superior universitaria, la educación secundaria, la educación primaria, el servicio de la trabajadora del hogar y los quesos presentaron mayor incidencia positiva.
A excepción de la conurbación Santa Cruz y Cobija, las otras ciudades capitales y conurbaciones del país registraron una variación porcentual negativa.
Bolivia cerró la gestión pasada con una inflación anualizada de 1,47%, la tasa más baja de la última década, apuntalada por un registro negativo en diciembre de 1,54% respecto a noviembre. En 2010 se tuvo la mayor tasa de inflación de la década con 7,18%.
El Ministerio de Economía y Finanzas Públicas proyectó en el Presupuesto General del Estado 2020 que la tasa de inflación de este año llegará a 3,98%. Este dato, sin embargo, tiene que ser ratificado o modificado en el Programa Fiscal Financiero que cada año se suscribe con el Banco Central de Bolivia.